Siglo XXI. Diario digital independiente, plural y abierto. Noticias y opinión
Viajes y Lugares Tienda Siglo XXI Grupo Siglo XXI
21º ANIVERSARIO
Fundado en noviembre de 2003
Opinión
Etiquetas | Política | PSOE | Pedro Sánchez
​En definitiva, los tiempos de cambio ya han llegado a una política española en la que el multipartidismo debe demostrar su capacidad de diálogo y consenso

Tiempo de diálogo

|

Ciertamente, las pasadas elecciones del 28 de abril han venido a dibujar un nuevo escenario político, multilateral y de geometría imperfecta que a golpe de distribución de escaños y votos viene a reflejar un tiempo de dialogo y encuentro. Así, la ciudadanía de nuestro país parece que quiso con una participación masiva en las urnas fijar en el itinerario de la agenda política de los partidos como brújula la búsqueda de los puntos de conexión y pactos en pos de un interés general que hoy se muestra como fundamental para afrontar los retos que como país tenemos por delante. Y es que, el insulto totalitario y ramplón, las excentricidades polarizadas en la izquierda y la derecha parecen no gustar en un país, el nuestro, en el que el centro izquierda y el centro derecha fueron y serán los espacios electorales de necesario encuentro para quienes desde una posición progresista o conservadora deseen gobernar a un país que aún guarda en su historia reciente las heridas sin coser del resquebrajamiento de las dos Españas.

Por ello, hoy Pedro Sánchez se enfrenta al reto de lograr los apoyos necesarios desde la complicada opción de un gobierno en solitario que fije de manera valiente y decidida una resolución al conflicto de Cataluña, opción que parece clara tendrá que venir desde el diálogo con los moderados de la izquierda republicana en un pacto de izquierdas que deberá buscar en el marco de un nuevo Estatut esa identificación de la Cataluña del siglo XXI en el proyecto territorial de España en esa suma de pluralidad de naciones con una nación compartida. Difícil rejón el que se le presenta a un Sánchez que aún virtuoso de torear en plazas de público contrario tendrá que dejar sus mejores pases para lidiar a un miura de cornada mortal.

Pero no será sólo este el reto del presidente Sánchez, la necesaria puesta en marcha de una agenda reformista progresista que fije los pilares de la industria, le economía productiva y la innovación en una España que necesita avanzar de manera más rápida en su convergencia con el cambio global de la cuarta revolución industrial aparece como otro reto complejo ,al que el socialismo español esta llamado en esta legislatura , en una oportunidad de dejar atrás la leyenda negra que desde la oposición del partido popular y ciudadanos vincula al PSOE con las crisis económicas. Si bien para ello, el nuevo gobierno deberá buscar la confluencia con dos aliados necesarios , el social y el empresarial en ese pacto de estado que permita fijar equilibrio entre lo privado y lo público, entre el apoyo al empresariado y el reparto de derechos. No por menos la transformación de toda nación necesita más allá del liderazgo de un líder el acompañamiento y complicidad de los agentes que forman parte del propio país, de lo contrario toda acción individual enmarcada en la ceguera del éxito podría condenar al fracaso cualquier intento de transformación de una España, que hoy más que nunca necesita dar respuesta a los grandes desafíos que tiene por delante en materia económica, laboral empresarial o de sostenibilidad entre otros.

En definitiva, los tiempos de cambio ya han llegado a una política española en la que el multipartidismo debe demostrar su capacidad de diálogo y consenso, de llegar a acuerdos en pactos de estado necesarios para que las generaciones presentes y futuras puedan ver en España un país en vanguardia. El tiempo dirá si hemos sido capaces de lograrlo.

Tiempo de diálogo

​En definitiva, los tiempos de cambio ya han llegado a una política española en la que el multipartidismo debe demostrar su capacidad de diálogo y consenso
Josu Gómez Barrutia
martes, 7 de mayo de 2019, 14:07 h (CET)

Ciertamente, las pasadas elecciones del 28 de abril han venido a dibujar un nuevo escenario político, multilateral y de geometría imperfecta que a golpe de distribución de escaños y votos viene a reflejar un tiempo de dialogo y encuentro. Así, la ciudadanía de nuestro país parece que quiso con una participación masiva en las urnas fijar en el itinerario de la agenda política de los partidos como brújula la búsqueda de los puntos de conexión y pactos en pos de un interés general que hoy se muestra como fundamental para afrontar los retos que como país tenemos por delante. Y es que, el insulto totalitario y ramplón, las excentricidades polarizadas en la izquierda y la derecha parecen no gustar en un país, el nuestro, en el que el centro izquierda y el centro derecha fueron y serán los espacios electorales de necesario encuentro para quienes desde una posición progresista o conservadora deseen gobernar a un país que aún guarda en su historia reciente las heridas sin coser del resquebrajamiento de las dos Españas.

Por ello, hoy Pedro Sánchez se enfrenta al reto de lograr los apoyos necesarios desde la complicada opción de un gobierno en solitario que fije de manera valiente y decidida una resolución al conflicto de Cataluña, opción que parece clara tendrá que venir desde el diálogo con los moderados de la izquierda republicana en un pacto de izquierdas que deberá buscar en el marco de un nuevo Estatut esa identificación de la Cataluña del siglo XXI en el proyecto territorial de España en esa suma de pluralidad de naciones con una nación compartida. Difícil rejón el que se le presenta a un Sánchez que aún virtuoso de torear en plazas de público contrario tendrá que dejar sus mejores pases para lidiar a un miura de cornada mortal.

Pero no será sólo este el reto del presidente Sánchez, la necesaria puesta en marcha de una agenda reformista progresista que fije los pilares de la industria, le economía productiva y la innovación en una España que necesita avanzar de manera más rápida en su convergencia con el cambio global de la cuarta revolución industrial aparece como otro reto complejo ,al que el socialismo español esta llamado en esta legislatura , en una oportunidad de dejar atrás la leyenda negra que desde la oposición del partido popular y ciudadanos vincula al PSOE con las crisis económicas. Si bien para ello, el nuevo gobierno deberá buscar la confluencia con dos aliados necesarios , el social y el empresarial en ese pacto de estado que permita fijar equilibrio entre lo privado y lo público, entre el apoyo al empresariado y el reparto de derechos. No por menos la transformación de toda nación necesita más allá del liderazgo de un líder el acompañamiento y complicidad de los agentes que forman parte del propio país, de lo contrario toda acción individual enmarcada en la ceguera del éxito podría condenar al fracaso cualquier intento de transformación de una España, que hoy más que nunca necesita dar respuesta a los grandes desafíos que tiene por delante en materia económica, laboral empresarial o de sostenibilidad entre otros.

En definitiva, los tiempos de cambio ya han llegado a una política española en la que el multipartidismo debe demostrar su capacidad de diálogo y consenso, de llegar a acuerdos en pactos de estado necesarios para que las generaciones presentes y futuras puedan ver en España un país en vanguardia. El tiempo dirá si hemos sido capaces de lograrlo.

Noticias relacionadas

No voy a matarme mucho con este artículo. La opinión de mi madre Fisioterapeuta, mi hermana Realizadora de Tv y mía junto a la de otras aportaciones, me basta. Mi madre lo tiene claro, la carne le huele a podrido. No puede ni verla. Sólo desea ver cuerpos de animales poblados de almas. Mi hermana no puede comerla porque sería como comerse uno de sus gatos. Y a mí me alteraría los niveles de la sangre, me sentiría más pesada y con mayor malestar general.

En medio de la vorágine de la vida moderna, donde la juventud parece ser el estándar de valor y el ascensor hacia el futuro, a menudo olvidamos el invaluable tesoro que representan nuestros ancianos. Son como pozos de sabiduría, con profundas raíces que se extienden hasta los cimientos mismos de nuestra existencia. Sin embargo, en muchas ocasiones, son tratados como meros objetos de contemplación, relegados al olvido y abandonados a su suerte.

Al conocer la oferta a un anciano señor de escasos recursos, que se ganaba su sobrevivencia recolectando botellas de comprarle su perro, éste lo negó, por mucho que las ofertas se superaron de 10 hasta 150 dólares, bajo la razón: "Ni lo vendo, ni lo cambio. El me ama y me es fiel. Su dinero, lo tiene cualquiera, y se pierde como el agua que corre. El cariño de este perrito es insustituible; su cariño y fidelidad es hermoso".

 
Quiénes somos  |   Sobre nosotros  |   Contacto  |   Aviso legal  |   Suscríbete a nuestra RSS Síguenos en Linkedin Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter   |  
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto | Director: Guillermo Peris Peris
© Diario Siglo XXI. Periódico digital independiente, plural y abierto