Como el año pasado me vuelvo a quedar a las puertas para optar a una plaza en la Escuela Oficial de Idiomas de Sagunto. Por lo que sé, la tónica es la misma no sólo en otras escuelas de la Comunidad Valenciana sino también en otras Comunidades vecinas como la catalana.
Pero antes de buscar una academia, agoto las posibilidades, el sorteo de plazas es como la lotería de Navidad. El calvario tiene su miga, te pasas el día mirando internet hasta que aparece la lista con los números, luego miras el número agraciado por el que empieza la matrícula, lo comparas con el tuyo ¡y bingo! te quedas fuera por siete números. Esto en lenguaje llano es que a esas siete personas se las trague la tierra o les dé por estudiar mandarín y quede una plaza libre para ti.
Finalmente sale la secretaria y dice que el sorteo ha terminado o, lo que es lo mismo, no hay plazas, pero sin un lo sentimos, otro año será o, reclamen y pidan que la administración amplíe horarios y plazas. Las palabras de ánimo no entran en el salario.
No podemos negar que aquellos que quieren aprender inglés pueden pagarse o acceder a una academia privada pero, luego tendrán que volver a la Escuela Oficial para realizar un examen por libre que certifique y reconozca el nivel de inglés que han adquirido en otro centro no oficial y que no está acreditado por la administración pública.
Me repatea que si usted obtiene un título del Trinity College London, del First Certicate o del Proficiency, ninguno de ellos sea válido para que la Escuela Oficial de Idiomas convalide el nivel de inglés que el alumno ya ha cursado en otro centro, que dicho sea de paso, si reconocen otros países de la Unión Europea. Esto le obliga a pagar la tasa correspondiente y realizar de nuevo un examen por libre.
Así que, aunque se quede fuera si quiere un título reconocido pronto o tarde deberá pasar por la Escuela Oficial, mientras la administración sigue ingresando en concepto de tasas. No sé ustedes, pero me harto de ver informes en los que España sale mal parada en su nivel de inglés, nos bombardean con anuncios sobre la necesidad de aprender la lengua universal y los idiomas en la formación académica, imprescindible para un buen currículum pero, apáñenselas ustedes mismos en formarse, luego, la administración pone a su servicio el examen oficial que acredita su aprendizaje bajo coste de 44,55 euros y 20 euros de certificado.