El gobernador de Estambul, Vasip Sahin, ha confirmado un balance oficial de 42 muertos y
238 heridos tras el atentado múltiple que el martes a última hora tuvo lugar en el aeropuerto
Ataturk de Estambul, según ha informado la cadena de televisión turca Haberturk.
Entre los fallecidos guran diez extranjeros
y tres personas con doble nacionalidad. Un
responsable gubernamental turco citado
por Reuters ha contado que en el ataque
han muerto un ciudadano chino, un
jordano, un tunecino, un uzbeko, un
ucraniano, un iraní, cinco saudíes y dos
iraquíes.
De los heridos, al menos 109 ya han sido
dados de alta. Según las primeras
investigaciones, los tres terroristas suicidas
llegaron al aeropuerto en taxi y abrieron
fuego en el interior de la terminal internacional antes de hacer estallar la
carga explosiva que llevaban.
Las autoridades turcas trabajan con la hipótesis de que el atentado ha sido responsabilidad
de Estado Islámico, aunque, por el momento, no ha habido reivindicación por parte del grupo
terrorista que lidera Abú Bakr al Baghdadi.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha condenado el atentado y ha asegurado que su
país continuará combatiendo el terrorismo "cueste lo que cueste" hasta conseguir su "nal".
Además, ha hecho un llamamiento a todos los países para luchar juntos contra los
terroristas.
NINGÚN GRUPO LO HA REIVINDICADO
Ningún grupo ha reivindicado por el momento la autoría de los ataques, pero las autoridades
turcas sospechan de que el autodenominado Estado Islámico podría estar detrás de ellos.
Sahin ha conrmado que han sido tres los suicidas que han llevado a cabo los ataques en
Ataturk, el mayor aeródromo de la ciudad turca.
El ministro de Justicia, Bekir Bozdag, ha explicado que al menos uno de ellos abrió fuego con
un fusil Kalashnikov antes de detonar los explosivos, según 'Hurriyet'. Un testigo ha indicado
a la cadena CNN Türk que había escuchado disparos desde el aparcamiento del aeropuerto.
Numerosas ambulancias han tenido que desplegarse en la zona, e incluso varios taxis han
estado transportando heridos a los hospitales. Mientras, el primer ministro turco ha
ordenado un gabinete de crisis en torno al incidente.