Recuerdo que en mi niñez, viendo el cielo, el mar, las montañas, los árboles, etc. etc. me preguntaba: ¿Quién habrá hecho todo esto? ¿Y cuando acabará? Y pensaba que el Ser que hubiera hecho todo eso podía hacer lo que quisiera, y eso engendró en mi una fe, sin saber Quién era confiaba plenamente en ese ser Todopoderoso. Este preámbulo viene a cuento con el título de este escrito. La sociedad actual es el fruto de la incompatibilidad de la Religión Cristiana y de la democracia liberal; es poner en práctica la tentación de Satanás en el Paraíso a Eva y Adán: "Seréis como dioses". Actualmente este sistema liberal rechaza a Dios, ni tan siquiera le nombra, son ellos los poseedores del bien y del mal y establecen unas leyes perversas, inmorales e inhumanas, que en lugar de mejorar la vida de las personas, las esclaviza y manipula para obtener su propio beneficio y endiosamiento, ellos son los dioses. Este comportamiento de rechazar a Dios y no buscar la Verdad, tiene unas consecuencias desastrosas. Al rechazar y no buscar a Dios, el Señor los entrega a los deseos impuros de su corazón y así se explica el establecimiento de esas leyes perversas que han promulgado. Pero esto produce una situación, un misterio terrible. Dice Cristo: "Teniendo ojos no ven y entendimiento y no entienden." Están ocurriendo sucesos que siempre habrán ocurrido, pero en esta época con mayor virulencia, deshielo, incendios, terremotos, ciclones, inundaciones y un largo etc. de calamidades, que parecen anunciar el Apocalipsis. Y estos sucesos por mucho poder y técnica que tenga la sociedad actual, no los podrá eliminar y así queda sobradamente demostrado, que esa soberbia humana que a eliminado a Dios, no son nada más que unos pobres seres humanos, frágiles, vulnerables y caducos, que han sido seducidos y esclavizados por Satanás."