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M. Martínez, Barcelona

El verano y el aburrimiento. Las tendencias

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Hay tendencias naturales tanto si se dan en un sentido como si se dan en el sentido contrario: Buscar los cambios o, preferir una vida sin novedades. La competición o la cooperación. Imitar u oponerse.(..). En cambio, hay tendencias que se consideran más naturales en un sentido, que en el otro: Parece más natural rechazar el aburrimiento que aceptarlo. Es decir, parece más natural querer hacer algo, que abstenerse siempre. Incluso los tímidos, que aceptan su timidez, tras analizar con calma la realidad, quieren salir de su inhibición, y participar. Parece también más natural querer superar la tensión o presión hablando que aceptar siempre el silencio impuesto. Es decir, parece más natural querer ser libre, que vivir siempre controlado.(..).


En relación a la necesidad de evitar el aburrimiento, hay que decir que los padres se equivocan queriendo llenar siempre el tiempo libre de sus hijos, pues estos tienden a hacerlo. Y cuando lo hacen ellos su desarrollo se beneficia más.

Y en relación a la necesidad de libertad, se dice que es más acusada en las personas con altas capacidades. Parece que se ha comprobado que, "Con los niños superdotado no debemos abusar de los castigos, ni de las órdenes sin razonar. Estos niños aprenden globalizando y necesitan dirigir su aprendizaje. Son muy capaces de ponerse límites, sin embargo, no aceptan bien los impuestos".

El verano y el aburrimiento. Las tendencias

M. Martínez, Barcelona
Lectores
miércoles, 1 de agosto de 2018, 06:35 h (CET)

Hay tendencias naturales tanto si se dan en un sentido como si se dan en el sentido contrario: Buscar los cambios o, preferir una vida sin novedades. La competición o la cooperación. Imitar u oponerse.(..). En cambio, hay tendencias que se consideran más naturales en un sentido, que en el otro: Parece más natural rechazar el aburrimiento que aceptarlo. Es decir, parece más natural querer hacer algo, que abstenerse siempre. Incluso los tímidos, que aceptan su timidez, tras analizar con calma la realidad, quieren salir de su inhibición, y participar. Parece también más natural querer superar la tensión o presión hablando que aceptar siempre el silencio impuesto. Es decir, parece más natural querer ser libre, que vivir siempre controlado.(..).


En relación a la necesidad de evitar el aburrimiento, hay que decir que los padres se equivocan queriendo llenar siempre el tiempo libre de sus hijos, pues estos tienden a hacerlo. Y cuando lo hacen ellos su desarrollo se beneficia más.

Y en relación a la necesidad de libertad, se dice que es más acusada en las personas con altas capacidades. Parece que se ha comprobado que, "Con los niños superdotado no debemos abusar de los castigos, ni de las órdenes sin razonar. Estos niños aprenden globalizando y necesitan dirigir su aprendizaje. Son muy capaces de ponerse límites, sin embargo, no aceptan bien los impuestos".

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