La hoja de ruta hacia el trofeo de Liga Endesa es cristalina: emplearse a fondo durante estos dos próximos encuentros como cauce a presentarse en Vitoria con dos victorias en el casillero. Lo primero, en el Real Madrid, está comprendido. Es un paso. Porque enfrente estará un adversario de dimensiones mayúsculas como Caja Laboral. Esto hace que el público vuelva a cobrar una importancia formidable en estos dos primeros partidos de semifinales. El Palacio de los Deportes debe recordar a ese otro Palacio de la calle Goya de hace décadas.

Sin excesivo cansancio, con escasas magulladuras, con un optimismo moderado y con ideas muy claras y adheridas. Así se presenta el Real Madrid a su cita en semifinales de Liga Endesa. Acude, también, con dos contratiempos, o factores motivadores, según se interpreten: ausente Mirotic, habrá que otorgar más protagonismo a otros jugadores en ese puesto de interior; y también habrá que controlar esos niveles de presión, después de haber caído eliminado en esta fase durante el pasado curso a manos del Bizkaia. Pablo Laso contará con todo el resto de sus efectivos. “Exceptuando a Mirotic, el resto están más o menos bien, Mirza (Begic) sigue con un golpe en la espalda, 'Nole' (Velickovic) está más o menos bien de la rodilla, así que menos con 'Niko' espero contar con todos al máximo”, reconoció Pablo Laso.

A romper sequía sin final

Buena señal porque no es tiempo de reservas. Lo saben Laso, también. "A estas alturas todos los partidos son muy exigentes, los cuartos han demostrado la igualdad que existe en esta liga en la que todos los equipo han tenido que esforzarse al máximo, y esta es la tónica que vamos a tener que mantener. No nos vamos a guardar nada y vamos a tener que emplear todas las fuerzas, jugando muy concentrado cada minuto” (en Vitoria piensan lo mismo). Porque el objetivo, como reconocen dos balcánicos como Velickovic y Tomic es “ganar estos dos encuentros en casa. Es nuestra oportunidad. Si ganamos los dos saldremos adelante”. Lógicamente, ambos jugadores solicitaron de la ayuda del público, que actúe como un sexto hombre en este episodio de la temporada, unas semifinales que el Real Madrid no supera desde el curso 2006-07, en la que se alzó con el título de Liga.

Enfrente estará todo un trasatlántico como Caja Laboral, una alternativa muy fiable a Barcelona y Real Madrid. El cuadro vitoriano se presenta a su octava semifinal de forma consecutiva, dato que eleva a categoría de sobresaliente su regularidad. Más o menos como sucede en el apartado estadístico: décima ocasión entre ambos en una eliminatoria de ‘Play-off’, por el momento con un balance de 6-3 en eliminatorias y con un 18-14 en los partidos, en ambos casos favorable al Real Madrid; aunque empate a dos victorias y dos derrotas cuando ambos se han citado en semifinales, y donde el Real Madrid siempre gana con el factor cancha a su favor, como pasó en la campaña 2000-01. Por eso, esa importancia suprema del público. Además, Caja Laboral este año ha jugado 17 partidos como visitante obteniendo un balance positivo de 9 victorias y 8 derrotas. Y el Real Madrid, salvo con el Bizkaia, es un muro en su feudo.

Lampe, Teletovic... gran arsenal

El público deberá no sólo temer a los jugadores del cuadro vitoriano, sino a su entrenador, Dusko Ivanovic, de los pocos que tiene un balance igualitario con el Real Madrid (28 victorias por 31 derrotas). El preparador balcánico, seguramente, inventará algo en defensa (han sido la segunda mejor defensa en Liga Regular) y en ataque con lo que sorprender. Y tiene muchas opciones para distintos planes tácticos. “Tienen dos jugadores muy importantes como Lampe y Heurtel, tanto por lo que hacen como por las rotaciones que les permiten. Tiene un jugador que marca mucho el partido que es Pablo (Prigioni), y con aleros que penetran mucho (San Emeterio)”, señaló Pablo Laso. Y sin dejarse a Teletovic, todo un artista de la canasta. Y cuenta con Nemanja Bjelica en un estado muy bueno de forma y con la experiencia NBA de Nocioni. Por eso, el Real Madrid, aparte de emplearse a fondo, espera que estas semifinales sean exitosas también gracias al sexto hombre, el público.