Juan Carlos Bermejo, que disputará la Presidencia de Ciudadanos a Rivera, es Ingeniero y empresario del sector de la informática. Es afiliado de la agrupación en Las Rozas, y competirá en las primarias por la Presidencia de Ciudadanos contra Albert Rivera y Diego de los Santos.

¿Qué le ha llevado a dar el paso de presentarse?
Pues porque pienso que la ejecutiva actual ha perdido la esencia de lo que es el “Movimiento Ciudadano”, ellos pretenden encapsular al partido en una especie de ideología de centro derecha liberal progresista y este partido que han definido así yo no sé como se llama pero desde luego, Ciudadanos no.

Su respuesta me lleva a preguntarle entonces,¿Cuál es su opinión sobre el cambio en la definición ideológica de Ciudadanos que ahora se define como “liberal progresista” abandonando la anterior concepción inicial socialdemócrata?
Honestamente, no sé por qué han tomado esa decisión porque tampoco la han explicado a la militancia, simplemente la directiva actual opina que es la forma de conseguir gobernar, porque su objetivo dicen que es gobernar en el 2019 y yo creo que eso es un camino equivocado y que no nos va a permitir gobernar, al contrario, lo que nos va es a reducir aún más la representación que tenemos.

¿Conviven diferentes familias o corrientes en Ciudadanos como pasa en otros partidos?
Yo creo que sí. Sobre todo en estos últimos días he podido hablar con mucha gente de muchas agrupaciones de toda España y efectivamente el partido se nutre de lo que es la sociedad civil en general. Hay gente obrera y trabajadora, hay clase media. Gente con ideología de centro. Hoy por hoy es patente que hay malestar con esta nueva tendencia, de hecho se ha materializado en las elecciones a compromisarios donde ha habido regiones de España donde no han recibido ese apoyo, sobre todo en Cataluña que es la cuna de Ciudadanos.

Has comentado que ha habido una desafiliación masiva en los últimos meses que ha alcanzado a las 10.000 bajas, ¿Esto es así?, ¿A qué lo atribuye?
Esos datos los ha dado el partido pero ellos dicen que no son exactamente bajas si no que la mayoría son revocaciones, es decir, personas que llevaban menos de seis meses y el partido ha tomado la decisión de darles de baja. Yo creo que la desafección es muy grande sobre todo porque ha habido muchos cambios de criterio, de coherencia, de credibilidad, y sobre todo se ha debido a que la estructura de organización de alguna forma no ha sido capaz de cuidar el talento y la profesionalidad en detrimento de la vulgaridad y la mediocridad que es la que más se ha instaurado en Ciudadanos a nivel sobre todo de agrupaciones. Hay muchísima gente que en el 2015 vino al partido a aportar y hoy, o se ha ido, o está en su casa sin participar.

Si resulta elegido, ¿Mantendrá los actuales acuerdos de investidura con PP y PSOE a nivel tanto nacional como autonómico?
Por supuesto que sí. Yo tengo que respetar lo que han firmado mis compañeros, al fin y al cabo eran los apoderados, ahora bien si las otras partes incumplen el más mínimo renglón de esos acuerdos, entonces yo seré implacable.

¿Qué le diría a aquellos que que le están acusando de estar buscando una cuota de protagonismo?
Opiniones hay para todo. La verdad que ni sabía que estaban comentando esas cosas. Pero probablemente tampoco se habrán molestado en llamarme para preguntarme por qué hago esto o ni siquiera me habrán leído. Yo creo que será por la mediocridad que se ha instalado en Ciudadnos en muchas zonas.

Por último, si no resulta elegido, ¿Teme alguna consecuencia negativa después del congreso por haber cuestionado el liderazgo de Rivera?
No, en absoluto. No temo ninguna consecuencia. Estamos haciendo política y aplicando la democracia interna en el partido y este es el momento en el que tenemos que enfrentar nuestras ideas y nuestra forma de ver la dirección del partido y no espero ninguna consecuencia que tampoco creo que beneficiase a nadie.