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MADRID, 27 (SERVIMEDIA)
El PSOE celebró este sábado un Comité Federal centrado casi en exclusiva en enviar mensajes de apoyo a Pedro Sánchez para que continúe al frente del Gobierno y del partido recordando que en el pasado los socialistas ya han superado otros momentos “difíciles”.
En medio del proceso de reflexión abierto por Sánchez a raíz de la investigación judicial abierta contra su mujer por un posible tráfico de influencias, la primera intervención corrió a cargo de la vicesecretaria general del PSOE y vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero, quien le animó a seguir adelante porque en la derecha “no pueden salirse con la suya”.
El líder de los socialistas vascos, Eneko Andueza, incluso le recordó el pasado terrorista que sufrieron los dirigentes en el País Vasco y que tuvieran en mente a los que sufrieron cárcel, exilio o fueron asesinados en cunetas y paredones.
Una línea que también apuntó el ministro de Transportes, Óscar Puente, cuando reconoció que él también se ha preguntado varias veces si “merece la pena” dedicarse a la política.
Entonces, contó que siempre se acuerda de su abuelo Antonio, que sufrió cárcel y vejaciones durante el franquismo y le lleva a pensar que aquel sufrimiento es “mucho más liviano que el suyo”. “No puedes rendirte y entregarle a la derecha lo que busca, la cabeza del secretario general del PSOE”.
“No puedes permitirlo”, exclamó Puente y pidió a todos que “empujemos a nuestro secretario general a que el lunes vuelva con nosotros haciendo historia de la buena”.
El líder de PSC, Salvador Illa, que interrumpió la campaña electoral en Cataluña para acudir a la reunión interna en Madrid, comentó que "nada más ilusión" le haría que "contar" con la "presencia, apoyo, y participación" de Sánchez en la campaña y "cuánto antes".
"Pedro, quédate, contamos contigo para todos los desafíos que tenemos por delante", resumió la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, que hoy es ratificada como cabeza de lista de la candidatura del PSOE al Parlamento Europeo.
UNA MULTITUD EN LA CALLE
Mientras en el interior de la sede del PSOE se encadenaban intervenciones en apoyo de Sánchez, en la calle de Ferraz y las inmediaciones se iban concentrando miles de personas que, según desde el partido cifran por encima de las 10.000 y que la Delegado del Gobierno en Madrid cuantificó en 12.500.
En un comité federal inusual, donde todas las intervenciones fueron en abierto y no llegó ni a las dos horas de duración, hubo un total de 8 intervenciones sin contar la del secretario de Organización, Santos Cerdán, para cerrar la reunión e invitar a todos a agradecer a los que estaban en la calle pese a los ratos de lluvia.
Después de Montero, hablaron Andueza, Illa y Ribera por el ciclo electoral vigente y, aunque en sus intervenciones hubo menciones a Euskadi, Cataluña y Europa, el nexo común fue dejar claro que en el proyecto cuenta con la continuidad de Sánchez.
Por su parte, Puente puso el foco también en que Sánchez es "legítimamente" el presidente del Gobierno pese a la derecha denuncie que ha "usurpado" el poder porque piensan que es "suyo".
Tanto el presidente de Asturias, Adrián Barbón, que llamó a que "rebelémonos contra la injusticia, con toda nuestra fuerza", y la de Navarra, María Chivite, de que esta presión personal y contra las familias no es algo que va con el cargo, mostraron su apoyo a Sánchez porque “no se puede conseguir mediante chantaje, acoso familiar, lo que no han conseguido en las urnas”, como resumió la navarra.
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, no se dejó ver más que en la reunión interna del Comité Federal porque entró al edificio en coche por el garaje y ante sus compañeros mostró su empatía con Sánchez porque "va en serio" con el "dolor" que ha mostrado criticando que se considere una estrategia política.
El considerado como principal crítico de Sánchez en el PSOE, por decisiones como la ley de amnistía, sostuvo que el presidente "puede reaccionar como quiera y hay que respetarlo" y que "para contestar todas las calumnias y esta campaña, vais a contar con la dirección y por supuesto, Pedro, con todo nuestro apoyo, con el mío particularmente, porque no se puede consentir".
No obstante, recordó que durante la etapa que estuvo en la oposición y sufrió a María Dolores de Cospedal, a la que llamó la socia de Villarejo, en Castilla-La Mancha, él iba a "denuncia por día".
Por ello, Page mostró su apoyo "en este momento único, realmente difícil, porque nuestro secretario general ha mostrado dolor", que esta situación "no es por una querella falsa porque eso no puede tumbar un presidente del Gobierno" sino porque a "este partido no le van a quitar la moral y menos de los que no tienen ninguna".
En su breve intervención, Page aprovechó para atacar al expresidente expresidente catalán y candidato de Junts a las elecciones catalanas, Carles Puigdemont, por sus palabras contra Sánchez de que había que venir "llorado de casa". "Decir que de casa se sale llorado, y eso lo dice quien salió de casa y de España en un capó de un coche", aludiendo a la huida del líder de Junts en el procès escondido en el maletero de un coche.
Mientras en el interior del Comité Federal el ambiente era más tristeza y rabia a la vez por "lo difícil que es esta coyuntura", en el exterior no cesaban los gritos de apoyo a Sánchez que resonaban incluso en el interior de la sede.
Pese al "respeto" manifestado por muchos a la situación que vive Sánchez, la presión se extendió entre los cargos socialistas. "Te necesitamos, necesitamos el mejor líder, al presidente más valiente, más enérgico, más decidido y al Pedro más humano. Presidente, merece la pena que ganen los buenos", remató Montero, quién acaparó hoy mas foco como 'numero dos' del PSOE y del Gobierno.
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