Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Internacional
El Tiranosaurio de la calle Yegros ensayó una defensa para justificar su fraude de veinte mil millones, a través de su propio diario

Zucolillo se llenó las faltriqueras con sus celulares de oro

|

El senador Víctor Bogado ironizó esta semana sobre la endeble defensa ensayada por Zucolillo, acusado de llenarse las faltriqueras con al menos veinte mil millones pertenecientes al erario público, a través del negociado de “los celulares de oro”. Bogado hizo notar que el Tiranosaurio de la calle Yegros (Zucolillo), tuvo que defenderse a sí mismo a través del diario de su propiedad, teniendo en cuenta que la mayoría de los ciudadanos ya se encuentra hastiada de sus delirios dictatoriales y sus campañas falaces.

“Solo Zucolillo es capaz de defender a Zucolillo”, aseguró Bogado. Bogado había hecho notar que la empresa telefónica del dueño de ABC color había estafado al estado paraguayo, haciéndose devolver veinte mil millones a través de un acuerdo fantasma de la CONATEL. Zucolillo aseguró a través de su diario que en realidad existía un dictamen de la Procuraduría, pero Bogado esclareció que dicho dictamen, curiosamente, solo lo tenía la empresa Núcleo S.A. del dueño de ABC.

El dictamen, calificado como “fantasma” por Bogado, supuestamente había blanqueado la operación de Zucolillo. El único inconveniente es que el documento no pudo ser encontrado en ningún lugar, ni siquiera en la CONATEL o en los registros de la Procuraduría.

Además, el dictamen fantasma cuya única copia la tiene Zucolillo, no opina sobre la cuestión sino que relata los hechos al estilo de una pintura blanca, para blanquear la operación por la cual Zucolillo despojó al estado de veinte mil millones.

Es evidente que si se hizo un dictamen, fue fabricado de favor para intentar dar un viso de legalidad al fraude montado por Zucolillo. La CONATEL no tuvo en cuenta el supuesto dictamen, sino que se lavó las manos con una llamativa renovación “ad referéndum” de la licencia a la espera de una resolución judicial del asunto que se tramitaba en el Tribunal de Cuentas.

Vale decir, el supuesto dictamen fantasma cuya única copia dice poseerla Zucolillo, no solo no aparece por ningún lado sino que además nunca tuvo efecto alguno en las operaciones. Curiosamente, en el año 2009 el director de CONATEL “amigo”, Jorge Seall, usó ese dictamen que fue solicitado para otra cosa, para justificar un descolocado “acuerdo privado” por el cual se le devolvían más de dos mil millones a la empresa de Zucolillo.

Bogado señaló que los documentos corroboran de manera incontestable el fraude de veinte mil millones perpetrado por el Tiranosaurio de la calle Yegros.

Zucolillo, dicen las denuncias, evitó pagar sus deudas en el año 2012 y recién lo hizo con trampas en el 2015, pues volvió a realizar los depósitos bajo protesta y solo porque deseaba participar de la licitación para la banda 4G, que fue adjudicada a otras empresas.

La contundente y documentada denuncia de Bogado puntualiza que el fraude suma los dos mil millones que Zucolillo evitó pagar en 2002, en el 2007 evitó pagar más de seis millones y en el 2012 volvieron a eludir el pago, que se realizó bajo protesta recién en el 2015 a la espera de poder volver a recuperar el dinero con un gobierno amigo.

Los hechos relatados y documentados por Bogado son una radiografía del inculto y reaccionario empresariado enriquecido al amparo de las dictaduras neo nazis que asolaron a países como Paraguay, y demuestran la forma en que amasaron fortuna al amparo de la impunidad tenebrosos personajes como Zucolillo.

Tal vez todos estos detalles que ahora salen a luz ayuden a entender porqué los empresarios como Zucolillo no solo se declaraban periódica y públicamente furibundos anticomunistas, sino que también defendían a los dictadores vecinos como Pinochet o Videla y entregaban fuertes sumas como donaciones a los represores y torturadores al servicio de la dictadura.

Lo dijo un sabio pensador: La impunidad vuelve valientes a los cobardes y osados a los pusilánimes, y cuando cobardes y pusilánimes alcanzan el poder sus sucias barbas lo aniquilan todo.

Zucolillo se llenó las faltriqueras con sus celulares de oro

El Tiranosaurio de la calle Yegros ensayó una defensa para justificar su fraude de veinte mil millones, a través de su propio diario
Luis Agüero Wagner
viernes, 26 de agosto de 2016, 09:42 h (CET)
El senador Víctor Bogado ironizó esta semana sobre la endeble defensa ensayada por Zucolillo, acusado de llenarse las faltriqueras con al menos veinte mil millones pertenecientes al erario público, a través del negociado de “los celulares de oro”. Bogado hizo notar que el Tiranosaurio de la calle Yegros (Zucolillo), tuvo que defenderse a sí mismo a través del diario de su propiedad, teniendo en cuenta que la mayoría de los ciudadanos ya se encuentra hastiada de sus delirios dictatoriales y sus campañas falaces.

“Solo Zucolillo es capaz de defender a Zucolillo”, aseguró Bogado. Bogado había hecho notar que la empresa telefónica del dueño de ABC color había estafado al estado paraguayo, haciéndose devolver veinte mil millones a través de un acuerdo fantasma de la CONATEL. Zucolillo aseguró a través de su diario que en realidad existía un dictamen de la Procuraduría, pero Bogado esclareció que dicho dictamen, curiosamente, solo lo tenía la empresa Núcleo S.A. del dueño de ABC.

El dictamen, calificado como “fantasma” por Bogado, supuestamente había blanqueado la operación de Zucolillo. El único inconveniente es que el documento no pudo ser encontrado en ningún lugar, ni siquiera en la CONATEL o en los registros de la Procuraduría.

Además, el dictamen fantasma cuya única copia la tiene Zucolillo, no opina sobre la cuestión sino que relata los hechos al estilo de una pintura blanca, para blanquear la operación por la cual Zucolillo despojó al estado de veinte mil millones.

Es evidente que si se hizo un dictamen, fue fabricado de favor para intentar dar un viso de legalidad al fraude montado por Zucolillo. La CONATEL no tuvo en cuenta el supuesto dictamen, sino que se lavó las manos con una llamativa renovación “ad referéndum” de la licencia a la espera de una resolución judicial del asunto que se tramitaba en el Tribunal de Cuentas.

Vale decir, el supuesto dictamen fantasma cuya única copia dice poseerla Zucolillo, no solo no aparece por ningún lado sino que además nunca tuvo efecto alguno en las operaciones. Curiosamente, en el año 2009 el director de CONATEL “amigo”, Jorge Seall, usó ese dictamen que fue solicitado para otra cosa, para justificar un descolocado “acuerdo privado” por el cual se le devolvían más de dos mil millones a la empresa de Zucolillo.

Bogado señaló que los documentos corroboran de manera incontestable el fraude de veinte mil millones perpetrado por el Tiranosaurio de la calle Yegros.

Zucolillo, dicen las denuncias, evitó pagar sus deudas en el año 2012 y recién lo hizo con trampas en el 2015, pues volvió a realizar los depósitos bajo protesta y solo porque deseaba participar de la licitación para la banda 4G, que fue adjudicada a otras empresas.

La contundente y documentada denuncia de Bogado puntualiza que el fraude suma los dos mil millones que Zucolillo evitó pagar en 2002, en el 2007 evitó pagar más de seis millones y en el 2012 volvieron a eludir el pago, que se realizó bajo protesta recién en el 2015 a la espera de poder volver a recuperar el dinero con un gobierno amigo.

Los hechos relatados y documentados por Bogado son una radiografía del inculto y reaccionario empresariado enriquecido al amparo de las dictaduras neo nazis que asolaron a países como Paraguay, y demuestran la forma en que amasaron fortuna al amparo de la impunidad tenebrosos personajes como Zucolillo.

Tal vez todos estos detalles que ahora salen a luz ayuden a entender porqué los empresarios como Zucolillo no solo se declaraban periódica y públicamente furibundos anticomunistas, sino que también defendían a los dictadores vecinos como Pinochet o Videla y entregaban fuertes sumas como donaciones a los represores y torturadores al servicio de la dictadura.

Lo dijo un sabio pensador: La impunidad vuelve valientes a los cobardes y osados a los pusilánimes, y cuando cobardes y pusilánimes alcanzan el poder sus sucias barbas lo aniquilan todo.

Noticias relacionadas

Estamos fuertemente imbuidos, cada uno en lo suyo, de que somos algo consistente. Por eso alardeamos de un cuerpo, o al menos, lo notamos como propio. Al pensar, somos testigos de esa presencia particular e insustituible. Nos situamos como un estandarte expuesto a la vista de la comunidad y accesible a sus artefactos exploradores.

En medio de los afanes de la semana, me surge una breve reflexión sobre las sectas. Se advierte oscuro, aureolar que diría Gustavo Bueno, su concepto. Las define el DRAE como “comunidad cerrada, que promueve o aparenta promover fines de carácter espiritual, en la que los maestros ejercen un poder absoluto sobre los adeptos”. Se entienden también como desviación de una Iglesia, pero, en general, y por extensión, se aplica la noción a cualquier grupo con esos rasgos.

Acostumbrados a los adornos políticos, cuya finalidad no es otra que entregar a las gentes a las creencias, mientras grupos de intereses variados hacen sus particulares negocios, quizá no estaría de más desprender a la política de la apariencia que le sirve de compañía y colocarla ante esa realidad situada más allá de la verdad oficial. Lo que quiere decir lavar la cara al poder político para mostrarle sin maquillaje.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto