Decía un famoso periodista que cuando la prensa intenta exagerar el poder que tiene, es porque está ocultando su propia debilidad, y el continuo ascenso de los políticos que ignoran al monopolio mediático en Paraguay corrobora tal afirmación.

Un ejemplo reciente fue la aprobación por parte del Congreso y el presidente de Paraguay Horacio Cartes, de la presencia de Venezuela en el MERCOSUR. Aunque el poder mediático paraguayo había anunciado el infierno para todos si se tomaba tal determinación, los políticos dieron el paso con nulas consecuencias, evidenciando el debilitamiento del monopolio.

Otro signo fue que se ignoraran las denuncias contra el diputado José Ibañez, quien presidía la comisión que negociaba temas internacionales como el de Venezuela en su cámara, y no se haya logrado la imputación del político para complacer con evidente servilismo al poder mediático.

Ahora se comprueba también que los políticos ya no necesitan de los medios tradicionales para instalar sus candidaturas, dado que el proyecto del diputado Oscar Tuma se sigue fortaleciendo a pesar de la aversión que le demuestra la prensa. En la misma medida, el intendente Arnaldo Samaniego va perdiendo a sus bases, a pesar de haber gozado del favor mediático desde antes del principio de su gestión.

En los últimos días, mientras Samaniego era desairado por dirigentes que declinaron asistir a un almuerzo que organizó, Tuma sumó a su equipo de concejales a Hugo Ramírez y a Martín Arévalo, así como al senador Enrique Bachetta.

Tuma afirmó a un medio digital que no cuenta con recursos económicos para ganar los comicios con campañas publicitarias costosas, y que solo se vale de su constante trabajo a favor de Asunción.

El favorito reconoció que es prematuro hablar de proselitismo, pero reconoció que ya trabaja con la intención de lograr los mejores cuadros en la capital.

Los principales referentes que logró sumar son los concejales Hugo Ramírez y Mario Martín Arévalo; los diputados Dany Durand y Cinthia Tarragó; los senadores Enrique Bachetta, Julio César Velázquez y Víctor Bogado, entre otros.

Aunque reconoce que aún no cuenta con medios económicos para financiar una campaña de envergadura como la que encara, su objetivo es precisamente acabar con el modelo prebendarlo que ha impuesto el actual intendente Samaniego con ayuda de sus familiares.

Tuma comparó a los Samaniego con la familia del presidente Federico Franco, y los calificó como grandes extorsionadores de la política, que han causado gran perjuicio a su propio partido con su estilo.

En noviembre del año 2014 el actual partido de gobierno en Paraguay elegirá sus candidatos, y Tuma aparece como el favorito en los primeros sondeos.

Muchos utilizan la presencia del senador Víctor Bogado, sobre quien dispararon los medios de manera constante por varios meses sus acusaciones de corrupción, en su equipo para intentar desprestigiarlo. A ello Tuma responde que es la justicia y no los medios quien debe determinar la culpabilidad de los imputados.

Señala que la vara del escrache no fue ecuánime y que no se juzgó de la misma manera a otros actores acusados de grandes fraudes como el ex ministro Filizzola.

En un mundo en que la decadencia de medios tradicionales es pan de todos los días, y en el que muchos de ellos se enfrentan a la clausura o al remate, no resulta extraño que la empresa de la información paraguaya también acuse repercusiones de este fenómeno mundial.

Si como dijera Balzac los periódicos son tiendas que venden al público las palabras del mismo color que las quiere, no resulta extraño que la posibilidad de difundir masivamente la información sin su ayuda los devalúe y les reste capacidad para manipular conciencias.

Oscar Tuma, quien han logrado posicionarse como favorito sin apelar a medios tradicionales, es un caso de prueba.