El Instituto de Religiosas de San José de Gerona se suma a la celebración del Domund 2016 para reivindicar la causa misionera. La Institución fundada por María Gay Tibau lleva más de 148 años trabajando para acercar la espiritualidad allí donde la Iglesia no está asentada

El Instituto de Religiosas de San José de Gerona, institución religiosa fundada por la Madre María Gay Tibau, se suma el próximo 23 de octubre a la celebración del Domund, Jornada Mundial de las Misiones, cuyo objetivo principal es apoyar a la causa misionera y acercar la espiritualidad allí donde la Iglesia todavía no está asentada.

El Instituto de Religiosas de San José de Gerona quiere poner sobre la mesa la importancia de las misioneras y su valiosa labor en zonas como África central o Sur América, lugares donde, a lo largo de 148 años, las Religiosas de San José han prestado atención social y sanitaria, además de trabajar en programas de desarrollo, luchar contra la desigualdad social que fomentan los conflictos bélicos y velar por los servicios básicos.

La Hermana Ana Mérida Montoya, Delegada General de Misiones del Instituto de Religiosas de San José de Gerona, afirma que el propósito del IRSJG es “facilitar el acceso a las personas necesitadas a asistencia técnica humana y espiritual de la mejor calidad posible, mediante el acompañamiento y programas específicos de desarrollo”. Además, añade que las misioneras son “mujeres que con su vida y esperanza decidieron ir junto al pueblo sencillo ligeras de equipaje, entregadas al trabajo anónimo y cotidiano compartiendo con mujeres, hombres, jóvenes, niños, ancianos su suerte, vida y sufrimientos”.

El Domund 2016, que este año tiene como lema 'Sal de tu tierra', ya ha realizado varios actos en toda la geografía catalana, destacando el pregón de Pilar Rahola el pasado 15 de octubre en el Templo Expiatorio de la Sagrada Familia.

El Instituto de Religiosas de San José de Gerona fundada por la venerable Madre María Gay Tibau en 1870 en la ciudad de Girona cuya misión es prestar asistencia a las necesidades sanitarias, sociales y espirituales de los enfermos y los más desfavorecidos. El instituto cuenta con clínicas y residencias en Europa que contribuyen, con parte de los recursos que generan, a la realización de la Obra Social que el Instituto desarrolla en África y América Latina con centros de salud y proyectos sociales concretos.