La Licencia de Navegación, la puerta de entrada al mar

Cuando se piensa en escapar de la rutina, pocos planes resultan tan emocionantes como lanzarse al mar. Empezar a navegar no requiere grandes embarcaciones ni largas formaciones: basta con una Licencia de Navegación.

Esta titulación náutica, sencilla y accesible, permite dar los primeros pasos en el mar sin necesidad de examen, en apenas seis horas de formación. Tempestalia, escuela náutica con presencia en Mallorca, facilita este proceso con cursos prácticos, precios competitivos y formaciones entre semana o en fin de semana. Un primer título que abre la puerta a nuevas experiencias en el mundo náutico.

Una vía sencilla para empezar a navegar

Obtener la Licencia de Navegación es, hoy en día, uno de los caminos más directos y accesibles para iniciarse en la navegación recreativa. Basta con tener al menos 16 años y superar un sencillo test psicotécnico. El curso, con tan solo 2 horas de teoría y 4 de prácticas en el mar, puede completarse en una sola jornada. No se requiere examen final, y la titulación se entrega el mismo día.

Esta formación permite gobernar embarcaciones de hasta 6 metros de eslora y utilizar motos de agua sin límite de potencia, siempre que se navegue de día y a un máximo de 2 millas náuticas de la costa. En Tempestalia, el precio del curso parte desde los 100 €, lo que convierte esta formación en una opción económica, ideal para quienes quieren descubrir el mar sin realizar una gran inversión inicial.

Durante las prácticas se enseñan maniobras básicas, revisión del motor, normas de seguridad, fondeo del ancla o precauciones con bañistas, todo con un enfoque muy práctico. La formación se ofrece en grupos reducidos, tanto entre semana como en fin de semana, y está diseñada para adquirir habilidades reales en poco tiempo.

Libertad náutica desde el primer día

Más allá de ser una titulación oficial, la licencia representa una auténtica invitación a disfrutar del mar con libertad y responsabilidad. Alquilar una pequeña embarcación por unas horas para explorar calas cercanas, organizar una jornada de pesca o surcar la costa en moto de agua se convierte en una posibilidad real y asequible.

La emoción de gobernar una moto náutica o tomar el timón de una lancha sin depender de terceros es una experiencia que gana cada vez más adeptos. Además, existen ofertas de alquiler económico, especialmente entre semana, que permiten vivir una escapada diferente sin un gasto elevado.

Para quienes deseen avanzar, esta titulación básica es también la puerta de entrada hacia cursos superiores como el PER, con los que ampliar atribuciones y distancias. Pero el primer paso, sin duda, empieza aquí: en una jornada formativa que transforma cualquier día común en el inicio de una gran afición.