Hace ya un año, ¿recuerdan? desde que la adolescente sueca Greta Thunberg dejó el anonimato y se convirtió en una famosa activista contra el cambio climático, tras iniciar una huelga escolar por el clima (la primera de muchas, aficionándose a las pellas climáticas). Estos días vuelve a ser noticia. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce porque detrás tiene al lobby ecologista formado por empresas energéticas -con intereses en renovables, por supuestísimo-, por fondos de inversión y por fondos inmobiliarios, según el diario británico The Times.
El movimiento que lidera esta famosa activista sueca de 16 años no es tan inocente como aparenta, pese a las pellas climáticas y al viaje en yate sin carbono que acaba de hacer a EEUU. Todo, sin preguntar de quien es el yate ni cuanto CO2 generará el volverlo a su dueño. Sin duda se trata de un caso más en el que, como hemos comentado, no es oro todo lo que reluce.
|