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El pelotón del Giro de Italia fue bendecido por el Papa León XIV antes de su vigésima primera y última etapa, que se desarrolla este domingo sobre 143 kilómetros con salida y meta en Roma. El Sumo Pontífice saludó al pelotón antes de la salida de la etapa, que comenzó en la Ciudad del Vaticano para rendir homenaje al nuevo líder de la Iglesia católica y despedir al Papa Francisco, antes de entrar en el circuito oficial. Antes de atravesar el Vaticano, el líder de la general, el británico Simon Yates (Visma-Lease a Bike), y los demás ciclistas estrecharon la mano del Papa, que a cambio recibió un maillot rosa, el que tradicionalmente lleva el líder de la carrera. "El ciclismo es muy importante. Gracias por todo lo que hace. Espero que siempre recordéis vuestro papel de modelo para los demás. Siempre seréis bienvenidos aquí", dijo el Papa. Al parecer, la parada en el Vaticano fue una de las últimas decisiones del Papa Francisco, fallecido el lunes de Pascua. Es la primera vez que la última etapa del Giro pasa por el Vaticano.
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