El aprendizaje requiere esfuerzo sostenido y también ilusión ante lo que
se va a conocer. El éxito en los estudios es posible y los alumnos pueden
acercarse a él progresivamente con interés y ganas de saber. La curiosidad
es fundamental y los estudiantes no deben tener miedo al fracaso, ya que
los errores son los peldaños que llevan al logro de los objetivos.
Está claro que se debe intentar realizar el estudio de modo mejor, pero los
adolescentes o jóvenes no tienen que desanimarse ante las dificultades. Al
contrario deben servirles de estímulo.
Porque los profesores están presentes en las aulas para orientarles y
explicarles lo que sea preciso con el fin de que obtengan el mejor
rendimiento posible en su proceso de aprendizaje.
Siempre existen alternativas en la formación reglada y de todo se
aprende. Además, como también escribe el psicopedagogo ya fallecido
Bernabé Tierno respecto a todo estudiante: «es fundamental que asumas
un compromiso personal en lo que haces, que seas disciplinado y
responsable, evalúes periódicamente tus esfuerzos y compruebes a qué
ritmo te acercas al objetivo marcado». No cabe duda que los profesores
son conscientes del gran valor de animar a sus alumnos a que obtengan el
mayor provecho de sus aptitudes y capacidades. Es un planteamiento
positivo que beneficia a todos.
También es bueno que cada profesor se ponga en el lugar del alumno para
entenderlo mejor. La competencia y la autoridad del profesor presuponen
también respeto y consideración con firmeza y constancia. Los docentes
transmiten valores éticos esenciales para la convivencia como son la
bondad, la tolerancia, la justicia, etcétera.
La tenacidad, la perseverancia y las técnicas adecuadas son las que llevan
al éxito y no conviene olvidarlo. Existen muchas formas de estudiar.
Incluso la de grabar en audio los temas para escucharlos es un
procedimiento complementario para aprender. Aunque es cierto que el
mejor modo de aprender es la forma clásica de estudiar leyendo con
atención y subrayando lo esencial. La realización de esquemas y fichas
también es muy útil para cualquier alumno.
Actualmente, con los medios digitales se facilita de un modo increíble el
acceso a los contenidos y a la información. Si a esto se añade que muchos
libros y artículos están disponibles digitalmente se comprende el cambio
en la forma de enseñar que se está produciendo. El formato libro sigue
siendo muy importante pero coexiste con el digital en el que ya vivimos y
ambos son complementarios.
En la vida como en la formación se progresa poco a poco. Y esto sucede,
en bastantes ocasiones, por ensayo y error. Aunque es cierto que en la
enseñanza la exactitud, la precisión, la profundidad y el rigor en los
conocimientos es, en principio, lo exigible.
La atención y esfuerzo en clase de los estudiantes es clave. Estar atento a
las explicaciones de cada profesor. Preguntar lo que no se entiende y
evitar las distracciones, etcétera son el verdadero procedimiento que
llevará a un mayor y mejor aprendizaje a los alumnos. Y a esto es
necesario añadir el suficiente tiempo de estudio en casa dependiendo del
nivel cognoscitivo de cada estudiante y de su capacidad.
Existen numerosos libros sobre formas de aprender. Uno de los mejores
para Secundaria, a mi juicio, es un libro de Bernabé Tierno titulado Las
mejores técnicas de estudio. Es claro y preciso.