El político socialista Francois Hollande asumirá este martes el cargo de presidente de la República de Francia, 17 años después de la salida del último jefe de Estado socialista, Francois Miterrand, en una simbólica ceremonia que dará paso a su primer viaje como mandatario galo a Alemania, donde se reunirá con la canciller, Angela Merkel.
Hollande recogerá el testigo del último presidente socialista, Francois Miterrand, quien dejó el Elíseo hace 17 años tras convertirse en el jefe de Estado que más tiempo se mantuvo en el cargo, catorce años, en la quinta República gala.
La ceremonia supone la entrada en el palacio del Elíseo de Hollande, el presidente socialista que se presentó en plena campaña electoral como el 'señor Normal', en contraposición a la ostentación que exhibió en sus cinco años de mandato Sarkozy, apodado 'señor Bling Bling', una referencia onomatopéyica aplicada a quienes exhiben sin tapujos su afición por el lujo.
Hollande tomará las riendas del país vecino y se dirigirá inmediatamente después a Alemania para mantener su primera reunión de trabajo como mandatario con la canciller Merkel, firme defensora de las medidas de austeridad en la Unión Europea frente a la apuesta por medidas de crecimiento que abandera el socialista galo.
En su primera semana como presidente francés, Hollande deberá afrontar sus dos primeros compromisos internacionales, ambos en Estados Unidos, la cumbre del G8 y la cumbre de la OTAN en Chicago, en la que podría anunciar la aceleración del repliegue de las fuerzas militares galas desplegadas en Afganistán en el marco de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF).
En sus primeros días, el presidente socialista deberá cerrar la composición de su primer ejecutivo, tras la dimisión del Gobierno liderado por el conservador Francois Fillon, elegido hace cinco años por Sarkozy poco después de asumir el cargo. Hollande anunciará antes del jueves su primer gabinete, con el objetivo de celebrar el primer Consejo de Ministros el jueves.