 Asegura que hay sensación de "colapso", de que el operativo "hace aguas" por desorganización y critica los incumplimientos de acuerdos
El sindicato Comisiones Obreras ha criticado el "desastre" en la gestión de incendio por parte de la Junta de Castilla y León y ha responsabilizado a las consejerías de Medio Ambiente y Presidencia (en material laboral), en las que ha pedido dimisiones, de la "inacción, incapacidad y falta de previsión del operativo, cuyos trabajadores tienen sensación de "colapso" y de que "hace aguas" por la desorganización al trabajar ni siquiera con una orden de guardias.
Así lo han señalado diversos responsables de CCOO que han puesto de manifiesto la situación de los 4.700 trabajadores que forman el operativo de prevención y extinción de incendios, tanto de la parte pública como de la parte privada, y los diversos incumplimientos de convenio y de acuerdos del Diálogo Social que, a juicio del sindicato, no han permitido avanzar en mejoras para el dispositivo y sus integrantes.
El coordinador del sector autonómico de la Federación de Servicios a la Ciudadanía, Juan Carlos Hernández, tras lamentar la catástrofe y la pérdida de vidas humanas que han supuesto los incendios hasta el momento, y ha mostrado su reconocimiento y apoyo a los trabajadores, además de expresar las condolencias a los familiares de los fallecidos.
Hernández ha exigido responsabilidades al máximo nivel en la Junta y ha criticado la "inacción, incapacidad y falta de previsión del oerativo", de lo que ha responsabilizado principalmente al consejero de Medio Ambiente, Vivieda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que ha recordado que lleva diez años al frente de esta responsabilidad, pero también al director general de Patrimonio Natural y Política Forestal, José Ángel Arranz, quien "lleva 20".
El responsable de Comisiones Obreras ha apuntado que el consejero "está desaparecido" desde que soltó la "perla" de que "tenía costumbre de comer todos los días" mientras hay gente que está en el fuego y que "come malamente o almuerza malamente" los días que tiene que estar en el fuego.
"Si no se le ve en las duras, que coja la puerta y se vaya. Exigimos su cese o su dimisión", ha señalado Hernández, quien ha agregado que "ya cuando coja la puerta que lleve de la mano al director general de Patrimonio Natural y Política forestal porque ese no lleva diez años, eso lleva 20 años y es el responsable último también del operativo ineficaz".
PRESIDENCIA
Además, ha hecho "extensiva" esta petición de dimisión al consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, por el "continuado incumplimiento" de la normativa de prevención de riesgos laborales, que han denunciado en reiteradas ocasiones con resoluciones de la Inspección de Trabajo a las que ha hecho caso omiso la Junta. Asimismo, ha apuntado el incumplimiento del convenio en lo que se refiere a la actualización de la relación de puestos de trabajo, con la ampliación del trabajo a doce meses y nuevas funciones, algo que dos años después no se ha hecho.
Como ejemplo del "desastre de gestión" Juan Carlos Hernández ha señalado que el día 13 de agosto en la provincia de Ávila se iniciaran los trámites para contratar a 14 personas "de intervención directa en el operativo" mediante el Ecyl ante unas bolsas agotadas.
En este contexto, ha vuelto a defender un operativo público "cien por cien", disponible todo el año, no sólo para apagar, sino para hacer labores de prevención, tras lo que ha augurado que en la próxima campaña electoral se vuelva a escuchar hablar de fijar población en el medio rural, cuando no hay trabajo, pero ha destacado que la Junta tiene como "herramienta" un operativo con empleo "de calidad" y "estable".
Por su parte, el responsable de Medio Ambiente de CCOO, José Ramón Jiménez, ha lamentado "tanto tiempo" que llevan "peleando" con la Consejería de Medio Ambiente y buscando un operativo todo el año, que sea "eficaz y funcione" y los trabajadores estén en "buenas condiciones" para cuando lleguen estas situaciones, que son "terribles".
Así, ha aclarado que hay una parte de la que no se puede responsabilizar a nadie como es lo que concierne a las condiciones climáticas, pero otra que sí admite responsabilidades, "que sí que admite exigir un funcionamiento adecuado, que sí que admite exigir a los responsables políticos que se tomen las cosas en serio, y en esta Consejería de Medio Ambiente el operativo de incendios no se ha tomado en serio en los últimos 20 años", con 4.700 trabajadores "sistemáticamente ninguneados y maltratados" por la Junta cuando hacen su trabajo y "la forma de jugarse la vida" no está al alcance de las imágenes.
A este respecto, ha narrado un incidente que se produjo este lunes en el fuego que asola la zona del Lago de Sanabria (Zamora), donde unos compañeros suyos tuvieron una situación "compleja, difícil y peligrosísima" en la que quedaron bloqueados por el humo y las llamas. "Eso no va a salir en ningún sitio", ha asegurado Jiménez, quien ha llegado a emocionarse cuando lo contaba, tras lo que ha añadido que "no pasa más porque Dios no quiere".
MISMAS CARENCIAS
El responsable de Medio Ambiente de CCOO ha asegurado que "sigue siendo el mismo operativo con las carencias brutales que tiene este operativo, carencias de medios materiales humanos y organizativos" después de dos años de "indulto climático" tras lo ocurrido en 2022.
A todo ello se suman cicunstancias como la temporalidad y precariedad, por ejemplo en el caso de los centros de mando (hay uno por provincia y uno autonómico), donde se necesita personal altamente cualificado pero cuenta con una plantilla de 60 personas, de las cuales sólo nueve tienen plaza fija, ha relatado Abel Fernández, delegado de CCOO y operador en el Centro de Mando de Zamora.
Por otro lado, por lo que se refiere a la parte privada, el secretario de la Federación de Industria, Miguel Ángel Brezmes, ha apuntado que de los 4.700 trabajadores del operativo 1.100 trabajan a través de unas 30 empresas privadas, no están bien pagados, carecen de categoría de bombero forestal e incluso ni se les lava la ropa que utilizan, que tiene elementos cancerígenos, pero que además trabajan en torno a cuatro meses al año o, en el mejor de los casos, nueve.
A estos se suman otros 1.100 integrantes del operativo contratados a través de la empresa pública Tragsa, ha señalado el secretario de Negociación Colectiva, Salud Laboral y Medio Ambiente de la Federación de Hábitat, Óscar Ferrero, quien ha mostrado una foto con un bocadillo que recibieron desde las 5.00 de la mañana hasta las 17.20. "Este es el bocadillo y los que prolongaron la jornada les dieron una latilla de aceitunas y un chusco de pan, yo creo que esta es la imagen de lo que ahora mismo hay allí", ha apuntado Ferrero, quien ha censurado que las jornadas superen las 12 horas, sin descanso entre ellas, compatibilizando el desbroce con su posterior intervención en el incendio. Es decir, jornadas de 14 a 16 horas con sueldos de 1.200 o 1.240 euros y descansos sin duchas o aseos adecuados.
Por su parte, José Ramón Jiménez ha apuntado que en todo el operativo hay jornadas de 24 horas, cuando la Inspección de Trabajo ha señalado que deben ser como máximo de doce horas y "la Junta no quiere", mientras que las BRIF, que son estatales, cumplen con estos horasrios "entendiendo que su seguridad ligada al desempeño y el tiempo razonable que te permita estar en alerta para salvar tu vida".
"En realidad las condiciones en las que trabajan los miembros del operativo les da igual", ha añadido el sindicalista, quien ha criticado que no se evalúen los riesgos como se ha pedido, que se aplique la Ley de Bomberos, etcétera, cuando "lo único que quiere es privatizar, tener a los trabajadores lo más lejos posible, en unas condiciones de las que ya se pueda librar, y externalizar el operativo".
|