Correr sólo durante unos pocos minutos al día o a baja velocidad
puede reducir significativamente el riesgo de una persona de morir por
una enfermedad cardiovascular en comparación con una persona que no
realiza esta actividad física, según un estudio publicado este lunes en
'Journal of the American College of Cardiology'.
Está bien establecido que el ejercicio es una forma de prevenir las
enfermedades del corazón y un componente de vida saludable en
general, pero no está claro si existen beneficios para la salud si se
practica menos de 75 minutos por semana, el tiempo de actividad física
intensa que recomienda el Gobierno de Estados Unidos y la Organización Mundial de la
Salud (OMS).
Los investigadores estudiaron a 55.137 adultos con edades entre los 18 y 100 años
durante un periodo de 15 años para determinar si existe una relación entre el funcionamiento y la longevidad. Los datos se extajeron del 'A erobics Center
Longitudinal Study', donde se pidió a los participantes que completaran un cuestionario
sobre sus hábitos de funcionamiento.
En el tiempo que duró esta investigación, fallecieron 3.413 participantes, incluyendo
1.217 personas cuyas muertes se relacionaron con la enfermedad cardiovascular. En esta
población, el 24 por ciento de los participantes informó que realiz ada parte de
su ejercicio en el tiempo libre.
UN 30% MENOS
En comparación con los no corredores, los corredores tenían un riesgo un 30 por
ciento menor de muerte por todas las causas y un 45 por ciento menos de riesgo de
muerte por enfermedad cardiaca o un derrame cerebral, viviendo estos un promedio de
tres años más frente a los que no practicaban este ejercicio físico.
Los autores consideran que la promoción de la actividad de correr es tan
importante como la prevención del tabaquismo, la obesidad o la hipertensión para
reducir el riesgo de mortalidad en la población. Los beneficios de este ejercicio son los
mismos sin importar el tiempo, la distancia, la frecuencia o la velocidad de los que
informaron los participantes, además que los efectos positivos sobre la salud fueron
iguales independientemente del sexo, la edad, el índice de masa corporal, las condiciones
de salud, el tabaquismo o el consumo de alcohol.
En concreto, el estudio mostró que los participantes que corrieron menos de 51
minutos, menos de diez kilómetros, a menos de 10 kilómetros por hora o sólo
una o dos veces por semana tuvieron un riesgo menor de morir en comparación con los
que no realizaban esta actividad.
El autor principal de este estudio, Duck-chul Lee, profesor asistente en el
Departamento de Kinesiología de la Universidad del Estado de Iowa, Estados Unidos,
subraya que los corredores que corrían menos de una hora a la semana tenían el mismo
beneficio en la mortalidad que los corredores que corrieron más de tres horas semanales.
Los investigadores también analizaron los patrones de comportamiento de los
corredores y encontraron que aquellos que persistentemente realiz aron esta
actividad durante un periodo de seis años, en promedio, tenían los mayores
beneficios, con un riesgo un 29 por ciento menor de muerte por cualquier causa y un 50
por ciento menos de riesgo de fallecimiento por enfermedad cardiaca o accidente
cerebrovascular.
"Dado que el tiempo es una de las barreras más fuertes a la hora de participar en la
actividad física, el estudio puede motivar a más personas a empez ar a correr y
seguir ejercitándose como un objetivo de salud asequible con beneficios frente a la
mortalidad", resume Lee.
"Correr puede ser una mejor opción de ejercicio que los ejercicios de
intensidad más moderada para las personas sanas pero sedentarias, ya que
produce similar, si no mayores, beneficios contra la mortalidad con entre cinco a 10
minutos en comparación con entre 15 a 20 minutos por día de actividad de intensidad
moderada que muchos encuentran que consume demasiado tiempo", concluye.