Senegal y la región trasfronteriza con Mauritania están viviendo el tercer episodio de sequía en seis años, tras 2011 y 2014. “Ya en octubre de 2017, comenzamos a alertar de la crisis alimentaria producida por el déficit de lluvia registrado ese año. Ahora en plena “estación del hambre”, cuando se han agotado las reservas de la última cosecha, solo podemos constatarlo con datos”, explica desde Dakar Fabrice Carbonne, Director País de Acción contra el Hambre en Senegal. La inseguridad alimentaria afecta ya a 245 000 personas en cuatro departamentos: Podor, Ranerou, Kanel y Matam.

Según los datos de lluvia en el Departamento de Podor, al norte de Senegal, en 2017 las acumulaciones estacionales disminuyeron en un 66% en comparación con 2016. La producción de biomasa (pastos) en el valle del río Senegal -territorio transfronterizo entre Mauritania y Senegal- es por escasa, una de las más alarmantes de todo el oeste de África este año y recuerda la situación después de la grave sequía en la región en 2011.

“El pasado año, los pastores tuvieron que anticipar la trashumancia hacia el sur seis meses -de marzo a octubre- por el agotamiento de los pastizales. Esto también exacerbó los enfrentamientos entre pastores y agricultores por el control de los recursos”, explica Carbonne. “Esta situación provoca una sobrecarga pastoral en el área de pasturas disponibles, con el riesgo añadido de la propagación de enfermedades entre los animales y, por consiguiente, de una menor producción de leche y carne con consecuencias sobre el consumo nutricional, en particular de los niños y niñas”.

Dinero por trabajo para los pastores afectados por la sequía
El ganado está muriendo de forma masiva y con ello el principal sustento de muchos pastores. Se estima que la trashumancia anticipada ha podido afectar a 12 150 personas sólo en el departamento de Podor. Acción contra el Hambre está proporcionando ingresos por la rehabilitación de diez abrevaderos que beneficiarán a 800 familias de 4 comunas del Departamento de Podor -Guédé, Gamadji Saré, Dodel y Doumga Lao-. “Se espera que estas actividades aumenten la producción pastoral a fin de reforzar la resiliencia de las familias más pobres y así responder a sus necesidades alimentarias más inmediatas”, destaca Carbonne.

Distribuciones alimentarias para combatir la desnutrición aguda
Los departamento de Podor y de Matam han sufrido durante los últimos años la prevalencia de desnutrición aguda más alta del país. Entre junio y agosto se está poniendo en marcha una campaña de asistencia alimentaria dirigida a 2150 hogares identificados como vulnerables, para impedir el aumento de estas alarmantes tasas de desnutrición aguda en el área pastoral. Recibirán mensualmente transferencias monetarias para cubrir sus gastos alimentarios básicos durante los tres meses de escasez (de junio a agosto).

“En una primera fase, las madres de estas comunidades son formadas para evaluar el estado nutricional de sus hijos e hijas menores de cinco años usando una cinta MUAC que mide el perímetro braquial”, explica Carbonne, refiriendose al instrumento para medir el diámetro de brazo y diagnosticar la desnutrición. “Posteriormente, los casos de desnutrición serán remitidos a los puestos o centros de salud dependiendo de la gravedad de los casos”, añade.

Complementariamiente, cada familia con hijos de entre 6 y 59 meses o con mujeres embarazadas y lactantes está recibiendo harina enriquecida, hecha a base de cereales locales con complementos nutricionales (minerales y vitaminas). “Hasta septiembre haremos tres distribuciones llevando un seguimiento de los niños y niñas afectados por desnutrición aguda, para evitar el máximo número de casos de desnutrición”.