Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Un lugar llamado desarrollo | Coaching

No hagas planes cuando estés abatido

Porque si haces planes serán los peores planes de toda tu vida
César Piqueras
sábado, 25 de junio de 2016, 09:30 h (CET)
Si algo aprendo cada vez que paso unos días flojos, es a no hacer muchos planes sobre el futuro, porque seguramente acabaría por autosabotearlo…

En ocasiones te encuentas algo más cansado de la cuenta. Las cosas no salen como quieres. Has salido a hacer ejercicio y tu cuerpo no da más de si. Tienes una relación que pasa por un mal momento. Te encuentras cansado anímica, física y emocionalmente…

Ok, pero o hagas planes.

Los planes se tienen que hacer cuando uno se encuentra al 120%, cuándo sabes que nada te va a parar.

Hacer planes cuando te encuentras roto, es algo así como empezar a cavar tu propia tumba. Hay gente que lo hace y luego se tira dentro.

Por este motivo, te recomiendo que cultives esta actitud de la que hablaba hace unos dias la del “tira pa´lante”. Porque en los momentos complicados es lo único que tienes que decirte a ti mismo/a.

No es momento de pensar si abandonas, si lo dejas… No. No está en la hoja de ruta. No es una posibilidad.

La única posibilidad es que tires hacia adelante con todas tus fuerzas, con el último aliento si hace falta, con tu última sonrisa.

No hagas planes cuando estés mal. Repito. Dedícate a ponerte en modo “yo puedo”, y sigue caminando. Pero no hagas planes. Todavía.

Deja que tu cuerpo recupere la vitalidad,
Deja que tu mente tenga más claridad,
Que tu corazón se encuentre algo más calentito.
Y entonces, dando un paseo emocionante por la playa construye el plan de tu vida.
Pero cuando estés roto/a, no hagas planes. Por favor.

Que tengas un gran día.

Noticias relacionadas

'In illo tempore', lo de dedicarse a la política estaba reservado a la elite, en interés de la comunidad, y se decía que era una vocación; término que sonaba bien para el auditorio de incautos de la época. Tras los cambios, y ya en un plano más realista, pasó a ser una profesión remunerada como cualquier otra dentro del panorama social, para no solo sobrevivir sino llevar la mejor vida posible.

Tenemos un presidente que miente hasta al médico; es de una condición y no hay quién le cambie. «No miento, es un cambio de opinión», ha llegado a decir. Ni siquiera se da cuenta de que miente en todo y a todos, como lleva años haciendo con Carles Puigdemont. Mintió al juez cuando acudió como testigo y miente a los españoles cada vez que improvisa una rueda de prensa.

Las clases dominantes de los países de la Unión Europea han dado un gravísimo paso en su entrega, económica, política y militar, a la superpotencia estadounidense y a sus inaceptables exigencias para que financiemos sus esfuerzos para tratar de retrasar su ocaso imperial.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto