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Teresa Berengueras y Rafa Esteve-Casanova

Sofía Loren, espléndida madrina de "Splendida"

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La actriz italiana Sofía Loren se desplazó hasta Barcelona para amadrinar el que a partir de ahora es el buque insignia de la compañía MSC Cruceros, MSC SPLENDIDA llegaba al puerto de esta ciudad después de realizar un crucero preinaugural desde los astilleros de Saint Nazaire en Francia habiendo pasado por puertos como Vigo, Lisboa, Málaga, Palma de Mallorca y Marsella. La gran gala en la que la tradicional botella de champagne se rompe contra el casco del buque tuvo lugar el domingo doce de julio a última hora de la tarde en medio de una gran fiesta en la que también participaron el bailarín Joaquín Cortés y el tenor catalán Josep Carreras acompañado por la Orquestra Simfònica del Vallès. Aprovechamos esta estancia del MSC SPLENDIDA en la terminal A del muelle adosado del puerto barcelonés para llegarnos hasta allí, visitar y dormir en el barco, escuchar las palabras de Sofía Loren y presenciar la fiesta de la botadura.




La estrella Sofía Loren en el momento
de la botadura.


LA LLEGADA
Fue un domingo muy ajetreado, ya de buena mañana y a pesar de haber pedido telefónicamente un taxi cuyo conductor conociera nuestro lugar de destino llegamos tarde a la cita que teníamos todos los informadores para ver las instalaciones del MSC SPLENDIDA, el taxista se equivocó de terminal, cuando ya sabíamos hacia donde dirigirnos confundió un carril y de milagro no terminamos en la Plaza de Catalunya. Pero no se habían terminado ahí nuestras cuitas, en el área del “check-in” no aparecían nuestros nombres en ninguna de las listas de invitados y prensa, tampoco aparecían por parte alguna los responsables de recibir a la prensa y acreditarnos, allí estábamos parados como dos pasmarotes al lado de dos guardias civiles encargados de controlar el acceso al buque, en algún momento tuvimos la sensación de ser dos polizones pillados “in fraganti”. Menos mal que el buen hacer del personal de tierra de MSC Cruceros, que amablemente se desvivieron por atendernos, solucionó este problema que nos tuvo en la puerta durante cerca de treinta minutos. Cuando ya teníamos en nuestro poder la tarjetas de embarque donde se nos asignaba el número de camarote hicieron su aparición las personas encargadas de atender a los periodistas y nos acompañaron hasta la sexta planta donde se nos entregó la documentación y el programa del día en el que tan sólo aparecían los horarios pero sin especificar cómo y de que manera podríamos realizar nuestro trabajo.




Restaurante La Reggia.


EL BUQUE EN CIFRAS
La verdad es que las cifras que hay alrededor del MSC SPLENDIDA son mareantes. Tiene una longitud de 333’3 metros, es decir es mas largo que la Torre Eiffel colocada horizontalmente. Visto desde el pantalán es impresionante, su altura es de 66’8 metros lo que equivaldría a un rascacielos de 23 plantas, y su tonelaje es de 137.936 toneladas, naturalmente para mover todo esto hace falta una gran potencia como la de las dos hélices de seis metros de longitud cada una de ellas y de un peso de más de 17 toneladas con las que se consigue una velocidad de 23’3 nudos. En sus 450.000 metros cuadrados caben 60 campos de fútbol y en ellos hay un teatro con capacidad para 1.600 espectadores, también para los amantes del juego y el azar un casino de mil metros cuadrados y para que los padres puedan dejar con toda tranquilidad los niños se ha creado una zona infantil de 400 metros cuadrados. Este buque puede trasladar a 3959 pasajeros que pueden amenizar su tiempo de navegación entre escala y escala en la cinco piscinas existentes alrededor de las cuales existen doce bañeras de hidromasajes. Como ven toda una ciudad surcando los mares, una ciudad que dispone de 18 bares diferentes, 4 restaurantes y dos buffets y entre todos pueden servir catorce menús diarios ofreciendo 2.000 platos diferentes por lo que se podrían probar cinco platos distintos cada día si el pasajero estuviera todo un año navegando.

En un día no nos fue posible, al fin y al cabo habíamos ido a trabajar, ver todas las instalaciones y todos los rincones del MSC SPLENDIDA. Subimos y bajamos en algunos de los 25 ascensores instalados en la nave, dos de ellos panorámicos y desde uno de ellos admiramos uno de los tantos bares, en este dos escaleras, tipo Las Vegas, comunicaban dos pisos, sus escalones estaban decorados con cristales tan relucientes como el mejor de los brillantes lo mismo que el piano desde el que un pianista acompañado por dos violinistas iban desgranando valses de Strauss. Comimos en uno de los buffets, el Bora Bora, y a pesar de que fue a una hora inusual para nuestras costumbres, era antes de las trece horas, la comida nos pareció correcta y abundantes los platos donde elegir. Más de mil trescientos tripulantes, llenos de amabilidad y conocedores de varios idiomas, hacen que los pasajeros se sientan cómodos durante la travesía.




Sofía Loren en la rueda de prensa.


COMPLICADA RUEDA DE PRENSA
Se celebraron ese día dos ruedas de prensa consecutivas. En la primera los responsables de MSC Cruceros junto con el capitán de la nave y en la segunda, la más esperada por todos, Sofía Loren. El lugar escogido para su celebración no era el más idóneo para un acto en el que estaba presente prensa de todo el mundo, era una amplia sala, The Aft Lounge, destinada a escuchar música, bailar y tomar una copa, todo menos un local en condiciones para celebrar una multitudinaria rueda de prensa con una estrella mundial como es Sofía Loren y más cuando el acceso al local fue libre y en el mismo había personas que nada tenían que ver con la prensa y que ardían en deseos de fotografiar con sus móviles a la actriz italiana.

En primer lugar comparecieron, sentados detrás de una mesa y en representación de MSC Cruceros, Pierfrancesco Vago, Consejero Delegado, Achille Staiano, Director Comercial y Giuliano Bossi, Capitán del MSC SPLENDIDA. Tomó la palabra el señor Vago quién comenzó diciendo que la conferencia sería en inglés ya que entre los presentes había periodistas de diversos países. En principio expresó su deseo de que el mundo venga a Barcelona para conocer a la empresa ya que semanalmente son dos los barcos de la misma que salen desde este puerto hacia diferentes destinos, la elección de Barcelona se ha debido a la importancia que en los últimos años ha tomado el turismo de cruceros en la capital catalana ya que en estos momentos su puerto es el más importante de Europa en este tipo de turismo y está catalogado como el quinto a nivel mundial. Los señores Vago y Staiano fueron turnándose en sus intervenciones junto con alguna pequeña precisión técnica por parte del capitán. Para ello hicieron que esta conferencia de prensa fuera interactiva gracias al power point y desde la pantalla nos iban abrumando con diversos datos técnicos y cifras de las que ya hemos hablado en el apartado anterior. Los responsables de esta empresa de cruceros manifestaron que debido al precio de los mismos no es dificultoso para nadie poder viajar en los mismos, vamos, son el low cost del mundo de los cruceros, mueven un millón de pasajeros al año desde las cuarenta y dos oficinas que tienen esparcidas por todo el mundo. Sus previsiones para el año 2010 son tener once barcos a lo largo de todos los mares y más 125 itinerarios alrededor del mundo. Ellos ofrecen a sus clientes exclusividad y privacidad bajo el lema de “diferentes targets para diferentes necesidades”. También están comprometidos con el medioambiente ya que MSC SPLENDIDA está equipado con las últimas tecnologías en tratamiento de agua y reciclaje y colaboran estrechamente con UNICEF mediante un acuerdo que beneficiará a los niños y adolescentes más necesitados de Brasil ayudando a garantizar que reciban una educación de calidad.

Al terminar, uno de nosotros expresó públicamente a los responsables de la empresa allí presentes el deseo de que se hubiera utilizado la traducción simultánea tanto al catalán como al castellano, al fin y al cabo estábamos en Barcelona a la que, al parecer, MSC Cruceros tiene en gran estima ya que elementos derivados de la obra de Gaudí aparecen en varios de sus buques. La respuesta fue que la conferencia de prensa para periodistas españoles había sido el sábado, la verdad es que el sábado quién habló fue Emiliano González, Director General de la Compañía en España y a nosotros nadie nos había informado que a los españoles “nos daban a comer aparte”. Últimamente la colonización anglosajona cabalga a marchas forzadas, ya sabemos que el inglés es un idioma internacional pero no debemos ni podemos olvidar el nuestro, es un derecho que tenemos y forma parte de nuestra cultura. En ese momento Concha Ares, Vicepresidenta de UNICEF en Catalunya, nos explicó que tenía que hablar en el acto de la botadura y que le habían dicho que ni una palabra en catalán.




El MSC Splenda navegando.


Y se armó el revuelo. Habían retirado la mesa donde se había celebrado la anterior rueda de prensa y en su lugar y a ras de suelo colocaron dos mesitas redondas y entre ellas unos butacones, la nube de fotógrafos se movía como una masa informe arrollando cuanto encontraba a su paso, la organización no había previsto ningún tipo de cordón de seguridad, en algún momento llegamos a temer por nuestra integridad física y nos llevamos más de un pisotón y algún coscorrón proveniente de alguna cámara de televisión, todo un caos, los responsables de prensa no sabemos donde estaban, no les vimos, no hicieron acto de presencia para intentar arreglar aquello y Sofía Loren llegó rodeada por una decena de guardaespaldas.

Los fotógrafos y los cámaras de televisión se agolpaban sin orden ni concierto ante la actriz que sentada esperaba, mientras mostraba su mejor sonrisa, que el caos se solucionara, en lugar de ello se nos llegó a amenazar a todos los presentes con la suspensión de la rueda de prensa si fotógrafos y cámaras no cesaban en su trabajo, los guardaespaldas y la organización comenzaron a empujar hacia detrás a los reporteros gráficos y los de lápiz y papel que estábamos en la primeras filas por un momento tuvimos la sensación de que íbamos a ser aplastados por nuestros colegas que sucumbieron ante la mala organización que todos sufrimos.

Finalmente se despejó el lugar y pudimos ver a una Sofía Loren, espléndida en sus casi setenta y cinco años y dispuesta a contestar todas las preguntas que se le hicieran. Vestida de negro con amplio escote, largo chanel y una gargantilla de oro adornando su esbelto cuello y unos pendientes, también de oro, colgando de sus orejas. Dijo que el cómo y el por qué de su todavía belleza y figura es un secreto, lo dijo tres o cuatro veces porque hubo colegas que no sabían salir de éste tema, hasta que finalmente contestó a uno de ellos indicándole que ya había contestado a esta pregunta, no se considera la más grande del mundo pero sí que lo dicen de ella sus amigos, su próximo trabajo será interpretarse a si misma en una película sobre su vida que dirigirá su hijo Carlo Ponti, a la pregunta de si podría ser Penélope Cruz quién en el film fuera la Sofía joven no dudó al responder diciendo que creía que no puesto que iba a ser una producción totalmente italiana, afirmó también que es muy seria en su trabajo y que no sabe que es lo que pasa con las nuevas actrices, pero alabó a sus compañeros de reparto en “Nine” entre los que están Nicole Kidman, Penélope Cruz, Judi Dench y Daniel Day Lewis de quien aseguró que es el gran actor del momento. No es extraño que sea la madrina de toda la flota de MSC Cruceros ya que es una gran amante del mar porque, cómo dijo, es napolitana. Sofía Loren ha rodado en España en diversas ocasiones y no lo olvida, afirmó que lo lleva en su corazón y que cada vez que viene a España recuerda a grandes actores con los que trabajó como Cary Grant, Frank Sinatra y Charlton Heston. La rueda de prensa llegaba a su final por falta de preguntas y la última que se le hizo a la actriz fue conocer su opinión sobre el hecho de que los ferroviarios chilenos llamaran a una locomotora con su nombre porque las curvas de la misma les recordaban las de la actriz, su respuesta fue: “Oh! Che bello complimento” y con menos revuelo que el que se había montado a su llegada Sofía marchó a descansar hasta la hora de la botadura.




Valeria Marini con Rafa Esteve-Casanova
y Teresa Berengueras.


LA FIESTA DE LA BOTADURA
Y por fin llegó el momento de la gran fiesta. Se montaron en el pantalán unas gradas para acoger a más de tres mil invitados, el barco totalmente iluminado era en aquellos momentos un elemento más del escenario, un escenario decorado con motivos relativos a Gaudí que de cerca daban la impresión de cartón piedra pero que en fotografía quedaban idóneos. Hubo, como en toda fiesta que se precie, desfile de conocidos y famosos, mucha italiana entre las que destacaba la presentadora Valeria Marini, de las españolas Ana Obregón y Coral Bistuer, el polifacético Boris Izaguirre, el recién descubierto Olfo Bosé, pero el que más aplausos recibió fue Joan Laporta Presidente del F.C. Barcelona. Comenzó el acto con el famoso Barcelona de Freddy Mercury mientras el presentador alternando, como hicieron todos los que subieron al escenario a lo largo de la noche, catalán, castellano e inglés iba dando paso a las personalidades que tenían que dirigir la palabra a los invitados. También se dirigió a los presentes el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu quién felicitó a la compañía por haber elegido Barcelona que es una ciudad en pleno auge de crecimiento turístico. Una vez terminados los largos parlamentos, ya que fueron muchos los que tomaron la palabra, comenzó el espectáculo con la actuación de Joaquín Cortés que fue largamente ovacionado por el público, pero la gran actuación de la noche fue la presencia sobre el escenario del tenor Josep Carreras quién acompañado por la Orquestra Simfònica del Vallès dirigida por David Jiménez Carreras cantó un variado repertorio en el que no faltaron los compositores italianos ni tampoco Carlos Gardel de quién interpretó “Lejana tierra mía” o la popular “Rosò” del maestro Ribas. Carreras no podía terminar su recital sin acordarse de la madrina del acto y dedicó a Sofía la canción “Core n’grato” del maestro Salvatore Cardillo para terminar con el conocido tema “Torna a Surriento” entre las ovaciones de un público que le aplaudió puesto en pie en diversos momentos de su actuación.




Una de las discotecas del barco.


Tampoco faltó en esta noche una de las manifestaciones más populares del folklore catalán, el mundo “casteller” estuvo representado por la "colla" Castellers de Barcelona quiénes elevaron diversas torres entre las miradas de sorpresa del público asistente. La hora del bautizo había llegado, a los acordes de la Marcha Triunfal de la ópera Aída los oficiales de la tripulación del MSC SPLENDIDA fueron llegando desde diversos puntos de lo más alto de las gradas hasta el pie del escenario. Sofía Loren con un espectacular vestido negro largo, pelo recogido en un moño bajo y con un escote muy sofisticado y una gargantilla de perlas que abrazaban su cuello subió al estrado del brazo del capitán del barco y cortó la cinta, con los colores de la bandera italiana, que llevaría a una gran botella de champagne a estrellarse contra el casco del buque. Inmediatamente el lugar se inundó de papelitos de diversos colores mientras un castillo de fuegos artificiales recibía a este gran buque que al día siguiente saldría con destino a diversos puertos del Mediterráneo.

Sofía Loren, espléndida madrina de "Splendida"

Teresa Berengueras y Rafa Esteve-Casanova
Teresa Berengueras
miércoles, 15 de julio de 2009, 05:04 h (CET)
La actriz italiana Sofía Loren se desplazó hasta Barcelona para amadrinar el que a partir de ahora es el buque insignia de la compañía MSC Cruceros, MSC SPLENDIDA llegaba al puerto de esta ciudad después de realizar un crucero preinaugural desde los astilleros de Saint Nazaire en Francia habiendo pasado por puertos como Vigo, Lisboa, Málaga, Palma de Mallorca y Marsella. La gran gala en la que la tradicional botella de champagne se rompe contra el casco del buque tuvo lugar el domingo doce de julio a última hora de la tarde en medio de una gran fiesta en la que también participaron el bailarín Joaquín Cortés y el tenor catalán Josep Carreras acompañado por la Orquestra Simfònica del Vallès. Aprovechamos esta estancia del MSC SPLENDIDA en la terminal A del muelle adosado del puerto barcelonés para llegarnos hasta allí, visitar y dormir en el barco, escuchar las palabras de Sofía Loren y presenciar la fiesta de la botadura.




La estrella Sofía Loren en el momento
de la botadura.


LA LLEGADA
Fue un domingo muy ajetreado, ya de buena mañana y a pesar de haber pedido telefónicamente un taxi cuyo conductor conociera nuestro lugar de destino llegamos tarde a la cita que teníamos todos los informadores para ver las instalaciones del MSC SPLENDIDA, el taxista se equivocó de terminal, cuando ya sabíamos hacia donde dirigirnos confundió un carril y de milagro no terminamos en la Plaza de Catalunya. Pero no se habían terminado ahí nuestras cuitas, en el área del “check-in” no aparecían nuestros nombres en ninguna de las listas de invitados y prensa, tampoco aparecían por parte alguna los responsables de recibir a la prensa y acreditarnos, allí estábamos parados como dos pasmarotes al lado de dos guardias civiles encargados de controlar el acceso al buque, en algún momento tuvimos la sensación de ser dos polizones pillados “in fraganti”. Menos mal que el buen hacer del personal de tierra de MSC Cruceros, que amablemente se desvivieron por atendernos, solucionó este problema que nos tuvo en la puerta durante cerca de treinta minutos. Cuando ya teníamos en nuestro poder la tarjetas de embarque donde se nos asignaba el número de camarote hicieron su aparición las personas encargadas de atender a los periodistas y nos acompañaron hasta la sexta planta donde se nos entregó la documentación y el programa del día en el que tan sólo aparecían los horarios pero sin especificar cómo y de que manera podríamos realizar nuestro trabajo.




Restaurante La Reggia.


EL BUQUE EN CIFRAS
La verdad es que las cifras que hay alrededor del MSC SPLENDIDA son mareantes. Tiene una longitud de 333’3 metros, es decir es mas largo que la Torre Eiffel colocada horizontalmente. Visto desde el pantalán es impresionante, su altura es de 66’8 metros lo que equivaldría a un rascacielos de 23 plantas, y su tonelaje es de 137.936 toneladas, naturalmente para mover todo esto hace falta una gran potencia como la de las dos hélices de seis metros de longitud cada una de ellas y de un peso de más de 17 toneladas con las que se consigue una velocidad de 23’3 nudos. En sus 450.000 metros cuadrados caben 60 campos de fútbol y en ellos hay un teatro con capacidad para 1.600 espectadores, también para los amantes del juego y el azar un casino de mil metros cuadrados y para que los padres puedan dejar con toda tranquilidad los niños se ha creado una zona infantil de 400 metros cuadrados. Este buque puede trasladar a 3959 pasajeros que pueden amenizar su tiempo de navegación entre escala y escala en la cinco piscinas existentes alrededor de las cuales existen doce bañeras de hidromasajes. Como ven toda una ciudad surcando los mares, una ciudad que dispone de 18 bares diferentes, 4 restaurantes y dos buffets y entre todos pueden servir catorce menús diarios ofreciendo 2.000 platos diferentes por lo que se podrían probar cinco platos distintos cada día si el pasajero estuviera todo un año navegando.

En un día no nos fue posible, al fin y al cabo habíamos ido a trabajar, ver todas las instalaciones y todos los rincones del MSC SPLENDIDA. Subimos y bajamos en algunos de los 25 ascensores instalados en la nave, dos de ellos panorámicos y desde uno de ellos admiramos uno de los tantos bares, en este dos escaleras, tipo Las Vegas, comunicaban dos pisos, sus escalones estaban decorados con cristales tan relucientes como el mejor de los brillantes lo mismo que el piano desde el que un pianista acompañado por dos violinistas iban desgranando valses de Strauss. Comimos en uno de los buffets, el Bora Bora, y a pesar de que fue a una hora inusual para nuestras costumbres, era antes de las trece horas, la comida nos pareció correcta y abundantes los platos donde elegir. Más de mil trescientos tripulantes, llenos de amabilidad y conocedores de varios idiomas, hacen que los pasajeros se sientan cómodos durante la travesía.




Sofía Loren en la rueda de prensa.


COMPLICADA RUEDA DE PRENSA
Se celebraron ese día dos ruedas de prensa consecutivas. En la primera los responsables de MSC Cruceros junto con el capitán de la nave y en la segunda, la más esperada por todos, Sofía Loren. El lugar escogido para su celebración no era el más idóneo para un acto en el que estaba presente prensa de todo el mundo, era una amplia sala, The Aft Lounge, destinada a escuchar música, bailar y tomar una copa, todo menos un local en condiciones para celebrar una multitudinaria rueda de prensa con una estrella mundial como es Sofía Loren y más cuando el acceso al local fue libre y en el mismo había personas que nada tenían que ver con la prensa y que ardían en deseos de fotografiar con sus móviles a la actriz italiana.

En primer lugar comparecieron, sentados detrás de una mesa y en representación de MSC Cruceros, Pierfrancesco Vago, Consejero Delegado, Achille Staiano, Director Comercial y Giuliano Bossi, Capitán del MSC SPLENDIDA. Tomó la palabra el señor Vago quién comenzó diciendo que la conferencia sería en inglés ya que entre los presentes había periodistas de diversos países. En principio expresó su deseo de que el mundo venga a Barcelona para conocer a la empresa ya que semanalmente son dos los barcos de la misma que salen desde este puerto hacia diferentes destinos, la elección de Barcelona se ha debido a la importancia que en los últimos años ha tomado el turismo de cruceros en la capital catalana ya que en estos momentos su puerto es el más importante de Europa en este tipo de turismo y está catalogado como el quinto a nivel mundial. Los señores Vago y Staiano fueron turnándose en sus intervenciones junto con alguna pequeña precisión técnica por parte del capitán. Para ello hicieron que esta conferencia de prensa fuera interactiva gracias al power point y desde la pantalla nos iban abrumando con diversos datos técnicos y cifras de las que ya hemos hablado en el apartado anterior. Los responsables de esta empresa de cruceros manifestaron que debido al precio de los mismos no es dificultoso para nadie poder viajar en los mismos, vamos, son el low cost del mundo de los cruceros, mueven un millón de pasajeros al año desde las cuarenta y dos oficinas que tienen esparcidas por todo el mundo. Sus previsiones para el año 2010 son tener once barcos a lo largo de todos los mares y más 125 itinerarios alrededor del mundo. Ellos ofrecen a sus clientes exclusividad y privacidad bajo el lema de “diferentes targets para diferentes necesidades”. También están comprometidos con el medioambiente ya que MSC SPLENDIDA está equipado con las últimas tecnologías en tratamiento de agua y reciclaje y colaboran estrechamente con UNICEF mediante un acuerdo que beneficiará a los niños y adolescentes más necesitados de Brasil ayudando a garantizar que reciban una educación de calidad.

Al terminar, uno de nosotros expresó públicamente a los responsables de la empresa allí presentes el deseo de que se hubiera utilizado la traducción simultánea tanto al catalán como al castellano, al fin y al cabo estábamos en Barcelona a la que, al parecer, MSC Cruceros tiene en gran estima ya que elementos derivados de la obra de Gaudí aparecen en varios de sus buques. La respuesta fue que la conferencia de prensa para periodistas españoles había sido el sábado, la verdad es que el sábado quién habló fue Emiliano González, Director General de la Compañía en España y a nosotros nadie nos había informado que a los españoles “nos daban a comer aparte”. Últimamente la colonización anglosajona cabalga a marchas forzadas, ya sabemos que el inglés es un idioma internacional pero no debemos ni podemos olvidar el nuestro, es un derecho que tenemos y forma parte de nuestra cultura. En ese momento Concha Ares, Vicepresidenta de UNICEF en Catalunya, nos explicó que tenía que hablar en el acto de la botadura y que le habían dicho que ni una palabra en catalán.




El MSC Splenda navegando.


Y se armó el revuelo. Habían retirado la mesa donde se había celebrado la anterior rueda de prensa y en su lugar y a ras de suelo colocaron dos mesitas redondas y entre ellas unos butacones, la nube de fotógrafos se movía como una masa informe arrollando cuanto encontraba a su paso, la organización no había previsto ningún tipo de cordón de seguridad, en algún momento llegamos a temer por nuestra integridad física y nos llevamos más de un pisotón y algún coscorrón proveniente de alguna cámara de televisión, todo un caos, los responsables de prensa no sabemos donde estaban, no les vimos, no hicieron acto de presencia para intentar arreglar aquello y Sofía Loren llegó rodeada por una decena de guardaespaldas.

Los fotógrafos y los cámaras de televisión se agolpaban sin orden ni concierto ante la actriz que sentada esperaba, mientras mostraba su mejor sonrisa, que el caos se solucionara, en lugar de ello se nos llegó a amenazar a todos los presentes con la suspensión de la rueda de prensa si fotógrafos y cámaras no cesaban en su trabajo, los guardaespaldas y la organización comenzaron a empujar hacia detrás a los reporteros gráficos y los de lápiz y papel que estábamos en la primeras filas por un momento tuvimos la sensación de que íbamos a ser aplastados por nuestros colegas que sucumbieron ante la mala organización que todos sufrimos.

Finalmente se despejó el lugar y pudimos ver a una Sofía Loren, espléndida en sus casi setenta y cinco años y dispuesta a contestar todas las preguntas que se le hicieran. Vestida de negro con amplio escote, largo chanel y una gargantilla de oro adornando su esbelto cuello y unos pendientes, también de oro, colgando de sus orejas. Dijo que el cómo y el por qué de su todavía belleza y figura es un secreto, lo dijo tres o cuatro veces porque hubo colegas que no sabían salir de éste tema, hasta que finalmente contestó a uno de ellos indicándole que ya había contestado a esta pregunta, no se considera la más grande del mundo pero sí que lo dicen de ella sus amigos, su próximo trabajo será interpretarse a si misma en una película sobre su vida que dirigirá su hijo Carlo Ponti, a la pregunta de si podría ser Penélope Cruz quién en el film fuera la Sofía joven no dudó al responder diciendo que creía que no puesto que iba a ser una producción totalmente italiana, afirmó también que es muy seria en su trabajo y que no sabe que es lo que pasa con las nuevas actrices, pero alabó a sus compañeros de reparto en “Nine” entre los que están Nicole Kidman, Penélope Cruz, Judi Dench y Daniel Day Lewis de quien aseguró que es el gran actor del momento. No es extraño que sea la madrina de toda la flota de MSC Cruceros ya que es una gran amante del mar porque, cómo dijo, es napolitana. Sofía Loren ha rodado en España en diversas ocasiones y no lo olvida, afirmó que lo lleva en su corazón y que cada vez que viene a España recuerda a grandes actores con los que trabajó como Cary Grant, Frank Sinatra y Charlton Heston. La rueda de prensa llegaba a su final por falta de preguntas y la última que se le hizo a la actriz fue conocer su opinión sobre el hecho de que los ferroviarios chilenos llamaran a una locomotora con su nombre porque las curvas de la misma les recordaban las de la actriz, su respuesta fue: “Oh! Che bello complimento” y con menos revuelo que el que se había montado a su llegada Sofía marchó a descansar hasta la hora de la botadura.




Valeria Marini con Rafa Esteve-Casanova
y Teresa Berengueras.


LA FIESTA DE LA BOTADURA
Y por fin llegó el momento de la gran fiesta. Se montaron en el pantalán unas gradas para acoger a más de tres mil invitados, el barco totalmente iluminado era en aquellos momentos un elemento más del escenario, un escenario decorado con motivos relativos a Gaudí que de cerca daban la impresión de cartón piedra pero que en fotografía quedaban idóneos. Hubo, como en toda fiesta que se precie, desfile de conocidos y famosos, mucha italiana entre las que destacaba la presentadora Valeria Marini, de las españolas Ana Obregón y Coral Bistuer, el polifacético Boris Izaguirre, el recién descubierto Olfo Bosé, pero el que más aplausos recibió fue Joan Laporta Presidente del F.C. Barcelona. Comenzó el acto con el famoso Barcelona de Freddy Mercury mientras el presentador alternando, como hicieron todos los que subieron al escenario a lo largo de la noche, catalán, castellano e inglés iba dando paso a las personalidades que tenían que dirigir la palabra a los invitados. También se dirigió a los presentes el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu quién felicitó a la compañía por haber elegido Barcelona que es una ciudad en pleno auge de crecimiento turístico. Una vez terminados los largos parlamentos, ya que fueron muchos los que tomaron la palabra, comenzó el espectáculo con la actuación de Joaquín Cortés que fue largamente ovacionado por el público, pero la gran actuación de la noche fue la presencia sobre el escenario del tenor Josep Carreras quién acompañado por la Orquestra Simfònica del Vallès dirigida por David Jiménez Carreras cantó un variado repertorio en el que no faltaron los compositores italianos ni tampoco Carlos Gardel de quién interpretó “Lejana tierra mía” o la popular “Rosò” del maestro Ribas. Carreras no podía terminar su recital sin acordarse de la madrina del acto y dedicó a Sofía la canción “Core n’grato” del maestro Salvatore Cardillo para terminar con el conocido tema “Torna a Surriento” entre las ovaciones de un público que le aplaudió puesto en pie en diversos momentos de su actuación.




Una de las discotecas del barco.


Tampoco faltó en esta noche una de las manifestaciones más populares del folklore catalán, el mundo “casteller” estuvo representado por la "colla" Castellers de Barcelona quiénes elevaron diversas torres entre las miradas de sorpresa del público asistente. La hora del bautizo había llegado, a los acordes de la Marcha Triunfal de la ópera Aída los oficiales de la tripulación del MSC SPLENDIDA fueron llegando desde diversos puntos de lo más alto de las gradas hasta el pie del escenario. Sofía Loren con un espectacular vestido negro largo, pelo recogido en un moño bajo y con un escote muy sofisticado y una gargantilla de perlas que abrazaban su cuello subió al estrado del brazo del capitán del barco y cortó la cinta, con los colores de la bandera italiana, que llevaría a una gran botella de champagne a estrellarse contra el casco del buque. Inmediatamente el lugar se inundó de papelitos de diversos colores mientras un castillo de fuegos artificiales recibía a este gran buque que al día siguiente saldría con destino a diversos puertos del Mediterráneo.

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