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Poesía

Diez poemas del libro ‘De mi mayor estigma (si mal no me equivoco)’

|

8   Tapa segunda edición


de mi mayor estigma

¿evitaré ser lo que me digo?


de la universidad

en la universidad de arquitectura y urbanismo desiderativos

muchos rindieron mal los parciales de casi todas las materias

varios algunos finales rendimos mal

sin embargo

suotempore

rendí cuentas y bastiones

y a costa de mi dulce mamá

ya no como un angustiado energúmeno

vencí

docente allí ahora

por fin me ufano

representatividad

un general de la nación un escritor de la nación

la esposa de un paleontólogo de la nación

el hijo político de un cerrajero de la nación

toda una dama de beneficencia de la nación distinguidísima

la hermana de una galletitera de la nación

se sentaron a mi mesa saborearon mis postres

aludieron a la economía al malestar social

a los inextricables —dijeron— senderos del arte

a la resurrección de la carne

bebieron mi licor de huevo

con el café y cada uno protocolarmente

sucesivamente obsequiáronme disimulando los bostezos

irrisorias medallas rebosantes de tics y muecas incontrolables

bastones y coronas repujados y repujadas respectivamente

agradecieron mis cumplidos y exquisiteces

me alabaron de paso representativos federales

obligados por las buenas costumbres, pero sin prosternarse

me adjudicaron la banda presidencial de la nación

bastones coronas tics y muecas de la nación

licores y huevos de la nación

y así seguirá siendo a lo largo y proficuo de todo mi mandato

contagio

de chiquillo oteaba desde enfrente

a la gentil en triciclo que me contagiaba

y a la curvilínea peatona

también desde enfrente oteaba

ya un púber un mocito

contagioso

(de acuerdo a ciertas leyes y máculas

bacilos y más o menos bacterias

decretan avatares

y persistentes yiros viejos y atroces)

herencia y muerte del padre a la luminosa sombra de un sueño

(a josé razzano y carlos gardel)

libros y mujeres

(tango y otros escondrijos

que no advierto a la sombra de tu ser perentorio)

y mujeres y mates y recuerdos de banfield

y fotografías

hoy otra vez anoche esta mañana

por qué por qué aullaba yo

qué es eso de desguarnecerse

caer

morirse

por achicamiento

por consunción

esta mañana pregunté

en el sueño a mi padre

“justo cuando más te quería”

bienestar y cortesía

dejado el hombre que he sido tentar por el dinero

a los efectos tentadores

de renunciar a mi más madre

cargo ahora con ella

y mis millones

y por mi bien es tiempo de que crea

que no me quita lo valiente

digo de mí

digo de mí primero lo que no tengo lo que no soy:

que me ponga al frente: (... mal rayo...):

los liderazgos me aprietan las vecinitas me dan calor

no tengo (pero tengo) catadura de imberbe

alterno entre fastidiosas

                       inútiles

          incontrolables

tumescencias por las noches

aun después de ceder con gentileza y hondura

a micciones libertarias y eyaculaciones

mitad de pecho corazón que late

mitad de pecho corazón que duele

y sin embargo disimulando

¡me cacho cada dispendiosidades!

dispendiosamente arremeto contra la miseria

(“piña seca” exageraba mi tío marcos)

de las deyecciones mejor ni hablemos

es la vileza confabulatoria y parental

intestinal y financiera

húbeme infiltrado en inconexas esposas de otros

y supeditada la ternura a vanas beligerancias

me enamoré una punta de veces de críos y viejitas

apenas sí prometí y desfloré con voluptuosidad y perspicacia

advierto que me estoy rememorando

en buenos aires buenas migas y camuflado con palabras

que no sangran ni siquiera exudan

“en una foto está conmigo

en otra sola está

no parece que supiera

a dónde va”

digo punto para poner un basta

cejijunto y cariacontecido

exultante y excéntrico concluyo mi labor

ni tanto ni tan poco a los demás me sumo

acaso unos cuantos acaso menos

flor

con los senos desplazados

la violada por el hombre invisible

se reúne con su cuerpo líquido e ilusorio

bastante invisible también ahora

sin sus bordes completos

del tamaño de una reminiscencia

o de una condolida comezón sietemesina

ella expulsará una flor honda

que nos catapultará hacia una paternidad compartida

¿qué no ve y ve viendo que no ve, la flor?

estos y otros entenados

interrogantes machacones de evanescente capciosidad

gauchito

me honraron la vereda jóvenes mixtos simpáticos y bienintencionados

dirigiéndoseme

cuando sentadito en el umbral de la pensión de floresta me hallaba

de gaucho y con rouge en un atardecer carnavalero

nos vendían los turcos

(ahí vienen los turcos)

nos mangueaban las monjitas

(ahí vienen las monjitas)

nos cobraba el alquiler el propietario

(ahí viene el propietario)

nos adivinaban la suerte las gitanas

(ahí vienen las gitanas)

y la cotorrita de la suerte también nos adivinaba la suerte

y no paso por alto

al monito de la suerte y al cuco

al hombre de la bolsa (su primo)

al colchonero al botellero a la policía

a toda clase de mendigos

para nombrar tus nombres

tus enunciados: john wayne / robert taylor / burt lancaster

tus énfasis: kirk douglas / gary cooper / robert mitchum

una rubia con un aletargado secreto

afanosamente besada por randolph scott en el saloon

aun tom mix había besado a la misma rubia

con idénticos afán y secreto

y sincero escote la de esos labios oferentes

besados acaso siempre por primera vez

en cada film de acción mudo o sonoro

duelo de temibles vivos o muertos aureolados

de los que te venías imbuyendo en surtidísimas butacas

decido asentar por escrito fucilazos y resonancias

risotadas y lingotes de sangriento oro

machos adinerados machos indigentes

machos fachos o borrachos asperezas y desolación

burdeles templos bancos

y barcos donde los pícaros (erroll flynn) piratas

y los buenos (alan ladd) inmarchitables y principistas

propinaban su merecido a los rufianes carismáticos george raft / james cagney

en un policial duro con suspenso, dados y puntería

henry fonda / fredric march / spencer tracy aguijoneando

a tu imaginario de valor y decencia

poema cercado por nombres donde no falten tus nombres, papá:

eduardo billy the kid o emilio el justiciero





Diez poemas del libro ‘De mi mayor estigma (si mal no me equivoco)’

Poesía
Rolando Revagliatti
viernes, 19 de enero de 2024, 09:07 h (CET)

8   Tapa segunda edición


de mi mayor estigma

¿evitaré ser lo que me digo?


de la universidad

en la universidad de arquitectura y urbanismo desiderativos

muchos rindieron mal los parciales de casi todas las materias

varios algunos finales rendimos mal

sin embargo

suotempore

rendí cuentas y bastiones

y a costa de mi dulce mamá

ya no como un angustiado energúmeno

vencí

docente allí ahora

por fin me ufano

representatividad

un general de la nación un escritor de la nación

la esposa de un paleontólogo de la nación

el hijo político de un cerrajero de la nación

toda una dama de beneficencia de la nación distinguidísima

la hermana de una galletitera de la nación

se sentaron a mi mesa saborearon mis postres

aludieron a la economía al malestar social

a los inextricables —dijeron— senderos del arte

a la resurrección de la carne

bebieron mi licor de huevo

con el café y cada uno protocolarmente

sucesivamente obsequiáronme disimulando los bostezos

irrisorias medallas rebosantes de tics y muecas incontrolables

bastones y coronas repujados y repujadas respectivamente

agradecieron mis cumplidos y exquisiteces

me alabaron de paso representativos federales

obligados por las buenas costumbres, pero sin prosternarse

me adjudicaron la banda presidencial de la nación

bastones coronas tics y muecas de la nación

licores y huevos de la nación

y así seguirá siendo a lo largo y proficuo de todo mi mandato

contagio

de chiquillo oteaba desde enfrente

a la gentil en triciclo que me contagiaba

y a la curvilínea peatona

también desde enfrente oteaba

ya un púber un mocito

contagioso

(de acuerdo a ciertas leyes y máculas

bacilos y más o menos bacterias

decretan avatares

y persistentes yiros viejos y atroces)

herencia y muerte del padre a la luminosa sombra de un sueño

(a josé razzano y carlos gardel)

libros y mujeres

(tango y otros escondrijos

que no advierto a la sombra de tu ser perentorio)

y mujeres y mates y recuerdos de banfield

y fotografías

hoy otra vez anoche esta mañana

por qué por qué aullaba yo

qué es eso de desguarnecerse

caer

morirse

por achicamiento

por consunción

esta mañana pregunté

en el sueño a mi padre

“justo cuando más te quería”

bienestar y cortesía

dejado el hombre que he sido tentar por el dinero

a los efectos tentadores

de renunciar a mi más madre

cargo ahora con ella

y mis millones

y por mi bien es tiempo de que crea

que no me quita lo valiente

digo de mí

digo de mí primero lo que no tengo lo que no soy:

que me ponga al frente: (... mal rayo...):

los liderazgos me aprietan las vecinitas me dan calor

no tengo (pero tengo) catadura de imberbe

alterno entre fastidiosas

                       inútiles

          incontrolables

tumescencias por las noches

aun después de ceder con gentileza y hondura

a micciones libertarias y eyaculaciones

mitad de pecho corazón que late

mitad de pecho corazón que duele

y sin embargo disimulando

¡me cacho cada dispendiosidades!

dispendiosamente arremeto contra la miseria

(“piña seca” exageraba mi tío marcos)

de las deyecciones mejor ni hablemos

es la vileza confabulatoria y parental

intestinal y financiera

húbeme infiltrado en inconexas esposas de otros

y supeditada la ternura a vanas beligerancias

me enamoré una punta de veces de críos y viejitas

apenas sí prometí y desfloré con voluptuosidad y perspicacia

advierto que me estoy rememorando

en buenos aires buenas migas y camuflado con palabras

que no sangran ni siquiera exudan

“en una foto está conmigo

en otra sola está

no parece que supiera

a dónde va”

digo punto para poner un basta

cejijunto y cariacontecido

exultante y excéntrico concluyo mi labor

ni tanto ni tan poco a los demás me sumo

acaso unos cuantos acaso menos

flor

con los senos desplazados

la violada por el hombre invisible

se reúne con su cuerpo líquido e ilusorio

bastante invisible también ahora

sin sus bordes completos

del tamaño de una reminiscencia

o de una condolida comezón sietemesina

ella expulsará una flor honda

que nos catapultará hacia una paternidad compartida

¿qué no ve y ve viendo que no ve, la flor?

estos y otros entenados

interrogantes machacones de evanescente capciosidad

gauchito

me honraron la vereda jóvenes mixtos simpáticos y bienintencionados

dirigiéndoseme

cuando sentadito en el umbral de la pensión de floresta me hallaba

de gaucho y con rouge en un atardecer carnavalero

nos vendían los turcos

(ahí vienen los turcos)

nos mangueaban las monjitas

(ahí vienen las monjitas)

nos cobraba el alquiler el propietario

(ahí viene el propietario)

nos adivinaban la suerte las gitanas

(ahí vienen las gitanas)

y la cotorrita de la suerte también nos adivinaba la suerte

y no paso por alto

al monito de la suerte y al cuco

al hombre de la bolsa (su primo)

al colchonero al botellero a la policía

a toda clase de mendigos

para nombrar tus nombres

tus enunciados: john wayne / robert taylor / burt lancaster

tus énfasis: kirk douglas / gary cooper / robert mitchum

una rubia con un aletargado secreto

afanosamente besada por randolph scott en el saloon

aun tom mix había besado a la misma rubia

con idénticos afán y secreto

y sincero escote la de esos labios oferentes

besados acaso siempre por primera vez

en cada film de acción mudo o sonoro

duelo de temibles vivos o muertos aureolados

de los que te venías imbuyendo en surtidísimas butacas

decido asentar por escrito fucilazos y resonancias

risotadas y lingotes de sangriento oro

machos adinerados machos indigentes

machos fachos o borrachos asperezas y desolación

burdeles templos bancos

y barcos donde los pícaros (erroll flynn) piratas

y los buenos (alan ladd) inmarchitables y principistas

propinaban su merecido a los rufianes carismáticos george raft / james cagney

en un policial duro con suspenso, dados y puntería

henry fonda / fredric march / spencer tracy aguijoneando

a tu imaginario de valor y decencia

poema cercado por nombres donde no falten tus nombres, papá:

eduardo billy the kid o emilio el justiciero





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