Volvo consigue con éxito desplazar 200 kilómetros tres automóviles sin necesidad de conductor y guiados por un camión situado en la parte delantera.

La marca sueca, en colaboración con la Unión Europea está desarrollando una novedosa tecnología con la que podríamos dejar de mantenernos atentos a la carretera y disfrutar del paisaje, la lectura o de la compañía.

Volvo realizó una prueba la semana pasada en una autopista de Cataluña durante 200 kilómetros, con tráfico rodado. Los turismos, un XC60, un V60 y un S60, a una velocidad de 85 km/h seguían a un camión conducido por un piloto profesional. Los automóviles, dispuestos de cámaras, radares de distancia y sensores, controlan los movimientos del camión mediante tecnología inalámbrica y "copian" sus acciones, ya sea girar, frenar o acelerar.

De esta manera, según Volvo, se ofrece al conductor una nueva opción de disfrutar del viaje. Pero además, es también una forma de mejorar la seguridad del tráfico, reducir el impacto ambiental y reducir los atascos.

Los anteriores ensayos del proyecto SARTRE (Safe Road Trains for the Environment), realizados en Suecia con diferentes condiciones de suelo, también fueron un éxito y ya se han alcanzado los 10.000 km de rodaje. El siguiente paso es analizar el impacto medioambiental del sistema.

De momento, Volvo ya ha conseguido llamar la atención de los conductores con un proyecto que podría convertir las carreteras en algo similar a un circuito Scalextric.