Este fin de semana tuve la suerte de ser invitada a la Fashion Friday Valencia, ese evento de moda y networking por el que se empieza a rogar una entrada. Sólo lleva tres ediciones pero no es para menos, la moda accesible y sobre todo el networking nos seduce a todos especialmente en tiempos de crisis. Pude comprobar cómo allí se hacía difusión de marcas y empresas valencianas y cómo jóvenes empresarios y emprendedores del mundo de la moda buscaban contactos profesionales, se daban a conocer, intercambiaban información, se escuchaban y establecían relaciones.
Esta crisis ha puesto de manifiesto dos formas diferentes de hacer política. Mientras Europa ha optado por un modelo en el que lo prioritario es reducir el déficit, USA ha apostado por fomentar las inversiones. La estrategia del candidato popular para reactivar la economía parece que sigue la política estadounidense. Recortar gastos es importante pero hemos visto que no es suficiente. Ya era hora de que alguien se diera cuenta de que no mantendremos la prestación de servicios públicos sin inversiones productivas que reactiven nuestra economía. De todo lo escuchado hasta ahora sólo Rajoy con su intención de revitalizar lo que de verdad es el músculo económico del Estado convence, que no es otra cosa que los autónomos y las pymes.
Por otro lado, nuestros dirigentes siguen sin aprovechar todo el potencial de los medios que disponemos para afrontar una crisis con similares características a las anteriores que hemos sufrido, con burbuja inmobiliaria, crisis financiera, energética, pero con una gran diferencia y es que en el siglo XXI contamos con unas armas que nos permiten encararla desde una perspectiva diferente. La tecnología y el networking generan oportunidades a nuestras empresas facilitándoles además el intercambio de conocimiento, les permiten encontrar maneras de ayudarse mutuamente, nuevos horizontes, posibles socios o inversores, compartir experiencias, aprender de los demás, expandir un negocio o aumentar la visibilidad de una marca.
La percepción es que la sociedad tecnológica va varios pasos por delante de nuestros gobernantes políticos, excepto contadas excepciones. Y parece que todo lo positivo que tiene la globalización a la hora de afrontar una crisis como esta ha pillado a quienes nos gobiernan sin estar preparados para utilizar todos esos instrumentos. A pesar de las grandes dificultades que ello entraña es responsabilidad de los poderes públicos establecer fórmulas que aporten una visión global y faciliten la interconexión y la captación de cualquier posibilidad de negocio. En la Fashion Friday comprobé que Valencia tiene un fuerte espíritu emprendedor y mucha iniciativa, y que los jóvenes empresarios aprovechan todos esos recursos. No creo que fuera casualidad que Mariano Rajoy eligiera la ciudad del Turia para celebrar un foro sobre pymes y emprendedores.