España cierra el Super Mundial de Glasgow con nueve metales: seis medallas para Ricardo Ten que alzó dos oros en el scratch y en el omnium y plata en la persecución, oro en ciclismo en carretera en la contrarreloj individual y plata en ruta, además del bronce por equipos. Sergio Garrote consiguió el oro en la contrarreloj de handbikes y sumó una plata en la prueba en ruta. Maurice Eckhard se hizo con una plata en el scratch. Además, el equipo español consiguió el bronce en velocidad por equipos formado por Ricardo Ten, Pablo Jaramillo y Alfonso Cabello. 

Glasgow acogió el primer Super Mundial de la historia en el que convivieron deportistas olímpicos y paralímpicos en pista, ruta, cross, trial, BMX y hasta trece disciplinas más de este deporte.

La primera medalla para los nuestros llegó con una plata de Ricardo Ten en la clase C1 (ciclistas con mayor discapacidad física) en la persecución individual, en la que además se quedó a menos de un segundo del campeón. Ten se proclamó campeón del mundo en el scratch en una carrera impecable del valenciano que decidió atacar a falta de 15 vueltas descolgando a sus rivales y proclamándose campeón del scratch y del ómnium.

Maurice Eckhard se alzó con la medalla de plata en el scratch C2 en una jornada en la que también destacaron los cuartos puestos de Ricardo Ten y Alfonso Cabello (Kilómetro) y Eduardo Santas (Scratch).

La última de las medallas en pista llegó en la prueba de velocidad por equipos, en una formidable actuación del combinado formado por Ricardo Ten, Pablo Jaramillo y Alfonso Cabello.

En el ciclismo en carreta que se disputó a continuación de la pista, Ricardo Ten consiguió la medalla de oro en la contrarreloj individual de 17 kilómetros disputada en Dumfries & Galloway y en el primer punto intermedio ya aventajaba en 11 segundos a su máximo rival, el alemán Michael Teuber. Además, sumo otra plata en ruta en la que se quedó a pocos centímetros de conseguir un doblete del oro conseguido por el chino Weicong Liang.

Sergio Garrote (actual campeón del mundo y campeón paralímpico) se proclamó campeón del mundo de la crono de handbikes, con un tiempo de 17'08”52, a casi 38 km./h de media, aventajando en 47 segundos al francés Jouanny, segundo, y en poco más de un minuto al italiano Mazzone. Además, Sergio alzó la medalla de plata en la prueba en ruta de la clase H2 que lideró desde el principio en solitario y en la que fue superado en finalmente por el francés Jouanny.