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Parece tarea poco menos que imposible encontrar algún oasis en tierras catalanas en el que se pueda respirar el aire oxigenado de la patria, España

El ácido separatista corroe la Justicia en Catalunya

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Parece tarea poco menos que imposible encontrar algún oasis en tierras catalanas en el que se pueda respirar el aire oxigenado de la patria, España. A medida que se les ha dejado que hagan lo que les de la gana, mientras se les ha permitido que se rieran de las leyes estatales y se mofaran de las sentencias de los tribunales de Justicia, incumpliéndolas una tras otra, sin que ni desde la fiscalía ni desde la magistratura apareciera una sola persona valiente capaz de enfrentarse a la marea, cada vez más fuerte y envalentonada, de este nacionalismo excluyente y amenazador, que se va realimentando cada vez más con el odio, el rechazo, el sectarismo y la ojeriza contra todo lo que venga de España, de su Gobierno y de todos aquellos que se opongan, de alguna manera, a sus objetivos de esquilmar a la nación española, previamente a conseguir obtener su propia independencia.

No se conforman con los miles de millones que el Gobierno central ha venido transfiriendo del FLA para que puedan atender a sus más inmediatos compromisos de pago, ni agradecen que se tenga previsto más de nueve mil millones para este año 2013; sino que siguen obsesionados en aprovechar la más mínima ocasión que se les presenta para cargar contra el Gobierno, la Judicatura, y el Legislativo españoles, que se han convertido en el blanco de sus descalificaciones; el objetivo de sus improperios y amenazas como si, de verdad, estuviera en sus manos derrotar a los españoles y sus instituciones.

Hace años que venimos denunciando el hecho indiscutible de la falta de información fidedigna de la que parece disponer el Gobierno de Madrid sobre la verdadera situación en la que esta inmersa la autonomía catalana; el avance imparable del nacionalismo separatista; el sentimiento catalanista de sentirse menospreciados, agraviados y expoliados por el resto de España; el uso del deporte catalán y especialmente del FC Barcelona como arma arrojadiza, en la que se conjugan el odio hacia el Madrid, como símbolo del patriotismo español y la representación de la más rancia burguesía catalana celosa de sus privilegios, envidiosa de la capitalidad de Madrid, que ellos consideran debiera radicar en Catalunya y verdadera cuna y catapulta de los dirigentes de CIU, estos que actualmente se han convertido, ya sin disfraz alguno, en los actuales dirigentes de la rebelión catalana contra la tutuela del Estado español.

Si en un tiempo fueron los clérigos, ¿recuerdan ustedes a aquel fraile pintoresco, Luis Mª Xirinacs, experto en ayunos, huésped de la cárcel por dos veces; separatista hasta la médula y agitador de las calles?, los que albergaban en las iglesias a los primeros corpúsculos separatistas. Aquellos primeros contingentes que tenían su sede en Montserrat, con el apoyo de los monjes de la abadía; ahora se ha entrado en otra fase, una fase en la que parece que, ante la perspectiva de una futura independencia de Catalunya, muchos que no soñaron nunca en esta experiencia rupturista parece que desean apuntarse a la corriente, porque piensan que puede proporcionales ventajas y quién sabe, la posibilidad de ostentar cargos importantes en un utópico estado catalán.

Si ya tuvimos ocasión de constatar el pensamiento nacionalista extremo de aquel magistrado catalán, que llegó a ser miembro del CGPJ, el señor López Tena (miembro de la dirección de CDC) al que, por aquellos tiempos, la actual presidenta del Parlament de Catalunya, Nuria de Gispert tuvo que llamarle al orden por sus incontinencias verbales. ¡Cómo pasa el tiempo y cambian las personas!, ¿no, señora Gispert?. Ahora parece que se está dando un paso más respecto a la implicación de los encargados de administrar Justicia en Catalunya en los avatares políticos. Hace ya tiempo que, por desgracia, parece que la policitación de los fiscales, de magistrados y de jueces se ha convertido en algo usual sin que, estos ramalazos de compaginar las tareas de administrar justicia con las ideas políticas de los funcionarios de la Justicia, parezca que haya inquietado a quienes tendrían la obligación de evitar que estas prácticas tuvieran lugar, hayan tomado medida alguna para evitar no sólo que los primeros casos detectados fueran sancionados de inmediato, sino que parece que no han tenido inconveniente en que esta costumbre se fuera generalizando y ¡ahora tenemos los resultados!.

El caso paradigmático del juez Garzón, expulsado por 10 años de su puesto por prevaricación, un caso que aún colea, puesto que sigue incordiando y ejerciendo de activista en Argentina, junto a su colega la señora Fernández Kirchyner; seguramente ha infectado a una parte de fiscales y jueces que han decidido cambiar su obligación de ser los defensores de las leyes y los perseguidores de los delincuentes, por manifestaciones de protesta en las calles; críticas al Gobierno y defensas a ultranza de ideas que nada tienen que ver con sus funciones como encargados de mantener la Ley. El corporativismo de estos funcionarios los convierte en un arma de dos filos a la hora de dejar sentados los principios de la separación de poderes ideados por Montesquieu. Hemos tenido ocasión de comprobar, durante los últimos años, la diferencia con la que algunos de estos fiscales y jueces han venido tratando a presuntos delincuentes, según que la afiliación de estos fuera de derecha o de izquierdas.

Sin embargo, ha llegado el momento en que algunos de estos jueces, magistrados o fiscales han decidido dar un paso más en lo que se refiere a entrar en la liza política sin renunciar a sus funciones oficiales, con el burdo pretexto, ( más aún para un representante de la ley) de la libertad de expresión. Y esto ha acontecido con el señor fiscal jefe de la Comunidad catalana, el señor Martín Rodríguez Sol que, no sólo se ha mostrado partidario de la consulta propuesta por el señor Mas, sino que ha dado pistas para sortear lo que prescribe al respecto la Constitución española. Por si faltara sal a esta ensalada, un magistrado de la Audiencia de Barcelona, el señor Santiago Vidal ha salido en tromba en defensa del fiscal, expedientado por el señor Fiscal del Estado señor Torres Dulce; erigiéndose en agitador populachero, recomendando a los fiscales que se rebelen contra su jefe, el señor Torres. Pero, señores,¿dónde estamos?, ¿qué clase de Estado de Derecho tenemos cuando, los que debieran ser los primeros en acatar las leyes, los reglamentos, las disposiciones, son los mismos que piden que se olviden de ellas y se “rebelen” en contra de sus superiores? Unos hechos graves y de tal importancia que esperamos la reacción inmediata y fulminante del CGPJ, para que se le aplique la sanción, la máxima posible, de acuerdo con la gravedad del hecho.

Una prueba más de la degradación constante de la situación de Catalunya; una demostración de que la condescendencia con la que el Gobierno de la nación ha venido tratando los repetidos incumplimientos de las leyes y las sentencias de los tribunales, por parte de los gobernantes catalanes, no ha servido para nada más que para envalentonarlos, para que hayan extremado la propaganda nacionalista e identitaria en el pueblo catalán y para que, unidos al señor Junqueras de ERC, hayan formado un bloque potente que domina el Parlamento y, sin hacer caso alguno de los tímidos avisos del señor Rajoy y su gobierno, se están haciendo dueños de la situación. ¿Hasta cuándo? Hasta que haya algún valiente que diga ¡basta! Un laureado general que pidió la aplicación del artículo 8º de la Constitución, ha sido expedientado.¡Bravo, este es el camino a la ruptura de la nación ! O así es, señores, como veo a este pobre país, conocido como España.

El ácido separatista corroe la Justicia en Catalunya

Parece tarea poco menos que imposible encontrar algún oasis en tierras catalanas en el que se pueda respirar el aire oxigenado de la patria, España
Miguel Massanet
miércoles, 6 de marzo de 2013, 07:55 h (CET)
Parece tarea poco menos que imposible encontrar algún oasis en tierras catalanas en el que se pueda respirar el aire oxigenado de la patria, España. A medida que se les ha dejado que hagan lo que les de la gana, mientras se les ha permitido que se rieran de las leyes estatales y se mofaran de las sentencias de los tribunales de Justicia, incumpliéndolas una tras otra, sin que ni desde la fiscalía ni desde la magistratura apareciera una sola persona valiente capaz de enfrentarse a la marea, cada vez más fuerte y envalentonada, de este nacionalismo excluyente y amenazador, que se va realimentando cada vez más con el odio, el rechazo, el sectarismo y la ojeriza contra todo lo que venga de España, de su Gobierno y de todos aquellos que se opongan, de alguna manera, a sus objetivos de esquilmar a la nación española, previamente a conseguir obtener su propia independencia.

No se conforman con los miles de millones que el Gobierno central ha venido transfiriendo del FLA para que puedan atender a sus más inmediatos compromisos de pago, ni agradecen que se tenga previsto más de nueve mil millones para este año 2013; sino que siguen obsesionados en aprovechar la más mínima ocasión que se les presenta para cargar contra el Gobierno, la Judicatura, y el Legislativo españoles, que se han convertido en el blanco de sus descalificaciones; el objetivo de sus improperios y amenazas como si, de verdad, estuviera en sus manos derrotar a los españoles y sus instituciones.

Hace años que venimos denunciando el hecho indiscutible de la falta de información fidedigna de la que parece disponer el Gobierno de Madrid sobre la verdadera situación en la que esta inmersa la autonomía catalana; el avance imparable del nacionalismo separatista; el sentimiento catalanista de sentirse menospreciados, agraviados y expoliados por el resto de España; el uso del deporte catalán y especialmente del FC Barcelona como arma arrojadiza, en la que se conjugan el odio hacia el Madrid, como símbolo del patriotismo español y la representación de la más rancia burguesía catalana celosa de sus privilegios, envidiosa de la capitalidad de Madrid, que ellos consideran debiera radicar en Catalunya y verdadera cuna y catapulta de los dirigentes de CIU, estos que actualmente se han convertido, ya sin disfraz alguno, en los actuales dirigentes de la rebelión catalana contra la tutuela del Estado español.

Si en un tiempo fueron los clérigos, ¿recuerdan ustedes a aquel fraile pintoresco, Luis Mª Xirinacs, experto en ayunos, huésped de la cárcel por dos veces; separatista hasta la médula y agitador de las calles?, los que albergaban en las iglesias a los primeros corpúsculos separatistas. Aquellos primeros contingentes que tenían su sede en Montserrat, con el apoyo de los monjes de la abadía; ahora se ha entrado en otra fase, una fase en la que parece que, ante la perspectiva de una futura independencia de Catalunya, muchos que no soñaron nunca en esta experiencia rupturista parece que desean apuntarse a la corriente, porque piensan que puede proporcionales ventajas y quién sabe, la posibilidad de ostentar cargos importantes en un utópico estado catalán.

Si ya tuvimos ocasión de constatar el pensamiento nacionalista extremo de aquel magistrado catalán, que llegó a ser miembro del CGPJ, el señor López Tena (miembro de la dirección de CDC) al que, por aquellos tiempos, la actual presidenta del Parlament de Catalunya, Nuria de Gispert tuvo que llamarle al orden por sus incontinencias verbales. ¡Cómo pasa el tiempo y cambian las personas!, ¿no, señora Gispert?. Ahora parece que se está dando un paso más respecto a la implicación de los encargados de administrar Justicia en Catalunya en los avatares políticos. Hace ya tiempo que, por desgracia, parece que la policitación de los fiscales, de magistrados y de jueces se ha convertido en algo usual sin que, estos ramalazos de compaginar las tareas de administrar justicia con las ideas políticas de los funcionarios de la Justicia, parezca que haya inquietado a quienes tendrían la obligación de evitar que estas prácticas tuvieran lugar, hayan tomado medida alguna para evitar no sólo que los primeros casos detectados fueran sancionados de inmediato, sino que parece que no han tenido inconveniente en que esta costumbre se fuera generalizando y ¡ahora tenemos los resultados!.

El caso paradigmático del juez Garzón, expulsado por 10 años de su puesto por prevaricación, un caso que aún colea, puesto que sigue incordiando y ejerciendo de activista en Argentina, junto a su colega la señora Fernández Kirchyner; seguramente ha infectado a una parte de fiscales y jueces que han decidido cambiar su obligación de ser los defensores de las leyes y los perseguidores de los delincuentes, por manifestaciones de protesta en las calles; críticas al Gobierno y defensas a ultranza de ideas que nada tienen que ver con sus funciones como encargados de mantener la Ley. El corporativismo de estos funcionarios los convierte en un arma de dos filos a la hora de dejar sentados los principios de la separación de poderes ideados por Montesquieu. Hemos tenido ocasión de comprobar, durante los últimos años, la diferencia con la que algunos de estos fiscales y jueces han venido tratando a presuntos delincuentes, según que la afiliación de estos fuera de derecha o de izquierdas.

Sin embargo, ha llegado el momento en que algunos de estos jueces, magistrados o fiscales han decidido dar un paso más en lo que se refiere a entrar en la liza política sin renunciar a sus funciones oficiales, con el burdo pretexto, ( más aún para un representante de la ley) de la libertad de expresión. Y esto ha acontecido con el señor fiscal jefe de la Comunidad catalana, el señor Martín Rodríguez Sol que, no sólo se ha mostrado partidario de la consulta propuesta por el señor Mas, sino que ha dado pistas para sortear lo que prescribe al respecto la Constitución española. Por si faltara sal a esta ensalada, un magistrado de la Audiencia de Barcelona, el señor Santiago Vidal ha salido en tromba en defensa del fiscal, expedientado por el señor Fiscal del Estado señor Torres Dulce; erigiéndose en agitador populachero, recomendando a los fiscales que se rebelen contra su jefe, el señor Torres. Pero, señores,¿dónde estamos?, ¿qué clase de Estado de Derecho tenemos cuando, los que debieran ser los primeros en acatar las leyes, los reglamentos, las disposiciones, son los mismos que piden que se olviden de ellas y se “rebelen” en contra de sus superiores? Unos hechos graves y de tal importancia que esperamos la reacción inmediata y fulminante del CGPJ, para que se le aplique la sanción, la máxima posible, de acuerdo con la gravedad del hecho.

Una prueba más de la degradación constante de la situación de Catalunya; una demostración de que la condescendencia con la que el Gobierno de la nación ha venido tratando los repetidos incumplimientos de las leyes y las sentencias de los tribunales, por parte de los gobernantes catalanes, no ha servido para nada más que para envalentonarlos, para que hayan extremado la propaganda nacionalista e identitaria en el pueblo catalán y para que, unidos al señor Junqueras de ERC, hayan formado un bloque potente que domina el Parlamento y, sin hacer caso alguno de los tímidos avisos del señor Rajoy y su gobierno, se están haciendo dueños de la situación. ¿Hasta cuándo? Hasta que haya algún valiente que diga ¡basta! Un laureado general que pidió la aplicación del artículo 8º de la Constitución, ha sido expedientado.¡Bravo, este es el camino a la ruptura de la nación ! O así es, señores, como veo a este pobre país, conocido como España.

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Hoy quisiera invitarlos a reflexionar sobre un aspecto de la vida actual que parece extremadamente novedoso por sus avances agigantados en el mundo de la tecnología, pero cuyo planteo persiste desde Platón hasta nuestros días, a saber, la realidad virtual inmiscuida hasta el tuétano en nuestra cotidianidad y la posibilidad de que llegue el día en que no podamos distinguir entre "lo real" y "lo virtual".

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Pienso que habrá cada vez más Cat Cafés y no solamente cafeterías, cualquier ciudadano que tenga un negocio podría colaborar. Sólo le hace falta una habitación dedicada a los gatos. Es horrible en muchos países del planeta, el caso de los abandonos de animales, el trato hacia los toros, galgos… las que pasan algunos de ellos… Y sin embargo encuentro gente que se vuelca en ayudarles y llegan a tener un número grande de perros y gatos.

 
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