MADRID, 23 (SERVIMEDIA)
Un 11,4 % de la población entre 20 y 59 años cambió de situación laboral cada trimestre en España, lo que suponen 3,4 millones de personas, una situación que, en la mayoría de los casos, fueron protagonizadas por parados que se incorporaron o retornaron a la actividad.
Estas son algunas de las conclusiones del 13 'Observatorio trimestral del mercado laboral', coordinado por los economistas Florentino Felgueroso (Fedea) y Rafael Doménech (BBVA Research), que refleja que las transiciones desde el desempleo hacia la inactividad se han mantenido estables desde el fin de la pandemia y hacia el subempleo no han cambiado desde la crisis de 2008.
Más personas inactivas pasan al desempleo que al empleo, aunque la diferencia entre ambos flujos es menor que antes de la pandemia. Además, las transiciones hacia la actividad potencial siguen disminuyendo. Las salidas del empleo al desempleo vuelven a caer, como ocurría tras la Gran Recesión. Las transiciones del empleo a la inactividad han comenzado a bajar, revertiendo la tendencia previa a la pandemia.
Entre 2019 y 2024, el descenso de la rotación en el empleo asalariado se ha acelerado. En los menores de 25 años, también ha decrecido, sobre todo porque hay menos incorporaciones, mientras que las tasas de salida y de permanencia apenas han cambiado desde la reforma laboral.
Por su parte, el diferencial de tasas de empleo entre varones y mujeres ha menguado 10 puntos en los últimos 20 años. La tasa de empleo de las mujeres con estudios superiores se aproxima a la de los hombres, mientras que la de aquellas que tienen estudios primarios o menos sigue por debajo.
Además, las brechas de género en participación laboral retroceden, sobre todo entre la población de 25 a 55 años. Las tasas de paro y temporalidad de las mujeres continúan siendo mayores que las de los varones. El empleo parcial involuntario todavía afecta al 45% de la población ocupada a tiempo parcial.
PROBLEMAS DE CONCILIACIÓN
Durante la presentación del estudio, la profesora asociada de Cunef Claudia Hupkau pidió no favorecer el contrato a tiempo parcial porque eso perjudica a las mujeres, ya que suelen ser ellas las que cogen excedencias y rebajas de jornadas por cuidados de hijos, lo que "perjudica" sus opciones en el mercado de trabajo por el temor de los empresarios de que les suponga un mayor coste. Igualmente, dudó de que la reducción de jornada que impulsa el Ministerio de Trabajo con el apoyo de los sindicatos y el rechazo de CEOE y Cepyme sirva realmente para mejorar la conciliación.
De su lado, el investigador de Fedea Marcel Jansen puso el foco en cómo las mujeres todavía asumen más carga en cuidados familiares, lo que se hizo especialmente patente con el confinamiento en la pandemia, puesto que ellas incrementaron más las horas de estas tareas que los hombres. "El trabajo a distancia podría facilitar la conciliación pero vemos los datos que apuntan que hay que dar una repensada", reflexionó Jansen.
Por sectores, las mujeres se encuentran sobrerrepresentadas en actividades como la sanidad, la educación y el trabajo doméstico, mientras que su presencia es marginal en la construcción, el transporte o la industria extractiva, entre otros sectores. Su peso en el empleo en sectores tecnológicos crece, pero sigue siendo bajo en áreas clave, como las nuevas tecnologías.
Así las cosas, el informe de Fedea y BBVA Research resalta que la segregación ocupacional es elevada, incluso entre quienes tienen estudios superiores: más del 25 % de las mujeres (o de los hombres) tendría que cambiar de ocupación para lograr una distribución equitativa por género.
Aunque la brecha salarial se ha reducido, las mujeres siguen cobrando menos que los hombres, incluso tras considerar las diferencias de edad, formación, tipo de contrato, tipo de jornada, sector o tamaño de la empresa. Asimismo, el diferencial salarial ajustado es menor entre jóvenes (4 %) y mayor entre personas de más de 59 años (supera el 15 %). Mientras, el economista Florentino Felgueroso alertó de que si hay un colectivo que sufre la precariedad en la actualidad ese es el de las mujeres migrantes.
CREACIÓN DE EMPLEO
Por otra parte, el informe repasa los datos del mercado laboral del primer trimestre de 2025 y reflejan la creación de empleo, que se situó en el 0,6%, según datos de la Seguridad Social. Además, los registros de abril y la primera quincena de mayo anticipan que el dinamismo de la ocupación se prolongará en el segundo trimestre.
La población asalariada con contrato temporal creció más que la indefinida y la ocupada por cuenta propia, por lo que la tasa de temporalidad interrumpió la senda descendente iniciada en 2021. En este punto, Fedea precisa que las personas de nacionalidad extranjera explicaron el grueso de la creación de empleo y del incremento de la población activa.
Las horas trabajadas por el conjunto de la población ocupada disminuyeron debido a la reducción del margen intensivo, mientras el PIB por persona ocupada retrocedió por segundo trimestre consecutivo. "El crecimiento de la productividad por hora trabajada fue insuficiente para compensar el deterioro del margen intensivo", avisa el Observatorio.
"Tanto la tasa de paro como las restantes medidas de infrautilización de la mano de obra siguieron cayendo. Prevemos que los puestos vacantes avancen en línea con la población activa, lo que mantendría la tasa de vacantes en máximos desde 2010", añade. Ello, mientras el aumento de los costes laborales cobró impulso, sobre todo por hora.
El 'Observatorio Trimestral del Mercado de Trabajo' es un proyecto en el que participan Sagardoy Abogados, BBVA Research y Fedea. Se publica cada tres meses con el fin de analizar desde una óptica independiente la situación y la evolución del mundo laboral en España.
|