MADRID, 20 (SERVIMEDIA)
La muerte cardíaca súbita es responsable de una proporción inusualmente alta de muertes entre los culturistas masculinos en todo el mundo y el riesgo más alto se presenta entre los profesionales.
Esa es la conclusión de una nueva investigación publicada este miércoles en la revista 'European Heart Journal'.
La muerte cardíaca súbita se produce cuando una persona fallece repentina e inesperadamente por un problema cardíaco. Generalmente es poco frecuente en personas jóvenes y aparentemente sanas, pero suele estar relacionada con afecciones cardíacas subyacentes.
"Como médico deportivo y especialista en ejercicio, he tenido la oportunidad de conocer de cerca el mundo del culturismo, lo que me ha brindado la oportunidad de apreciar no solo sus numerosos aspectos positivos, como la promoción de la aptitud física y la autodisciplina, sino también algunos de los desafíos y riesgos inherentes a esta disciplina", según Marco Vecchiato, de la Universidad de Padua (Italia), quien dirigió el estudio.
Hay un número creciente de informes sobre muertes prematuras entre personas que practican culturismo y fitness. Esos trágicos sucesos, que a menudo afectan a deportistas jóvenes y aparentemente sanos, reflejan una laguna en la comprensión de los riesgos para la salud a largo plazo asociados al culturismo competitivo. Hasta la fecha, ningún estudio ha informado sobre la incidencia de muertes y muertes súbitas en esta disciplina deportiva.
Vecchiato y sus colegas recopilaron los nombres de 20.286 culturistas masculinos de los registros oficiales de competición y de una base de datos en línea no oficial. Todos ellos habían participado en al menos un evento de la Federación Internacional de Fitness y Culturismo entre 2005 y 2020.
Los investigadores buscaron informes de muertes de cualquiera de estos competidores en cinco idiomas diferentes, a través de diversas webs, como medios oficiales, redes sociales, foros de culturismo y blogs.
Todos los fallecimientos reportados se cotejaron con diversas fuentes y dos médicos verificaron y analizaron estos informes para determinar, en la medida de lo posible, la causa de la muerte.
45 AÑOS DE MEDIA
Los investigadores detectaron 121 fallecimientos entre los hombres, con una edad promedio de 45 años. Las muertes súbitas cardíacas representaron un 38% de ellas. El riesgo de muerte súbita cardíaca fue mayor entre los culturistas profesionales, con un incremento de más de cinco veces en comparación con los aficionados.
En los pocos informes de autopsia disponibles, los hallazgos comunes incluían engrosamiento o agrandamiento del corazón y, en algunos casos, enfermedad coronaria. En algunos casos, los análisis toxicológicos e informes públicos revelaron abuso de sustancias anabólicas.
"Nuestros hallazgos muestran que el riesgo de muerte entre los culturistas masculinos es considerablemente alto. Los deportistas profesionales presentaron una incidencia significativamente mayor de muerte súbita cardíaca, lo que sugiere que el nivel de competición podría contribuir a este mayor riesgo", apunta Vecchiato.
El culturismo implica diversas prácticas que podrían afectar la salud, como el entrenamiento de fuerza extremo, estrategias de pérdida de peso rápida que incluyen restricciones dietéticas severas y deshidratación, así como el uso generalizado de diversas sustancias para mejorar el rendimiento.
Estos enfoques pueden sobrecargar significativamente el sistema cardiovascular, aumentar el riesgo de arritmias y, con el tiempo, provocar cambios estructurales en el corazón.
El riesgo puede ser mayor para los culturistas profesionales porque es más probable que participen intensamente en estas prácticas durante periodos prolongados y pueden experimentar una mayor presión competitiva para lograr físicos extremos.
RECOMENDACIONES
El estudio apunta que, si bien esforzarse por alcanzar la excelencia física es admirable, la búsqueda de una transformación corporal extrema a cualquier precio puede conllevar riesgos significativos para la salud, especialmente el corazón.
Por ello, la concienciación de estos riesgos debería fomentar prácticas de entrenamiento más seguras, una mejor supervisión médica y un enfoque cultural diferente que rechace el uso de sustancias que mejoran el rendimiento.
Para los profesionales clínicos, el estudio sugiere la importancia de la detección y el asesoramiento cardiovascular proactivos en esta población, incluso en deportistas jóvenes y aparentemente sanos.
Para los responsables políticos y las organizaciones deportivas, el estudio subraya la necesidad de un cambio cultural en el culturismo, incluyendo medidas antidopaje más estrictas, campañas de educación sobre los riesgos del abuso de drogas y ciertas prácticas relacionadas con el deporte, y posiblemente el desarrollo de programas específicos de vigilancia de la salud.
RIESGOS OCULTOS
En términos más generales, la investigación cuestiona la idea de que la apariencia por sí sola sea un indicador de salud y destaca los riesgos ocultos que pueden existir incluso tras los físicos más esculturales.
"Nuestros hallazgos no son una crítica al entrenamiento de fuerza ni a la cultura del fitness en general. Al contrario, la actividad física regular y el entrenamiento de fuerza pueden ser extremadamente beneficiosos para la salud, la calidad de vida y el riesgo de mortalidad", precisan los autores.
Además, un 15% de los fallecimientos se clasificaron como "muertes traumáticas súbitas", como siniestros de tráfico, suicidios, asesinatos y sobredosis. "Estos hallazgos subrayan la necesidad de abordar el impacto psicológico de la cultura del culturismo. Estos problemas de salud mental, en ocasiones, se agravan con el abuso de sustancias y pueden aumentar el riesgo de comportamientos impulsivos o autodestructivos", apunta Vecchiato.
Los investigadores se centraron en los culturistas masculinos porque representan la mayoría de los participantes en competición, por lo que se dispone de más datos sobre ellos.
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