Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Política | Universidad | Protesta | PSOE

A propósito del boicot universitario a Felipe González

Hoy por hoy, se “piensa” que fascista es todo aquel que está en contra de la propiedad privada
Mario López
jueves, 20 de octubre de 2016, 00:15 h (CET)
En términos laclaudianos (si se me permite la expresión) la palabra “fascista”, a día de hoy, se revela como un significante flotante; solo así se puede explicar cómo todo el mundo considera malo ser fascista y, a la vez, todos somos fascistas según para quien. Los estudiantes acusan a Felipe González de ser fascista por haber utilizado el terrorismo de Estado en la lucha contra el terrorismo de ETA, por haber engañado a su electorado en múltiples ocasiones y por haber dirigido la conjura que apartó a Pedro Sánchez de la secretaría general del PSOE. La decana, sin embargo, ha acusado a los estudiantes de ser fascistas por haber boicoteado la conferencia que pretendía Felipe González llevar a cabo en la Universidad Autónoma. En fin, que todo depende de los lacanianos points de capiton de cada cual.

La cuestión, por consiguiente, no es tanto buscarle un significado consensuado por todo el mundo a la palabra “fascista” como vencer en la batalla por la hegemonía. El que gane esta batalla podrá imponer en lo que llamamos “sentido común” el significado que para él tiene la palabra “fascista”. Está claro que, hoy por hoy, se “piensa” que fascista es todo aquel que está en contra de la propiedad privada (significante que totaliza y engloba los elementos libertad de mercado, competencia, individualismo, etc), pues la ideología neo-liberal es hegemónica. Como afirma Jacques Lacan, hay una primacía del significante sobre el significado.

En esta sociedad en la que, como digo, la ideología neo-liberal es hegemónica, los términos más controvertidos utilizados en el debate político (fascismo, democracia, bienestar, terrorismo, libertad, etc.) son, todos ellos, significantes flotantes. El significante, por tanto, es (como todo lo demás) una mercancía cuyo valor depende de la hegemonía. Y, como toda mercancía, también es susceptible de ser adquirida por medio del capital. Un ejemplo práctico: el diario El País, principal creador de opinión a nivel nacional al servicio de las oligarquías, con sus titulares y editoriales, crea y destruye hegemonías, gracias a su fuerte presencia pública, a su capital privado, de acuerdo con sus patrocinadores, sin dificultad alguna. Y esto es lo que hay.

Noticias relacionadas

Es invisible, intangible y, sin embargo, nos atraviesa por completo. Puede cambiarnos el humor en cuestión de segundos, hacernos llorar sin motivo aparente, evocarnos un recuerdo lejano o unirnos a desconocidos en un mismo latido. La música es mucho más que una forma de entretenimiento, es una fuerza capaz de modificar nuestro estado físico, emocional, mental y hasta social. A veces sin que siquiera lo notemos.

Del mismo modo que siempre hay una primera vez para lo que hacemos –primer llanto, primeras palabras, primeros pasos, primeros amores…–, sucede lo mismo con su antónimo, que también hay siempre una última vez para todo, aunque, a diferencia de la otra, en muchas ocasiones desconozcamos que no habrá más.

Apoyo a los países que eligen controlar sus fronteras, y que van en contra de la hipócrita integración que propone la mafiosa Unión Europea. España se ve muy perjudicada en una Europa de libre circulación de personas, ya que nuestros intereses internacionales (que a menudo no coinciden con los de otros países europeos) son más difíciles de defender dentro de un “club de alterne” como es en lo que se ha convertido la Unión Europea.

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© 2025 Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto