| ||||||||||||||||||||||
|
|
Pasar de exiliado a emprendedor en Alemania | |||
Aceptación, esperanza y persistencia son las claves | |||
| |||
Gabriela López El joven exiliado llega a Alemania con su formación española y un par de mudas en la maleta. Y lo primero que suele ocurrir, sea cual sea su nivel de alemán, es que descubre que su manejo del idioma es mucho peor de lo que pensaba. Así que, además de buscar trabajo, se da cuenta de que también debe apuntarse en una academia. Ése es el primer bache con el que se topa. Pero tiene muchas más preocupaciones: ¿debe registrarse en la Embajada?, ¿el DNI le vale como documento de identidad?, ¿y la tarjeta sanitaria para ir al médico?, ¿tiene que traducir el curriculum?, ¿puede alquilar un piso?. Lejos de paralizarse, nuestro joven exiliado se abre camino.
Aceptación, esperanza y persistencia Ésas son las características que desarrollan los jóvenes españoles exiliados para sobrevivir y triunfar. Conocen la situación y aceptan las dificultades que se plantean, y lejos de resignarse y quedarse en casa, confían en la voz interior que les dice “al final todo irá bien, inténtalo, persiste, y conseguirás todo lo que quieras”. Ésa es la clave para aguantar. Desilusionarse y rendirse, el peor error que pueden cometer. Los jóvenes exiliados en Alemania luchan por abrirse camino como los que más. Los cursos de alemán en Berlín están llenos de estudiantes españoles que tienen claro que para competir en el mundo laboral deben dominar el idioma. De este esfuerzo y persistencia están hechos los emprendedores. Por ello las pequeñas empresas que ya se han fundado no son pocas; e incluso las iniciativas promovidas por españoles alcanzan una alta popularidad, como la campaña “No te quedes sin voz”, de la Red Equo Joven, protagonizada por Pepa, la flamenca exiliada, con el objetivo de fomentar el voto desde el extranjero para las imminentes elecciones al Parlamento Europeo. A los exiliados españoles no les faltan conocimientos y voluntad y, aunque se les pondrá a prueba, los que la superen triunfarán. Los primeros casos de éxito ya se pueden comprobar. |
La tasa turística es un recargo que se cobra por cada noche sobre el precio de la estancia en los distintos alojamientos turísticos (hoteles, apartamentos, campings, casas rurales, albergues juveniles y similares) de una ciudad, región o país. Este tipo de tasa tiene el objetivo de recaudar fondos para mantener y mejorar la infraestructura turística, contribuir a la sostenibilidad ambiental, promover el turismo responsable, y/o financiar la promoción turística.
Según un estudio basado en datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), a pesar del aumento del turismo, la contratación del sector durante el primer semestre ha descendido ligeramente respecto al mismo periodo del año pasado. Entre enero y junio se registraron 1.253.335 firmas, un 1,5% menos que las 1.272.738 contabilizadas en 2024, lo que refleja una moderación en el ritmo de crecimiento de la demanda de profesionales en el sector.
España entra en agosto con una ola de calor intensa que dispara el riesgo de incendios forestales. Las temperaturas superan los 42 °C en varias regiones, con humedad por debajo del 20% y vegetación abundante y seca tras una primavera lluviosa. Aunque los embalses están por encima del 60% y no hay sequía general, el peligro es real: calor extremo, combustible vegetal y un clima cada vez más hostil. A ello se suman causas humanas que cada año agravan la amenaza.
|