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María Beatriz Muñoz Ruiz
María Beatriz Muñoz Ruiz, nació el 12 de septiembre de 1977 en Granada, España. Es escritora y poetisa. Directora y responsable de maquetación y diseño de la revista cultural ‘One stop’. Columnista internacional y autora de catorce novelas y tres poemarios. Su nuevo poemario ‘Hechicera’, fue publicado bajo el seudónimo de la Dama oscura, nombre que usa en ocasiones cuando quiere salir de los estándares establecidos. Community manager con formación en marketing digital y titulada también como Técnico en Consumo. Libros publicados: Cuando el destino nos unió. Editorial Unitedp.c. el 21 de febrero de 2014. Sabores del desierto. 26 de junio de 2014. La rosa perfecta. 27 de junio de 2014. Secretos en la nieve. 30 de enero de 2015, en Amazon. Magia en las sombras. 27 de noviembre del 2014, editorial Nido de Letras. Atrapada por sorpresa. 7 noviembre 2017. Mía. 13 julio 2018. Alas prestadas. 29 de octubre 2018. La reina de fuego. 14 de mayo del 2019. Cazadora de demonios. 24 septiembre 2019. Poemarios: “Mis pequeñas poesías” 27 de junio del 2014. Agua y Fuego. 20 febrero 2020. Silencio. 20 julio 2020. Amanecer Amargo. 7 enero 2021. Las tres caras de Raúl, agosto 2021. |
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Seis horas hemos estado sin Whatsapp, Facebook e Instagram, y no sabéis la cantidad de cosas que he hecho en esas seis horas, yo creo que algún indeseable le ha pedido al universo que me cambie, y lo está haciendo. Bueno, he de decir que tampoco ha estado tan mal que nos quedáramos sin esas tres redes, he pensado incluso en llamar a la gente para saber de ellos.
Contaba el año 1509 cuando Fernando el católico encerró a Juana I de Castilla en el palacio de Tordesillas con la intención de seguir gobernando Castilla. Juana era aconsejable que estuviese loca, primero para su padre, y después para su hijo, el poder siempre ha sido la fuerza que ha movido al ser humano hacia el egoísmo y ellos no iban a ser menos.
Últimamente solo contesto a publicaciones de Facebook cuando tengo un mal día, y la verdad es que hoy ha sido uno de esos días, se me ha juntado todo y no he podido evitar contestar y disentir de un comentario que se hacía a una fotografía en la que salían dos hombres en una iglesia casándose. Uno de ellos estaba vestido de novia, con un vestido precioso estilo princesa y la parte de arriba era como una especie de chaqueta blanca imitando a un corsé ceñido.
Siempre que tengo un día malo pienso en negro o gris, nunca en azul, pero al investigar algo más, pude averiguar una descripción hermosa y aterradora, me refiero al día mundial de la concienciación sobre el Autismo, el 3 de abril, o también llamado día azul. A todos se nos viene a la cabeza ahora la denominación que se le da en inglés a un mal día, pero no es así, el día azul se refiere a cómo se sienten sus familiares ante esa enfermedad.
La mañana estaba soleada y el cielo despejado. Era muy temprano cuando me desperecé y decidí andar sin prisa hacia el patio. Era domingo y Luis seguía dormido, hoy no había despertador ni prisas de última hora. Cuando el calor comenzara a asomar subiría a despertarlo como todos los fines de semana, me acurrucaría junto a él y ronronearía hasta captar su atención. Me encantaban sus abrazos y sus besos.
Cuando de pequeños hacíamos un volcán, procurábamos que saliera de él mucha plastilina roja, y si le podíamos poner lucecitas, mucho mejor, la nota subía. No obstante, el ver la tragedia que supone la erupción de un volcán tan de cerca, cambia la perspectiva de cualquiera. Sigue siendo un espectáculo increíble, pero también es una visión terrible el ver como la lava cubre y derriba cientos de casas.
Adoro a mis correctoras de la revista y venero sobre todo a la correctora personal de mis obras. El problema que hay en el mundo literario, es que los escritores se creen tan sumamente perfectos e inteligentes que no se dejan aconsejar por sus correctores, por lo que la mayoría de las veces, los correctores se sienten con las manos tan atadas que no pueden hacer su trabajo como les gustaría.
Poe intenta hacernos comprender que Dios nos creó tal como somos porque cada necesidad mental y fisiológica va en relación con lo que necesita nuestro cuerpo, por ejemplo, comer; si sentimos hambre es para que comamos, porque nuestro cuerpo está hecho para sobrevivir con comida. Ese mismo concepto lo aplica a la mente de un asesino.
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