Por eso a lo largo del artículo de hoy vamos a abordar la relación en
pareja como aspecto esencial que mejora nuestro bienestar
personal y por ende potenciaría nuestra Felicidad, pues como
comentamos en otros artículos, somo seres con la necesidad
biológica de mantener relaciones sociales, recuerden el papel
esencial de la neuronas espejos, sino que además nuestra
necesidad de apego y nuestro modelo educativo familiar hace que
tengamos la necesidad de vivir en pareja, pero al mismo tiempo,
además del papel esencial que juega la sexualidad en nuestras
vidas.
Por esta razón la pareja y la familia juegan un papel central en
nuestras vidas, que normalmente provocan bienestar, pero que
cuando no se potencian, producen separación y ruptura, lo que nos
puede llevar a la desconfianza o la propia depresión, por ello, en
este primer artículo que dedicamos a ello, nos vamos a centrar en
un factor esencial que genera grandes dosis de felicidad en nuestra
vida, potenciando al mismo tiempo nuestra relación, es el tiempo
que dedicamos a nuestra pareja y a nuestra familia, y la calidad de
ese tiempo.
Los diferentes estudios realizados sobre las parejas realizado por
Gottman parece que lo primero que tenemos que hacer es que la
pareja hable mucho. Las parejas que funcionan bien dedican 5
horas más a la semana a estar juntos y hablar que las que no
funcionan. Por lo tanto, debemos de dedicar mucho tiempo a la
pareja.
Podemos empezar por una hora a la semana, recuerden que
normalmente estamos tan metidos en nuestro trabajo, que no nos
damos cuenta de que nuestra pareja necesita de tiempo para poder
avanzar, a veces es más importante atender al teléfono o la tv, que
dedicar una hora a estar con tu pareja. Con el tiempo
comenzaremos a necesitar ese tiempo, aumentándolo pues
necesitaremos ese tiempo con nuestra pareja, lo mismo sucede con
nuestros hijos, no les dedicamos tiempo, y si el que les dedicamos
está dedicado principalmente a sancionarlos, con lo cual nuestra
relación con ellos será mejor.
Es importante incorporar a nuestra rutina diaria el dedicar al menos
unos minutos cada día a expresar aprecio y a agradecer a nuestra
pareja o a nuestros hijos su papel en nuestras vidas, pero que ese
agradecimiento sea por cosas reales, es decir, gracias por sacar la
basura, gracias por ocuparte de ir al banco).
Es importante también el estar pendiente de nuestra pareja, cada
día sería importante saber de algo que vaya a hacer nuestra pareja
o nuestro hijo, y tenerlo en cuenta a la hora de nuestro regreso a
casa, una vez nos encontremos es muy importante preguntar por
cómo le ha ido en esa actividad, ya que potencia el interés por la
otra persona, pero al mismo tiempo favorece un espacio de
reencuentro después de estar separados todo el día y eso no ayuda
a acercarnos, sería importante que ese momento de encuentro sea
sagrado, que se respete, y que sea de las primeras cosas que
hagamos ambos juntos, normalmente el reencuentro lo dejamos
para la última hora del día donde estamos cansados y normalmente
nos centramos en otras cosas. Normalmente, decimos que eso es
imposible pues están los niños, pero siempre hay otros momentos
donde enchufamos a nuestros hijos a la TV, para realizar otras
actividades sin importancia como entrar en internet, etc. Pues
porque no hacerlo respetando este momento.
Además sería importante, si pudiésemos que ese momento fuera
acompañado de la realización de una actividad junta que nos
gustase a ambos, y que nos ayude a relajarnos, por ejemplo sería
importante pasear mientras hablamos, o tomar la merienda juntos,
etc.
Podríamos también ganar un poco de tiempo para cultivar nuestra
pareja, para dejar unas horas semanales en un día concreto para
que la pareja esté a solas, juntos y así a lo largo de la semana
programar una actividad conjunta a realizar, pues ir al cine,
quedarse en casa compartiendo un momento románticos, sería
nuestro espacio de intimidad, y deberíamos de convertirlo en un
ritual. Con esto pretendemos que la pareja comparta junta alguna
actividad, o experiencia que potencie la unión y la complicidad de la
pareja.
Otra cosa que podríamos hacer es el dedicar en nuestra casa un
espacio, una habitación, donde no esté presente ningún medio de
comunicación, ni televisión, ni radio, ni internet, (si es una locura),
pero ese espacio estará dedicado exclusivamente a la
conversación. Normalmente decimos que no estamos juntos pues
no tenemos tiempo, nos come el día a día, pero si supiéramos el
tiempo que dedicamos diariamente a ver la TV, ha hablar por
teléfono con la familia extensa de cada uno, a estar en internet, etc,
sumadas son más de 10 horas semanales.
Si nos esforzamos en potenciar estos momentos, veremos como
nos sentiremos mejor ya que ese sentimiento de soledad que
sienten las personas que conforman algunas parejas desaparecerá,
y en cierto sentido dismuiremos el riesgo de caer en depresión, si
conocemos cosas de nuestra pareja no sentiremos celos ya que
confiaremos en la persona que cada día comparte muchos espacios
y conversaciones conmigo, por lo tanto, nos sentiremos mejor.
Mejoraríamos la calidad del diálogo en pareja, ya que nos
esforzaremos en potenciar momentos de conversación saludables y
además solucionaríamos con mayor eficacia y tiempo los diferentes
problemas que pudieran surgir en nuestra pareja, ya que los
abordaremos en el momento, y no lo dejaríamos en nuestro interior.
De la misma manera es importante, pasar tiempo juntos ya que
apreciaríamos mejor nuestro mundo de pareja, asociándolos a cada
momento de nuestra vida aprovechando el presente como elemento
fortalecedor de nuestra felicidad.