Corea del Norte ha rechazado la oferta de diálogo de Corea del Sur para abordar las cuestiones pendientes tras el cierre del complejo industrial de Kaesong, indicando que debería centrarse en hablar sobre "cosas básicas" y reiterando que el futuro de Kaesong depende de su vecino meridional.
"Valiéndonos de esta oportunidad, recordamos a las autoridades surcoreanas una vez más que el futuro de Kaesong y de las relaciones Norte-Sur dependen completamente de su actitud", ha dicho un portavoz de la Dirección General de la Guía para el Desarrollo de la Zona Especial a la agencia de noticias KCNA.
Por ello, Pyongyang ha considerado que si Seúl "realmente quiere normalizar las operaciones en Kaesong, no debería proponer un diálogo sobre cosas no esenciales, como las materias y los productos acabados, sino sobre cosas básicas, y cesar las declaraciones provocadoras".
A este respecto, ha criticado las declaraciones de la presidenta surcoreana, Park Geun Hye, que confió en normalizar e incluso internacionalizar Kaesong en un diálogo intercoreano. "Son una astuta estrategia para evadir su responsabilidad en la crisis de Kaesong y confundir a la opinión pública", ha considerado.
El régimen comunista ha respondido así a la oferta formulada ayer por el Ministerio de Unificación de Corea del Sur para dialogar sobre las cuestiones pendientes de Kaesong, como la recuperación de las materias y de los productos acabados.
Seúl había propuesto a Pyongyang que las conversaciones tuvieran lugar en la localidad de Panmunjon, una zona desmilitarizada donde se encuentran la frontera común y que ya ha servido en el pasado para firmar acuerdos bilaterales.
Se trata de la tercera vez que Corea del Sur ofrece dialogar al Norte para reanudar las operaciones en el complejo industrial y que el régimen comunista la rechaza, atribuyendo en exclusiva la responsabilidad de esta crisis a su vecino meridional.
Cierre de Kaesong
El Gobierno de Kim Jong Un anunció el pasado 3 de abril que a partir de ese momento prohibiría la entrada a Kaesong de los trabajadores surcoreanos, y dio hasta el 10 de abril para evacuar a los 800 que entonces se encontraban en el complejo industrial.
Apenas cinco días después, Corea del Norte anunció la suspensión "temporal" de las actividades en Kaesong y la retirada de todos sus trabajadores para "analizar la situación y determinar si se autoriza su existencia o se cierra".
El complejo industrial se encuentra en la región administrativa de Kaesong, en Corea del Norte, a unos diez kilómetros de la frontera común. Desde 2004, cuando abrió sus puertas, 123 empresas surcoreanas se han asentado allí para dar trabajo a 54.000 norcoreanos.
Kaesong es uno de los escasos ejemplos de cooperación entre las dos Coreas, que técnicamente se encuentran en guerra, ya que tras tres años de combates se limitaron a firmar un armisticio para poner fin a las hostilidades, en lugar de un acuerdo de paz.