Ficha técnica 2- Valencia CF: Diego Alves (2); Miguel (2), Rami (2), Víctor Ruíz (2), Jordi Alba (3); Albelda (2), Parejo (1), Tino Costa (2), Feghouli (1), Mathieu (2); y Soldado (3) 3- Real Madrid: Casillas (2); Arbeloa (1), Pepe (2), Ramos (3), Marcelo (1); Lass (2), Khedira (2), Xabi Alonso (2), Ozil (1); Ronaldo (3) y Benzema (2) Cambios : En el Valencia entró Jonas (2) por Parejo (min. 61), Pablo Hernández (2) por Feghouli (min. 72) y Aduriz (1) por Jordi Alba (min. 84). Por parte del conjunto visitante entraron Albiol (1) por Arbeloa (min. 49), Higuaín (1) por Benzema (min. 73) y Granero (1) por Lass (min. 85). Goles: 0-1 Benzema min. 19; 0-2 Ramos min. 71; 1-2 Soldado min. 74; 1-3 Ronaldo min.78; 2-3 Soldado min.81 Árbitro: Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro) (2). En el conjunto local mostró la amarilla a Tino Costa (21’) y Albelda (59´); mientras que en el Real Madrid amonestó a Arbeloa (33’), Ronaldo (51’), Marcelo (54’), Ozil (55’), Ramos (59´), Xabi Alonso (64´) y Granero (92´). Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 13 de la Liga BBVA. Estadio de Mestalla. Terreno de juego en buenas condiciones. Datos destacables Lo mejor: El empuje de Mestalla La afición fue el jugador número 12 del equipo en todo momento, a pesar de la mala imagen ofrecida por el Valencia en la primera mitad. Lo peor: Las tanganas Durante gran parte de la segunda mitad las polémicas y las faltas hicieron que el juego se trabase sin dejar brillar el fútbol. El dato: Primera derrota en casa Ni Barcelona, ni Chelsea, ni Atlético... Nadie había conseguido vencer al Valencia en su feudo esta temporada hasta el día de hoy.

El equipo de Mou sale muy reforzado de Mestalla tras lograr una trabajada victoria. Gran partido en el que hubo de todo, sobretodo en la última media hora de partido. El empuje de la afición valencianista fue clave para que su equipo rozara el empate en los minutos finales.

El partido tuvo dos tiempos claramente distintos. En la primera mitad el Real Madrid fue muy superior al equipo local. El trivote formado por Lass, Khedira y Xabi Alonso pasó por encima del mediocampo del Valencia. Emery también había alineado tres jugadores en el centro del campo con Albelda, Tino Costa y Parejo. El último echó en falta, quizás, un mayor ritmo de competición, ya que en ciertas fases del encuentro estuvo muy desaparecido.

Así, el Valencia no conseguía inquietar en absoluto la portería de Casillas y el Real Madrid se sentía muy cómodo a la contra. Con un lanzador como Xabi Alonso, y un gran potencial ofensivo como viene demostrando a lo largo de la temporada, el Madrid solo tenía que esperar su oportunidad. Después de varios avisos, fue en el minuto 19 cuando un buen balón de Alonso, pillando muy dormida a la zaga valencianista, lo aprovecharía Benzema para controlar y batir con un gran zurdazo a Diego Alves. Golazo del francés que adelantaba a los suyos.

El equipo local lo intentó en los minutos finales del primer periodo, eso sí, más con corazón que con cabeza. El marcador no se movería hasta el descanso y el resultado era justo, o incluso algo corto para el Real Madrid, que había podido hacer algún otro tanto.

La segunda parte nos depararía un encuentro muy diferente. El Valencia salió enchufado y en los primeros minutos demostró que jugando a fútbol podía empatar el choque. Mathieu y Jordi Alba eran un continuo peligro por la banda izquierda y de las botas del francés salió un peligrosísimo centro al que no llegó Soldado por muy poco. Había sido la acción más clara del equipo ché para empatar el partido.

El Real Madrid, aprovechando su ventaja en el marcador, intentó frenar el juego y el Valencia cayó en la trampa. El juego entró en una fase de muchos parones y poco juego. Faltas, tanganas... Cualquier falta suponía una protesta del jugador que la había hecho, y una protesta de un jugador local para la tarjeta amarilla. Durante veinte minutos el Valencia se olvidó de jugar a fútbol y el equipo de Mourinho se había salido con la suya. Había frenado, momentáneamente, la avalancha de que se le venía encima.

Después de esos minutos de juego brusco y trabado, que se saldaron con varias tarjetas para el Real Madrid, un saque de esquina lo aprovecharía Sergio Ramos para elevarse más que nadie y poner el segundo en el casillero de su equipo. El central andaluz cabeceó de forma sublime y el balón, tras tocar en la madera, entró sin que Alves pudiera hacer nada. Era solo el principio del espectáculo que se viviría a partir de ese momento en Mestalla.

Solo tres minutos después, un gran pase del recién incorporado Jonas, que había entrado para jugar entre líneas, lo aprovechaba Pablo para encarar a Casillas. El castellonense no acertó y el rechace del portero madridista le cayó a Soldado, que con un gran remate de primeras con el empeine de su bota derecha, recortaró diferencias.

En un partido de locos, nadie se arriesgaba a aventurar lo que iba a pasar. Así, en el 81, Cristiano Ronaldo aprovecharía una mala salida de Diego Alves en un balón largo para, casi sin ángulo, hacer el 1-3 e intentar frenar el ímpetu valencianista.

Pero no fue así, ya que dos minutos más tarde, Pablo se aprovecharía de un despiste de Marcelo para poner un centro que, otra vez Soldado, anticipándose a Sergio Ramos, remató al fondo de las mallas. El Valencia creía en la remontada.

A partir de ahí, el dominio local fue absoluto. Alentado por el empuje de la afición, el valencia buscaría el empate a la desesperada. Soldado, Rami o Aduriz, intentaron poner las tablas en el marcador sin demasiada fortuna. A este partidazo le faltaba algo para tener de todo y la polémica llegaría en el minuto 94.

Se habían añadido cuatro minutos, poco para el tiempo que se había interrumpido el juego. Tino Costa se disponía a botar una falta cerca del córner y hasta Diego Alves había subido a intentar el remate. El lanzamiento acabó con un cabezazo al larguero y, después del posterior rechace, un lanzamiento de Soldado que rebotó en un jugador del Madrid que se encontraba en el suelo. Los jugadores valencianistas se comían al árbitro reclamando mano. El colegiado se encontraba muy cerca de la jugada, pero este no había visto nada.

Tras varias tomas en la televisión, parece que Higuaín para el balón desde el suelo con la mano voluntariamente. Pero una vez más, esto demuestra lo difícil que es ser árbitro de Primera División. Teixeira Vitienes estuvo acertado en casi todos los lances del juego en un partido complicadísimo de dirigir. No se le puede reprochar nada.

De esta forma, sería un error por parte de todos recordar este partido más por el penalti no pitado, que por el gran espectáculo que nos han ofrecido estos dos equipos que, a pesar de la rivalidad que muchos se empeñan en resaltar, se tienen mucho respeto y nos ofrecen encuentros inolvidables como este. El Valencia ha demostrado que puede jugarle de tú a tú a cualquier equipo del mundo, y el Real Madrid que es un equipo con madera de líder, y que además de jugar bien, sabe sufrir cuando el partido se tuerce. Quizás el resultado justo hubiese sido un empate, pero el fútbol no siempre hace justicia.