Ayer lo hacíamos público. Un grupo de asociaciones cívicas, entre las que se encuentra el Foro Liberal que tengo el honor de presidir, ha lanzado a la red el “manifiesto en defensa de nuestra libertad”. Va la cosa de la por los españoles conocida como “ley de la patada en el router” o “ley Sinde”. Despojo legal aprobado hace nada por el Consejo de Ministros de José Luis Rodríguez Zapatero, ese señor que va por ahí presumiendo de “ampliar derechos” mientras los restringe. Entiendo que estamos ante un manifiesto de corte netamente liberal que defiende las libertades individuales y la propiedad privada del asalto permanente al que los somete la casta parasitaria que malgobierna (y oposita) en lo que queda de España. Parásitos tecnófobos empeñados en liquidar el progreso, inseparable de la libertad y la globalización, que representa la red de redes. Libertad 2.0.
Y es que si el Congreso de los Diputados aprobase, tal y como está redactada, la disposición final primera de la “Ley de Economía Sostenible” que no se sostiene por ningún lado, un grupo de amiguetes nombrados para formar la por Sinde –les prometo que no es mala baba mía- denominada Sección Segunda (SS), órgano administrativo, podría decidir clausurar o impedir el acceso de los internautas españoles a, sin ir más lejos, Google. China. O prohibir el muy izquierdista Menéame. España franquista. Con un enlace a una web con un contenido ilícito bastaría.
Los jueces, utilizados como coartada por un gobierno que de un plumazo se estaría ventilando derechos fundamentales de las personas y a la propia Justicia, se tendrían que limitar a ejercer de chicos de los recados de la administración. Sorprende, aunque no mucho, el silencio de Sus Señorías y sus asociaciones.
Y todo ello sin contar con el daño que este tipo de atentados antidemocráticos contra los derechos individuales hacen a los creadores, que no son precisamente algunos de los que presumen de serlo. Creadores que son mirados cada vez con mayor desconfianza –sigue la caída libre del cine [público] español- por los ciudadanos. O del daño que la medida ocasionará entre el sector empresarial dedicado a esto de la red y la tecnología. Vamos, que el gobierno se ha marcado una pasada totalitaria de las que hacen historia.
Debo decir que la respuesta de los internautas nada más hacer pública la web Libertad 2.0 (http://libertad20.es) ha sido impresionante. En dos horas cientos de personas se habían adherido al manifiesto, decenas de blogs lo habían repicado en sus páginas y los tweets iban y venían. Mañana presentaremos el manifiesto en rueda de prensa en el centro riojano de Madrid. Están todos ustedes invitados. Seguro que habrá sorpresas.