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Secretariado Gitano valora la condena de la Audiencia para que "mensajes de odio no queden impunes" | |||
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La entidad, que ejerció la acusación particular en el juicio contra tres acusados de incitar al odio hacia este colectivo --los otros dos han sido absueltos--, ha valorado el fallo de la Sección Tercera de la AP y ha considerado al respecto que "este tipo de mensajes de odio antigitano no queden impunes". La directora general de la FSG, Sara Giménez, ha opinado en un comunicado que la resolución judicial, a la que tuvo acceso esta agencia, lanza un mensaje a la ciudadanía para que sea consciente de que esos mensajes "son perseguibles penalmente" pues producen "un daño en todas y cada una de las personas gitanas". Al personarse en este causa, denunciando los hechos ante la Fiscalía, la entidad ha pretendido "no sólo hacer justicia, sino generar jurisprudencia y una concienciación acerca de la gravedad de los discursos de odio, que no pueden tener cabida en nuestro Estado de Derecho". DOS ABSUELTOS Y UN CONDENADO El tribunal ha exculpado a dos de los procesados, residentes en Santa Cruz de Bezana y de Madrid y que negaron su implicación en los hechos denunciados, por defectos e irregularidades en la investigación e instrucción de la causa, con lo que el procedimiento no reunió todas las garantías procesales. Pero sí ha condenado al tercer involucrado, residente en Santoña, que tras admitir su actuación, pedir perdón y reparar el daño, llegó a un acuerdo con el fiscal. No obstante, la Sala ha corregido al alza el pacto, imponiendo una pena de siete meses y medio de prisión y no de seis, además de más de tres años y medio de inhabilitación para profesión u oficio docentes, multa de 270 euros e indemnización de 1.000 euros para la Asociación Gitanos de Santoña por el daño causado. Antes de la vista oral, el ministerio público pedía tres años y 3.960 euros para cada uno de los imputados por unos hechos que no se han considerado probados en su totalidad. En concreto, el tribunal que ha practicado la prueba entiende acreditado que el vecino de Santoña que reconoció su autoría envió los audios en cuestión a un grupo de WhatsApp y que en esos mensajes, que se viralizaron, pedía -en referencia a personas de etnia gitana- "que los cojan y los lleven al penal, que los tengan dentro de las murallas, que canten y bailen allí como en un campo de concentración, hasta que se mueran todos, que están infectando a todo el mundo, pequeños, niños y abuelos". Por el contrario, los magistrados no ven probado que el segundo encausado publicara en las mismas fechas en su perfil de Facebook el post: "La Policía se va a ver obligada a disparar a los gitanos que andan descontrolados por Santoña o nos van a matar a todos. Yo creo que todos entenderemos que se empleen a fondo". Pero sí que es suyo el comentario: "¡Cuidado! Por compartir esta noticia fui denunciado y se admitió a trámite en Santoña (me están investigando en el Juzgado, supongo que por racismo). Así está el patio". De este modo, le absuelven al haber negado la autoría del primer mensaje, por no haberse comprobado la misma y al carecer el segundo de relevancia penal. Y también han constatado los jueces que en una cuenta de Twitter se publicó lo siguiente: "El contagio en Santoña de un clan de etnia gitana deja cinco fallecidos, el alcalde pide ayuda. Aquí tienes tu ayuda alcalde", seguido de una fotografía de unos botes en los que se leía "giftgas!" ('gas venenoso' en alemán) con el dibujo de dos tibias y una calavera, pero no que el tercer acusado fuera la persona que colgó ese tweet, ni que estuviera detrás de la cuenta. |
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