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Opinión
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¿Será verdad que los españoles tenemos lo que nos merecemos?

¿Estamos gobernados por Leviatán?

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Sí, a todas luces creo que podemos afirmar que somos gobernados por Leviatán. Sin embargo considero oportuno, conveniente y necesario que aclaremos, para quien lo desconozca, quien es Leviatán.

            

Este nombre se le aplica a una bestia marina gigante, de la que ya en la Biblia se hace mención. Según el Génesis fue creada por Dios, al igual que todas las criaturas, animales hombres y seres inanimados. En el libro de Job se le describe como un monstruo de cuya boca salen extensas centellas ígneas, su nariz es un manantial inagotable de humo que, cual olla hirviendo, quema todo lo que se ponga en su contacto, es el vapor ígneo causante de tantas desgracias entre los humanos. Cuando expele su aliento, enciende los carbones que estén cerca, es decir, las pasiones humanas más bajas y detestables.

            

La creencia que se tiene sobre él en los cultos satánicos es que es uno de los tres demonios principales, junto a Lucifer y Belial. La trinidad negra, oscura, pervertida y tétrica de la tenebrosidad, opuesta a la LUZ de la Santísima Trinidad.

            

Considero que Leviatán, Belial y Belcebú, son el mismo Cancerbero tricefálico dispuesto a destruir a la Humanidad.

            

Este ser monstruoso e infernal tiene para desgracia de los españoles un clon que es el que está dirigiendo las riendas del Gobierno español.

            

Creo que no es necesario exponer su nombre ya que todos estamos sufriendo su tiranía, despotismo y malevolencia.

            

Pienso que no es un despropósito considerar a este ser falaz, trapisondista, enredador y marrullero como Leviatán.

            

De su boca, cual la del monstruo mencionado, no salen palabras tranquilizadoras, sosegadoras y benefactoras. Todo lo contrario. Cada vez que habla da la impresión de que está enfadado y encabritado. Utiliza un tono prepotente de superioridad como si los que lo escuchamos y sufrimos fuésemos criaturas que aún se mantienen en una niñez perpetua a las que se puede conformar y engatusar con falacias constantes.

            

Al igual que se dice en el libro de Job, de su nariz sale un continuo chorro de humo, son sus palabras engañosas de vendedor de fumarada, que sorprenden a los incautos por un momento, pero que luego, a la hora que se plasmen en realidades tangibles, mensurables y medibles, solo nos encontramos con la vacuidad de lo que no existe.

            

El vapor que bulle de esta olla en ebullición es el engaño, la mentira y las falacias continuas que queman nuestra paciencia y achicharran nuestra capacidad de sufrimiento.

            

De pequeño me enseñaron que el demonio es el padre de la mentira, Pedro Sánchez, príncipe de la mentira y rey del engaño ¿qué es? Leviatán redivivo.

            

Su único deseo, acuciado por su prepotencia, es mantenerse en el poder, aunque sea a costa de la desgracia y la perdición de los españoles a los que desprecia olímpicamente.

            

Para él solo somos unos pobres discapacitados mentales a los que se puede engatusar siempre en su provecho personal.

            

Por desgracia, este hecho es real y verdadero, sin lugar a controversias, ya que es patente. En las últimas elecciones generales del  ppdo. Julio, prácticamente un tercio de los españoles han manifestado que se les da un bledo los engaños, traiciones, pactos con los que quieren fragmentar a España, sus traidores, malversadores y toda la calaña de raleas espurias que este mal nacido apadrina, encubre, protege y la hace participar en el gobierno que sufrimos todos los hombres de buena fe, poseedores de principios que rechaza todas las iniquidades que este ser, no me atrevo a llamarlo persona, nos está haciendo sufrir y padecer.

            

El partido que representa ha sido la segunda fuerza más elegida por cierta parte de españoles que demuestran con ello que están dispuestos y conformes en comulgar con ruedas de molino, a tragar sapos y culebras y a despreciar toda la dignidad que ennoblece al ser humano a transigir con la corrupción, y lo que es peor, a que España sea troceada y desmembrada como el carnero que llevan al matadero.

            

Durante nuestro Siglo de Oro, bullía por nuestras universidades la pregunta de si era lícito matar al tirano, “licet nocere tyrannum” (los tiranicidas Armodio y Aristogiton por matar al tirano de Atenas Hiparco, se ganaron un lugar en la Historia), era la pregunta que enardecía los ánimos.

            

Nada menos que el padre Mariana decía lo siguiente:

Si el rey atropella la república, entrega al robo las fortunas públicas y las privadas, y vulnera y desprecia las leyes públicas y la sacrosanta religión; si su soberbia, su arrogancia y su impiedad llegasen hasta insultar a la divinidad misma, entonces no se le debe disimular de ningún modo”.

(Juan de Mariana, De Rege et Regis Institutione, Toledo, 1599).

            

Tomás de Aquino, posiblemente uno de los precedentes de las revoluciones burguesas (entiéndase la de la Bastilla), inspiradas en el liberalismo clásico (los liberales se creen que son recientes, falta de conocimientos), preconizaba que estaba permitido moralmente el derecho a la rebelión contra el poder opresivo, e incluso el regicidio, del rey que traicionase a su pueblo.

            

Doctos y eminentes filósofos y teólogos eran partidarios de que si el gobernante, perjudicaba dañinamente al pueblo debería de ser eliminado para el bien de la sociedad. Es lícito que muera un hombre si la sociedad se beneficia.

            

España, espejo en el que se han mirado las naciones, luz del mundo y blasón de la Humanidad, como siempre a través de la historia, tus desnaturalizados hijos se verán contentos si desapareces.

            

Hoy la pena de muerte física está prohibida, pero no la política, ya estamos tardando en deshacernos del tirano que quiere romper nuestra España pactando con quienes “lo volverán a hacer”.

            

Amando de Miguel dice:

“¿Qué pueden hacer los ciudadanos en el supuesto de que un gobernante democrático con ínfulas autoritarias lleve la nación al desastre? En aquel tiempo (antiguo), la muerte que se preconizaba no era figurada sino física y real.

            

La pena de muerte (como la esclavitud y tantas otras tropelías jurídicas) se halla proscrita, y está bien que así sea (yo añado: bendita sea la hora). Entonces, ¿qué pueden hacer los ciudadanos en el supuesto de que un gobernante democrático con ínfulas autoritarias lleve la nación al desastre?

            

En el mundo existen no pocos casos de lo que antaño se llamaban tiranías, despotismos, dictaduras. La situación española actual es una de tantas ilustraciones hodiernas, muy comunes en el mundo hispánico. Nos sirve de modelo para calibrar lo que se puede hacer para destituir a un poderoso desaforado. Caben varias opciones, a cuál más difícil de llevar a cabo. Se me ocurren seis posibilidades dignas de estudio”.

            

No las expongo pues no quiero hacer este trabajo excesivamente oneroso. Quien lo desee puede buscarlo en Internet.

            

Bien, a pesar de ello, en las últimas votaciones, este  tirano, dispuesto a destruir a España, ha obtenido la segunda posición en las últimas elecciones.

            

¿Será verdad que los españoles tenemos lo que nos merecemos?

¿Estamos gobernados por Leviatán?

¿Será verdad que los españoles tenemos lo que nos merecemos?
Manuel Villegas
miércoles, 20 de septiembre de 2023, 10:34 h (CET)

Sí, a todas luces creo que podemos afirmar que somos gobernados por Leviatán. Sin embargo considero oportuno, conveniente y necesario que aclaremos, para quien lo desconozca, quien es Leviatán.

            

Este nombre se le aplica a una bestia marina gigante, de la que ya en la Biblia se hace mención. Según el Génesis fue creada por Dios, al igual que todas las criaturas, animales hombres y seres inanimados. En el libro de Job se le describe como un monstruo de cuya boca salen extensas centellas ígneas, su nariz es un manantial inagotable de humo que, cual olla hirviendo, quema todo lo que se ponga en su contacto, es el vapor ígneo causante de tantas desgracias entre los humanos. Cuando expele su aliento, enciende los carbones que estén cerca, es decir, las pasiones humanas más bajas y detestables.

            

La creencia que se tiene sobre él en los cultos satánicos es que es uno de los tres demonios principales, junto a Lucifer y Belial. La trinidad negra, oscura, pervertida y tétrica de la tenebrosidad, opuesta a la LUZ de la Santísima Trinidad.

            

Considero que Leviatán, Belial y Belcebú, son el mismo Cancerbero tricefálico dispuesto a destruir a la Humanidad.

            

Este ser monstruoso e infernal tiene para desgracia de los españoles un clon que es el que está dirigiendo las riendas del Gobierno español.

            

Creo que no es necesario exponer su nombre ya que todos estamos sufriendo su tiranía, despotismo y malevolencia.

            

Pienso que no es un despropósito considerar a este ser falaz, trapisondista, enredador y marrullero como Leviatán.

            

De su boca, cual la del monstruo mencionado, no salen palabras tranquilizadoras, sosegadoras y benefactoras. Todo lo contrario. Cada vez que habla da la impresión de que está enfadado y encabritado. Utiliza un tono prepotente de superioridad como si los que lo escuchamos y sufrimos fuésemos criaturas que aún se mantienen en una niñez perpetua a las que se puede conformar y engatusar con falacias constantes.

            

Al igual que se dice en el libro de Job, de su nariz sale un continuo chorro de humo, son sus palabras engañosas de vendedor de fumarada, que sorprenden a los incautos por un momento, pero que luego, a la hora que se plasmen en realidades tangibles, mensurables y medibles, solo nos encontramos con la vacuidad de lo que no existe.

            

El vapor que bulle de esta olla en ebullición es el engaño, la mentira y las falacias continuas que queman nuestra paciencia y achicharran nuestra capacidad de sufrimiento.

            

De pequeño me enseñaron que el demonio es el padre de la mentira, Pedro Sánchez, príncipe de la mentira y rey del engaño ¿qué es? Leviatán redivivo.

            

Su único deseo, acuciado por su prepotencia, es mantenerse en el poder, aunque sea a costa de la desgracia y la perdición de los españoles a los que desprecia olímpicamente.

            

Para él solo somos unos pobres discapacitados mentales a los que se puede engatusar siempre en su provecho personal.

            

Por desgracia, este hecho es real y verdadero, sin lugar a controversias, ya que es patente. En las últimas elecciones generales del  ppdo. Julio, prácticamente un tercio de los españoles han manifestado que se les da un bledo los engaños, traiciones, pactos con los que quieren fragmentar a España, sus traidores, malversadores y toda la calaña de raleas espurias que este mal nacido apadrina, encubre, protege y la hace participar en el gobierno que sufrimos todos los hombres de buena fe, poseedores de principios que rechaza todas las iniquidades que este ser, no me atrevo a llamarlo persona, nos está haciendo sufrir y padecer.

            

El partido que representa ha sido la segunda fuerza más elegida por cierta parte de españoles que demuestran con ello que están dispuestos y conformes en comulgar con ruedas de molino, a tragar sapos y culebras y a despreciar toda la dignidad que ennoblece al ser humano a transigir con la corrupción, y lo que es peor, a que España sea troceada y desmembrada como el carnero que llevan al matadero.

            

Durante nuestro Siglo de Oro, bullía por nuestras universidades la pregunta de si era lícito matar al tirano, “licet nocere tyrannum” (los tiranicidas Armodio y Aristogiton por matar al tirano de Atenas Hiparco, se ganaron un lugar en la Historia), era la pregunta que enardecía los ánimos.

            

Nada menos que el padre Mariana decía lo siguiente:

Si el rey atropella la república, entrega al robo las fortunas públicas y las privadas, y vulnera y desprecia las leyes públicas y la sacrosanta religión; si su soberbia, su arrogancia y su impiedad llegasen hasta insultar a la divinidad misma, entonces no se le debe disimular de ningún modo”.

(Juan de Mariana, De Rege et Regis Institutione, Toledo, 1599).

            

Tomás de Aquino, posiblemente uno de los precedentes de las revoluciones burguesas (entiéndase la de la Bastilla), inspiradas en el liberalismo clásico (los liberales se creen que son recientes, falta de conocimientos), preconizaba que estaba permitido moralmente el derecho a la rebelión contra el poder opresivo, e incluso el regicidio, del rey que traicionase a su pueblo.

            

Doctos y eminentes filósofos y teólogos eran partidarios de que si el gobernante, perjudicaba dañinamente al pueblo debería de ser eliminado para el bien de la sociedad. Es lícito que muera un hombre si la sociedad se beneficia.

            

España, espejo en el que se han mirado las naciones, luz del mundo y blasón de la Humanidad, como siempre a través de la historia, tus desnaturalizados hijos se verán contentos si desapareces.

            

Hoy la pena de muerte física está prohibida, pero no la política, ya estamos tardando en deshacernos del tirano que quiere romper nuestra España pactando con quienes “lo volverán a hacer”.

            

Amando de Miguel dice:

“¿Qué pueden hacer los ciudadanos en el supuesto de que un gobernante democrático con ínfulas autoritarias lleve la nación al desastre? En aquel tiempo (antiguo), la muerte que se preconizaba no era figurada sino física y real.

            

La pena de muerte (como la esclavitud y tantas otras tropelías jurídicas) se halla proscrita, y está bien que así sea (yo añado: bendita sea la hora). Entonces, ¿qué pueden hacer los ciudadanos en el supuesto de que un gobernante democrático con ínfulas autoritarias lleve la nación al desastre?

            

En el mundo existen no pocos casos de lo que antaño se llamaban tiranías, despotismos, dictaduras. La situación española actual es una de tantas ilustraciones hodiernas, muy comunes en el mundo hispánico. Nos sirve de modelo para calibrar lo que se puede hacer para destituir a un poderoso desaforado. Caben varias opciones, a cuál más difícil de llevar a cabo. Se me ocurren seis posibilidades dignas de estudio”.

            

No las expongo pues no quiero hacer este trabajo excesivamente oneroso. Quien lo desee puede buscarlo en Internet.

            

Bien, a pesar de ello, en las últimas votaciones, este  tirano, dispuesto a destruir a España, ha obtenido la segunda posición en las últimas elecciones.

            

¿Será verdad que los españoles tenemos lo que nos merecemos?

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