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La Unión Europea ha adoptado este lunes la renovación de las sanciones impuestas contra Rusia por la anexión ilegal de Crimea por un año más, hasta junio de 2026, un paso con el que reitera que no reconoce y sigue condenando la maniobra rusa como una violación del Derecho Internacional. De esta forma, la UE mantiene el veto a las importaciones de productos procedentes de Crimea, también renueva la prohibición de realizar inversiones o prestar servicios turísticos en la península tomada por Rusia en 2014. Asimismo, se prorroga la prohibición de exportaciones de determinados bienes y tecnologías a empresas de Crimea o para su uso en la península, como es el caso de los sectores de transporte, telecomunicaciones y energía o prospección, exploración y producción de petróleo, gas y recursos minerales. Estas fueron las primeras grandes sanciones de la UE contra Rusia, unas medidas que han quedado superadas ahora por la mayor panoplia de restricciones nunca impuesta por el bloque europeo, con 17 paquetes aprobados desde la agresión rusa de febrero de 2022.
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