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VILLANUEVA DEL PARDILLO (MADRID), 29 (SERVIMEDIA)
El líder de Vox, Santiago Abascal, esgrimió este jueves “razones institucionales” y la necesidad de “defender la democracia” para dar un mitin en el municipio de Villanueva del Pardillo, que se encuentra confinado por orden de la Comunidad de Madrid debido al elevado nivel de contagios por Covid-19.
Abascal acudió a este acto para respaldar a la cabeza de lista de su partido en las elecciones madrileñas del 4 de mayo, Rocío Monasterio.
Al comenzar su intervención, el responsable de Vox se refirió a que la Guardia Civil les había pedido que se instase a los asistentes a aumentar la “distancia de seguridad” por el confinamiento del municipio y para evitar contagios por coronavirus.
Abascal pidió a sus seguidores que hicieran caso a la Benemérita, aunque afirmó que los que dan órdenes a los agentes luego no las cumplen. Aludió así a que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ex vicepresidente y líder de Podemos, Pablo Iglesias, han estado sentados “juntos” durante meses en los escaños del Congreso.
Respecto al mitin en Villanueva del Pardillo, se refirió a que el alcalde del municipio había puesto “todo tipo de trabas” para evitarlo, pero que Vox había esgrimido que el decreto del estado de alarma alude a que se puede entrar en un municipio confinado “por razones institucionales”.
“PRACTICAR” LA DEMOCRACIA
En este sentido, defendió que habían ido este jueves a esta localidad “a defender la democracia, a ejercerla, a practicarla”. Se preguntó si esto “no es suficientemente importante” y si los ciudadanos no pueden escuchar un “acto político” después de que no se les deje salir de sus barrios y se les impida trabajar por la pandemia del coronavirus.
Al mismo tiempo, Abascal dijo que ve “con preocupación” qué hará el PP y la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, después del 4-M, ya que el ministro de Política Territorial, Miquel Iceta, sugirió este jueves que el PSOE podría abstenerse tras los comicios madrileños si con ello evita que la región dependa de la “extrema derecha”.
A este respecto, el líder de Vox lamentó que el PP esté “en la equidistancia” y “en la duda permanente”, al tiempo que sostuvo que el partido de Pablo Casado se encuentra “mirando al PSOE” y la experiencia dice que “no se atreve a cambiar nada cuando la izquierda le amenaza”.
Por su parte, Monasterio criticó que el cabeza de lista de Ciudadanos el 4-M, Edmundo Bal, haya planteado firmar un pacto contra la violencia entre todos los partidos madrileños. La candidata de Vox reprochó a Bal que quiera “hacer las paces con los comunistas”, cuando a Iglesias sólo se le puede “mirar a los ojos y decirle 'lárgate'”.
Según la aspirante de Vox a presidir Madrid, lo que los ciudadanos de esta comunidad necesitan es que se confronte con los “totalitarios”, puesto que “traen ruina y miseria” y están acostumbrados a tener una “oposición domesticada” que no ha querido “confrontar”.
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