MADRID, 06 (SERVIMEDIA)
El 63% de los profesionales en España declaran sentir ansiedad a la hora de volver al trabajo después de las vacaciones, mientras que solo el 25% de los empleados se encuentran renovados y listos para la reincorporación a la normalidad tras un largo descanso estival.
La firma global de soluciones de talento Robert Walters ha preguntado a profesionales de Reino Unido, Francia y España cómo se sienten durante y después de sus vacaciones de verano, y qué aspectos mejorarían en la política de vacaciones de sus empresas.
De las cifras del estudio realizado por esta compañía se desprende que España se encuentra ligeramente en mejor situación que los otros dos países mencionados, puesto que si el 63% de los españoles padece ansiedad al volver a trabajar, esto le ocurre al 64% de los franceses y al 68% de los empleados de Reino Unido.
En el lado contrario, si el 25% de los españoles dice sentirse completamente renovado y listo para volver a trabajar después de muchos días de vacaciones, esto lo viven únicamente el 22% de los franceses y el 15% de los profesionales británicos.
La encuesta también explica que hay muchos trabajadores que sufren 'fomo', que es el miedo a perderse algo por estar ausente. Este concepto, impulsado por las experiencias compartidas en redes sociales, también llega al lugar de trabajo cuando un profesional teme que estar mucho tiempo fuera de la oficina le impida formar parte de proyectos de gran relevancia para el negocio.
En consecuencia, los profesionales consultados por Robert Walters señalan que es mucho más fácil relajarse durante las vacaciones de verano cuando sus equipos también están ausentes (67% de los británicos, 61% de los franceses y 44% de los españoles).
Algunos profesionales admiten implementar tácticas de contención para evitar un pico de estrés a la vuelta de vacaciones y para estar al día de todo lo que ocurre en el trabajo. Según el citado estudio, el 68% de los profesionales en España revisa su correo electrónico corporativo durante sus días de descanso, una cifra ligeramente superior a la de sus homólogos europeos (51%).
"Lo que marca la diferencia es crear un plan para delegar las tareas necesarias según las fechas de entrega y su nivel de importancia. El resto del tiempo hay que practicar el silencio digital, que puede ser interrumpido por momentos puntuales programadas para abrir el correo o hacer una llamada si fuera necesario. La planificación reduce el estrés y permite desconectar más y mejor", recomienda la esta empresa de recursos humanos.
Por otro lado, el 68% de los profesionales españoles afirmó que la política de vacaciones de su empresa necesita más flexibilidad, sentimiento que comparten el 39% de los empleados en Francia.
"Adaptar las políticas de vacaciones para que sean más inclusivas y personalizadas podría mejorar la satisfacción y el rendimiento general del equipo, reduciendo de este modo la ansiedad que puede llegar a generarse antes, durante y después de unas largas vacaciones", aconseja el estudio.
Además, destaca que la prueba piloto de la semana laboral de cuatro días llevada a cabo en Reino Unido y Alemania ya confirmaba la importancia de priorizar la flexibilidad: se registró un 39% menos de ausencias por enfermedad y un 71% menos de 'burnout' o síndrome del trabajador quemado.
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