Un niño de ocho años ha muerto este lunes tras haber sido alcanzada la vivienda
en la que se encontraba, en un suburbio de la ciudad sueca de Gothenburg, por
una granada de mano, según han informado los medios locales.
La explosión se ha registrado en torno
a las 3.00 horas de la madrugada en
Biskopsgarden, cuando alguien que
estaba fuera del apartamento lanzó
una granada a través de la ventana al
salón. El portavoz de la Policía, Thomas
Fuxborg, ha indicado que el menor no
formaba parte de la familia registrada
en la vivienda.
"Esto es aberrante", ha señalado Fuxborg. "Desde fuera es imposible saber quién
está en el apartamento. Este (ataque), que ha afectado a un niño de ocho años
totalmente inocente, es despreciable", ha añadido, según declaraciones recogidas
por la edición sueca del diario 'The Local'.
La Policía, que ha cali⌀⌅cado el ataque
como asesinato, está investigando si
se trata de una venganza, ya que uno
de los hombres registrados en la
vivienda había sido condenado por un
tiroteo mortal en la misma zona que
tuvo lugar en un restaurante.
"Tenemos que ver si el motivo está
relacionado", ha señalado el portavoz.
"Nuestra teoría es que podría estarlo",
ha añadido.
Los servicios de emergencias
recibieron una llamada en torno a las
3.00 de la madrugada al escuchar una
gran explosión en la tercera planta. En la vivienda se encontraban en ese momento
cinco niños y varios adultos. "Pudo haber acabado mucho peor", ha señalado
Fuxborg.