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Cómo usar el vibrador

Abre un camino nuevo para explorar lo que es adecuado y natural para ti
Ana de Calle
viernes, 24 de mayo de 2013, 14:37 h (CET)

El Sexo es Vida
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Últimamente has descubierto que si aprendes a relajarte, a leer historias eróticas y se te ocurren ciertas fantasías te preparas  para estar disponible sexualmente. Si además utilizas un lubricante tu experiencia es más placentera cuando te tocas ... El vibrador te abre un camino nuevo para explorar lo que es adecuado y natural para ti. Intenta usarlo.

Algunas mujeres tienen reservas si utilizan un vibrador para conseguir el orgasmo. Aunque excitarse y provocarse el orgasmo utilizando el vibrador es tan natural como el que se obtiene por otros medios. Además detrás de la máquina hay una persona! Tu lo controlas, y tienes que ensayar hasta saber cómo te gusta más  variando la presión y el punto donde lo aplicas, igual que esos toques y caricias manuales. 

Propónselo a él si estás en pareja, para que podáis compartir ambos vuestros sentimientos positivos y negativos, si es que los hay ... Y a algunos hombres les gusta estimularse los genitales con el vibrador. Al principio tratar de encontrar juntos no los placeres sexuales, sino los sensuales, los relajantes, a través de este recurso. Empezar por el cuello, la espalda, los músculos de los brazos y de las piernas -no incluyendo los genitales- porque el vibrador es excelente para probar cosas diferentes y para obtener un placer o una relajación extra.

Por ahora estate relajada y date la oportunidad de probarlo y cuando hayas conseguido tu objetivo aprende otras maneras de conseguir el orgasmo. Después verás otras formas de enriquecer tu respuesta ante el orgasmo, cuando lo hayas obtenido unas cuantas veces. Por el momento date la ocasión  de descubrir que es una forma de estimularte grata y que te da buenos resultados.

Para empezar a usarlo aplica una loción o un aceite en el cuerpo. Nunca utilices el vibrador con la piel mojada, ni en el agua, a no ser que la máquina esté preparada para ello. Recorre el cuerpo con él desde la cabeza, el cuero cabelludo y explora la cara, el cuello, los hombros y baja por los brazos, manos, llega a los pechos y accede al resto del cuerpo. Al principio excluye los genitales.

Pasados unos días de práctica aplícalo sobre los genitales, quizá te sorprenda las vibraciones y la proximidad del clítoris, tal y como lo hacías antes con los dedos. Varía la presión, los movimientos y el lugar del vibrador. Si tiene varios accesorios, pruébalos. Si alguno se sujeta con la mano y la hace vibrar introduce uno o dos dedos en la vagina y pásalo alrededor de los genitales. Ve despacio, con tiempo y no busques la excitación, sólo relájate y observa la reacción de tu cuerpo ante la nueva estimulación. Hazlo durante quince minutos y observa qué diferencias has encontrado entre estimularte con los dedos o con el vibrador. 

El motivo por el que animo a las mujeres a que experimenten con otro método es para que sean más flexibles y tengan más libertad en la excitación sexual. Y si tienes problemas y el orgasmo es tu mayor deseo, y no te haces con el vibrador consúltame quizá tienes otros problemas que podemos resolver en Terapia Sexual.

Ana de Calle. Sexóloga y Terapéuta de Pareja
+34 639 555 994

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