La guerra por el nuevo formato de discos ópticos para ver películas y otras grabaciones por la televisión ha terminado. Blue-ray, el producto desarrollado por Sony se ha impuesto al HD DVD desarrollado por Toshiba quien ha decidido retirarlo del mercado.

Sony fue el inventor de la cinta de vídeo Betamax y sucumbió en los 80’s a la invasión del VHS en el mercado. Sony se quedó prácticamente como único proveedor del sistema, guardando para sí celosamente la patente. Sus competidores se aliaron y le ganaron la partida con el otro formato.

Ahora la guerra por el nuevo formato que habrá de sustituir al DVD estaba entre Sony y Toshiba que ante una serie de deserciones y finalmente el anuncio el pasado viernes 15, de Wal-Mart Stores, la mayor cadena de distribución americana, de dejar de vender películas y reproductores HD DVD y comercializar únicamente Blue-ray, fue la puntilla y Toshiba tomó la decisión de abandonar el mercado del nuevo formato de la alta definición de los DVDs.

Aunque el rejón de muerte lo había dado anteriormente la Warner Bros, como bien dijo Atsutoshi Nishida, director ejecutivo de Toshiba. En efecto, el pasado 4 de enero, el estudio cinematográfico hizo público que abandonaba el formato HD DVD y venderían películas de alta definición en discos Blue-ray exclusivamente.

Este regalo significaba para Blue-ray un 70% del mercado del vídeo doméstico, con Warner, Walt Disney, 20th Century Fox, Lions Gate Entertainment y Sony Pictures, respaldando todos ellos el formato. Mientras que Toshiba tenía únicamente trato de exclusividad con Universal Pictures, Paramount y DreamWorks, y ofrecía también películas de Warner que las tenía en ambos formatos.

La aparición de un único formato de alta definición es motivo para que los consumidores y la industria entera del entretenimiento lo celebren, dijo Craig Kornblau, presidente de Universal Studios. Es hora de volver a centrarnos en sacar un nuevo catálogo en Blue-ray, añadió.

Sony Corp., por su parte, en una declaración abundaba en esta misma opinión, como no podía ser de otra forma y por la cuenta que le tiene, y acelerará la expansión del mercado, concluyó. Sin lugar a dudas, se incrementarán las ventas de Sony Pictures y las de la marca Bravia, su grupo de electrónica de consumo.

Sony ha jugado empresarialmente bien sus cartas en esta ocasión, habiendo incorporado el “driver” del Blue-ray a su PlayStation3, de la que ha vendido 8 millones de unidades. Frente al millón de reproductores de Toshiba. Ha sido como un Caballo de Troya, dijo de la PS3 Bob Chapek, presidente de la Walt Disney Studios.

Lo irónico es que el reproductor de Toshiba es más barato que el de Sony y las copias de HD DVD tienen un menor coste de producción que las Blue-ray. Por otro lado, si bien la calidad de la imagen es similar en ambos formatos, el HD DVD ofrece más opciones interactivas; aunque el Blue-ray ofrece mayor capacidad de almacenamiento.

En cualquiera de los casos, la transición del DVD al Blue-ray no va a ser tan traumática como lo fue de la cinta de vídeo al DVD. Y en los actuales reproductores de DVD se pueden ver los discos Blue-ray, aunque no con la calidad y nivel de prestaciones para la que han sido diseñados obviamente. Y al igual que en la transición del vídeo al DVD, habrá un tiempo en el que se solaparán ambos formatos, como viene siendo habitual en la mayoría de avances tecnológicos de consumo.

Otra cosa es lo que harán los actuales propietarios de un reproductor de HD DVD de Toshiba cuando ésta deje de producir sus vídeos ópticos. Aunque cabe esperar del buen hacer de la firma y su capacidad de fidelizar a sus clientes que algo se les ocurrirá para satisfacer a quienes apostaron, tal vez prematuramente, por su tecnología.

La cuestión es, sin embargo, hacia dónde tiende el mercado del vídeo doméstico. Porque lo de bajarse películas de Internet está ya a la orden del día y con prepago, pues ya el canon digital se ha ocupado de poner a cada uno en su sitio. Aunque desconozco el procedimiento por el que la SGDE liquidará a las productoras su alícuota parte por la recaudación de DVDs vírgenes que se destinen a descargar sus películas.

Pero también pueden descargarse a través de Apple`s iTunes donde los consumidores pueden adquirir sus películas on line. Y Microsoft está desarrollando también su propio sistema de descargas por Internet, vía el Xbox 360 que se debe perfeccionar aún. Hay quien piensa como Phillip Swann, presidente y consejero delegado de TVPredictions.com, analista de nuevas tecnologías de televisión, que si Microsoft no ha entrado en la batalla por la alta definición al lado de Toshiba es porque necesitaba tiempo aún para desarrollar su sistema.

En cualquier caso, las descargas ilegales de películas por Internet, se haya satisfecho o no el canon digital, no tienen aún la calidad de los DVD convencionales; ni tan siquiera los de los topmanta cuando están grabados.

Compete ahora a los fabricantes de discos ópticos y a las duplicadoras invertir en las nuevas tecnologías, aunque en el futuro inmediato se sigan solapando el Blue-ray con el DVD tradicional, pero es claro que el vídeo doméstico sigue siendo un mercado con alentador futuro, en el que, como en la mayoría de la industria, los costes de producción dejarán a los más competitivos dueños del mercado y deberán reciclarse los demás.