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Migración

Jaqueline Arizmendi (México)
Redacción
sábado, 28 de noviembre de 2009, 17:55 h (CET)
El nivel de migración internacional ha aumentado de forma considerable en los últimos años y se ha convertido en un verdadero fenómeno mundial. Dicho fenómeno está adquiriendo cada vez más fuerza,es un fenómeno social que impacta geográficamente a nivel mundial, así como en lo económico, político, social y cultural; sin embargo, el tema de la migración es un aspecto que se ha venido dando desde muchos años atrás. Los problemas que enfrentan los migrantes son, por la mayor parte, muy similares: la necesidad de obtener un mejor nivel de vida el cual no es posible, o es mucho más difícil, alcanzar en su país de origen.

La migración es uno de los problemas más importantes de México hoy en dia, por lo que se requieren escenarios que nos permitan una atención inmediata a los problemas de fondo, como los económicos-estructurales.

El fenómeno de la migración, no corresponde a un tiempo inmediato, por el contrario es el resultado de todo un proceso histórico, ligado directamente con las condiciones de desigualdad económica y social, frente a las que Estados Unidos, América y Europa entre otras, resulta ser una alternativa riesgosa pero viable para la población joven y adulta que no ha encontrado alternativas suficientes de empleo y desarrollo.

Los migrantes afrontan la migración abandonando su mundo, y generan estrategias para escabullirse de discriminaciones y restricciones de diferente signo, resistiendo ante la exclusión y la violencia de género, que emprenden una búsqueda consciente de autonomía y desarrollo personal, que cruzan mares y fronteras terrestres enfrentándose a múltiples riesgos, que asumen la responsabilidad familiar, y que en definitiva, van construyéndose a sí mismas, desde la libertad y la posibilidad de futuro.

Mujeres, hombres, niños, jóvenes migrantes de los países empobrecidos ven cómo se consolida y normaliza la exclusión del ejercicio de sus Derechos Humanos, laborales, sociales y políticos "en la tierra prometida". La triple condición de "migrantes" e "indocumentados" hace que para ellos sea aún más difícil escapar a las espirales de violencia de género en su entorno.

Su condición de "irregularidad", por un lado, les hace objeto de medidas restrictivas con impacto en sus oportunidades de acceso a protección, ya que son subordinados los derechos humanos de los migrantes, víctimas de la violencia, a sus políticas de control migratorio. Y por otro lado , al carecer de permiso de trabajo, estas personas viven situaciones de fuerte dependencia económica del agresor. Todo esto les sitúa en la invisibilidad, la desprotección y la vulnerabilidad.

Debido a estas situaciones, el estatus del migrante en donde este, se vuelve invisible, y cada vez esta mas marcada esta discriminación hacia ellos, que por el hecho de ser personas ilegales, indocumentadas y demás, hasta las propias autoridades se creen con derechos de explotarlos y sacar el máximo provecho de ellos pagándoles unos sueldos deplorables.

Los migrantes no pueden parecernos distantes. A pesar de estar muy, muy cerca, vivimos en mundos separados. Nuestras actividades, nuestro trabajo, nuestro ocio, rara vez intersecciona, pero están aquí, con toda su riqueza cultural, fuerza y experiencias aún por compartir. Los derechos humanos no saben de culturas, ni fronteras, ni lenguas. Ellos, los más invisibles, esperan de nosotros.

Es por eso que se llega a la conclusión de que el verdadero problema a causa de la migración se lo lleva México, seguido de la sociedad americana, con causa de que ambos tienen pro y contra ante esta situación, la cual es incontrolable, fundamentando que la conciencia es parte importante de una mejora social, actitud difícil de solucionar. El fenómeno de la migración no es solo asunto de la política mexicana, si no que del discernimiento de nuestra población, nuestra sociedad.

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