El Madrid aprobó raspado su examen liguero ante su afición. Los de Capello dieron una de cal y una de arena, mostrando un juego lento e insulso en la primera parte donde el equipo acabó siendo pitado. En la segunda, la entrada de Robinho y la cesión de la manija del equipo de Emerson a Guti cambiaron al equipo. Reyes fue la estrella del partido con sus incansables galopadas por la banda derecha, y se despidió en su debut con un precioso gol de falta. Hasta ahí aguantó la Real, que jugaba un partido que no era de “su liga”. Beckham consiguió a la contra el segundo gol cuando el partido tocaba a su fin, y los jugadores blancos acabaron siendo aplaudidos en un partido que bien pudo acabar en tragedia si no hubieran llegado los goles.

FICHA TÉCNICA 2- Real Madrid: Casillas (1), Cicinho (1), Sergio Ramos (1), Cannavaro (1), Roberto Carlos (0), Emerson (0), Diarra (0), Reyes (3), Raúl (1), Guti (2), Van Nistelroy (1). 0- Real Sociedad: Riesgo (1), Gerardo (1), Diego Rivas (2), Juanito (1), Labaka (1), Aranburu (0), López Rekarte (1), Uranga (2), Garrido (1), Díaz de Cerio (0), Xabi Prierto (1). Goles:Reyes (min. 68), Beckham (min. 92). Cambios:Raúl Bravo (2) por R. Carlos (min. 45), Garitano (1) por Gerardo (min. 51), Robinho (2) por Emerson (min. 59), Kovacevic (0) por D. de Cerio (min. 59), Felicio (1) por Uranga (min. 72), Beckham (1) por Reyes (min. 74). Árbitro: César Muñiz Fernández (2) del Colegio Asturiano mostró cartulina amarilla a Gerardo (min. 27), Díaz de Cerio (min. 41), Juanito (min. 68), y a Beckham (min. 78) y expulsó por cartulina roja a Aranburu (min. 73). Incidencias: 50.000 espectadores en el estadio Santiago Bernabéu. Los hinchas del fondo Sur del estadio desplegaron una bandera de España de grandes dimensiones antes del comienzo del encuentro. 25 grados de temperatura al comienzo del partido. DATOS DESTACABLES Lo mejor: José Antonio Reyes. El sevillano debutaba en el Bernabeu y salió por la puerta grande. Fue el más incisivo de su equipo e intentó siempre el desborde por la banda derecha con calidad. Certificó su actuación con un soberbio gol de falta desde 25 metros. Lo peor: Emerson El brasileño estuvo muy errático en la entrega del balón y su juego fue lento e intrascendente hasta que fue sustituido en el minuto 59 de partido. Sin él el Madrid mejoró. El dato: Partido número 500 de Capello entre Liga española y Calcio. El Real Madrid ha tardado 158 minutos en estrenarse como goleador en su estadio en la presente temporada.

Luciano Sabatini / Enviado especial

El conjunto blanco venía de una semana movidita en la que levantó las iras de sus aficionados ante la derrota y la mala imagen ofrecida en el partido de Champions frente al Lyon. Capello intentaba aplacar los ánimos realizando los dos últimos entrenamientos a puerta cerrada, lo que hacía pensar que introduciría cambios en su once tipo. Y así fue, Guti, que poco a poco va cogiendo forma tras su lesión entraba por Cassano y Reyes, que debutaba en el Bernabeu, cogía el sitio de Beckham, que había estado bastante desdibujado en los últimos encuentros. Pero los de Jose Mari Bakero no iban a ser un conjunto fácil, con los refuerzos que han fichado esta temporada. Así Garrido y Diego Rivas serían los encargados de dirigir a los txurri urdin desde el medio, mientras que el canterazo Díaz de Cerio formaba como hombre más adelantado.

El Madrid de Capello no funciona. Se pierde en el toqu sin saber a dónde va, y Emerson y Diarra no tienen el criterio ni la calidad necesarias para dirigir al equipo. Los blancos intentaron salir a dar miedo al rival con más empuje que calidad, pero la Real cada vez que cogía el balón se deshacía de la presión madridista con toques fáciles en el medio hacia las bandas, donde Bakero había colocado a Gari Uranga y López Rekarte muy abiertos. La paciencia del Bernabeu no tardó en colmarse con el juego lento e insulso de su equipo, y eran los dos medio centros blancos, Emerson y Diarra, los principales objetivos de los pitos. Ante la mala salida de la pelota que estaba teniendo el Madrid Guti tuvo que retrasar su posición y venir a recoger la pelota para distribuir con más claridad, momento que coincidió con las mejores jugadas de su equipo. El canterazo parece el único capaz de poner algo de claridad en el juego de su equipo. Otro que había salido con ganas fue José Antonio Reyes, que no paró de moverse por la derecha y colgar centros a pierna cambiada que nunca encontraron rematador franco.

Mientras la Real se mostraba bastante inoperante en ataque y solo las acciones de Uranga por la izquierda llevaban cierto peligro. El propio Uranga fue el que protagonizó el acercamiento de la Real en un tiro de falta que Casillas repelió con los puños. Al filo del descanso, y cuando el público se estaba desesperando, llegaría la mejor ocasión de los blancos, de las botas de Rayes que había sido la única figura rescatable hasta el momento. El sevillano dio un balón en profundidad a Van Nistelroy, y éste intentó la vaselina ante la salida de Riesgo, pero el cancerbero llegó a desviar y el balón se fue alto.

Despedida con pitos
Con la decepción del juego de los suyos, el público explotó con el pitido del árbitro que señalaba el final de la primera parte, y los jugadores eran despedidos con silbidos. El descanso, en este caso fue un bálsamo para los de Capello, pues con el cambio de Raúl Bravo por Roberto Carlos comenzaron mucho más motivados la segunda mitad. Guti retrasó su posición y quedó prácticamente como único medio centro, con lo que Emerson y Diarra quedaban desprendidos con facilidad. El juego de ambos perdió protagonismo, y eso fue bueno para el equipo. Capello pronto se dio cuenta de las necesidades de los suyos y sentó a Emerson, que fue despedido entre pitidos, para darle la alternativa a Robinho, y el juego del Madrid lo agradeció. Alrededor de Guti y Reyes el conjunto de Chamartín creció y comenzó a carburar sus mejores jugadas. El propio Guti remataba de cabeza a la salida de un córner un balón que la defensa txurri urdín sacó bajo palos.

A los veinte minutos el Madrid ya era otro. Van Nistelroy lo intentaba con una jugada personal por la banda que acabó en un recorte hacie el interior y posterior chut, pero Riesgo respondió bien colocado. El público también fue otro a partir de entonces; los madridistas son aficionados exigentes con su equipo, porque saben qué es jugar bien y qué no, y cuando el equipo hace un esfuerzo lo agradecen.

Lo mejor de la noche estaba por llegar. Muñiz Fernández pitaba una falta sobre la frontal de la Real, mostrando la amarilla a Juanito n la acción. El alón lo tomó Reyes y lo colocó con mimo, primero sobre el césped y luego en la escuadra izquierda de Riesgo. Era el premio merecido a una noche de esfuerzo y calidad del sevillano, y daba la ventaja y la tranquilidad a los suyos. Habiendo saboreado la gloria, Capello quiso darle un descanso y poco después abandonaba el terreno de juego con una tremenda ovación del Bernabeu.

Robinho fue otros de los culpables del lavado de cara del Madrid. El brasileño se mostró muy participativo e incesante en sus intentos de desborde por el sector izquierdo que cubría López Rekarte, pero no tuvo el acierto de otras ocasiones y en sus galopadas acababa perdiendo el balón tras los regates de rigor.

Serían tres minutos los que el colegiado asturiano añadiría al tiempo reglamentario, suficiente para que la Real intentara a la heroica conseguir el empate. Pero el destino tenía preparado un amargo final para los de Bakero, que a la salida de un córner donde se volcaron con todos sus hombres, vería como Beckham recogía el balón en su campo y comenzaba una galopada hasta plantarse solo ante Riesgo al que batiría por bajo. 2-0 y partido finalizado.

Con su victoria el Madrid consigue no descolgarse de la cabeza de la tabla, donde Barcelona y Sevilla parecen imparables contando sus partidos ligueros por victorias. Los realistas, por su parte, que se van de la capital con un castigo quizá demasiado severo para lo visto, certifican su mal comienzo de campeonato y quedan hundidos con los equipos de abajo con un solo punto.

SALA DE PRENSA

Capello (entrenador Real Madrid): “La verdad es que hemos visto a dos Madrid muy diferentes en ambas partes. En la primera jugamos con miedo, un poco parados, lentos. Pero en la segunda tocamos más rápido, más profundo y con cambios de ritmo y eso se ha notado. El resultado, tras la derrota en Champions, era muy importante y por ello me voy feliz”. “Estoy contento con la actuación de Reyes, es vertical, tiene un buen cambio de ritmo y puede jugar en ambas bandas, pero aquí nadie se gana el puesto fijo, porque la temporada es muy larga y cuento con todos”.

Bakero (entrenador Real Sociedad): “En la primera parte tuvimos la oportunidad de meterle mano al Madrid, pero no conseguimos enlazar nuestro juego, entre otras razones porque el Madrid es un conjunto que corta mucho el juego con faltas. Para mí el Madrid no es un equipo vulgar, sino que tiene unos hombres y una manera de jugar muy particular, que muchas veces en la historia ha realizado”. “Lo que más me preocupa es que entrenamos a un nivel y en los partidos parece ue nos quema el balón”.