Como dice el refrán, “más vale prevenir que curar”. Y nunca mejor dicho para el ciclismo. Si se siguen una serie de consejos, facilitados por la Dirección General de Tráfico, se podrían evitar algunos accidentes mortales.
• El tamaño de la bicicleta debe ser el adecuado de acuerdo a la altura del ciclista. También es importante que el sillín y el manillar estén a la misma altura.
• Elegir carreteras con poco tráfico y, por otro lado, es recomendable evitar salir los días con mala visibilidad.
• Si se circula de noche hay que llevar el correspondiente alumbrado para ser detectado en la vía por los demás vehículos. Además, para estos casos es conveniente que el ciclista utilice una prenda reflectante.
• Circular siempre en línea recta y no haciendo eses que podrían distraer a los demás conductores.
• El casco de protección, homologado para la protección, es obligatorio. Puede resultar molesto, pero es un seguro de vida para evitar lesiones en el cráneo. Es conveniente llevar suficiente agua, herramientas y recambios, así como gafas protectores y guantes.
• Está prohibido conducir haciendo uso de receptores y reproductores de sonidos para evitar distracciones. El teléfono móvil hay que llevarlo por si sucede algún accidente para poder pedir asistencia.
• Solo se permite viajar un pasajero. Si bien, cabe la posibilidad de que viaje otro, con asiento homologado, si el conductor es mayor de edad y el pasajero no rebasa los siete años.
• Evitar conducir bajo el efecto del alcohol. Los ciclistas también están sometidos al control de alcoholemia por parte de los agentes.
• Ejecutar bien las maniobras. En este sentido, si se realizo un giro hay que señalizarlo a los otros usuarios extendiendo el brazo de manera horizontal a la altura del hombro. También, hay que mirar hacia atrás comprobando que no se acercan vehículos o que están lo suficientemente lejos.
• Cuando se circule por la ciudad, si existe una vía para ciclistas se deberá de circular por esta y si no habrá que coger el arcén. En el caso de no haber ninguna de estas dos opciones, hay que ceñirse lo máximo a la derecha de la vía.
• Dejar un metro y medio de distancia con respecto a los coches aparcados, por si se abre una puerta o arrancan de manera inesperada.
• Si se va en grupo, por consiguiente, se podrá circular en columna de dos como máximo.
• Respetar las señales viales. Ante un semáforo en rojo los ciclistas deben detenerse. Actualmente, muchos de ellos no se paran y, por lo tanto, inflingen esta norma.