La física cuántica barcelonesa, de 33 años, apuesta por viajar a un mundo de ciencia ficción, a un mundo paralelo donde la fantasía y la veracidad se pueden combinar. Habla de la llamada “física cuántica”, con el objetivo de ver la vida desde otra perspectiva.

Cuántos años lleva dedicándose al estudio de la física cuántica?

Decidí estudiar física cuando estaba en el instituto y tenía curiosidad por conocer el funcionamiento del mundo y, al mismo tiempo, responder a algunas preguntas eternas que todo el mundo nos hacemos en un momento determinado. Me dediqué a la investigación desde que terminé la carrera y hace tan solo un año y medio dejé la búsqueda para dedicarme a la divulgación científica.

Y por qué le apasiona tanto esta materia?

Una de las cosas que nos regala toda la ciencia es poder comprender cómo funciona el universo y cómo funcionamos nosotros. La física cuántica me atrajo muchísimo porque daba una visión completamente diferente de las cosas, donde todas las posibilidades existen simultáneamente. Unas posibilidades rodeadas de magia cotidiana donde tus decisiones son más importantes de lo que aparentemente parecen.

Desde el punto de vista divulgativo, qué es la física cuántica?

Es un conjunto de teorías que nos explican cómo se comportan las partículas fundamentales, las más pequeñas, incluso más que los átomos. La física cuántica nos describe que estas partículas se comportan de manera muy extravagante, casi mágica. Nos dicen que pueden estar en dos lugares a la vez, que pueden atravesar paredes, que pueden transportarse o tener propiedades como el entrelazamiento (como si estuvieran en conexión, aunque situadas en extremos opuestos del universo), etc.

Cómo es posible que, gracias a la física cuántica, dos cosas puedan estar en el mismo lugar simultáneamente?

Aunque nos choque mucho porque nuestro sentido común y nuestra experiencia cotidiana nos dicen todo lo contrario, es posible. Una de las propiedades tan extrañas que nos describe la física cuántica es que, en el mundo microscópico, las cosas pueden estar en dos lugares a la vez pero también de dos maneras a la vez. Un experimento mental muy famoso es el del gato Schrödinger.

Imaginad que cogemos un gato y lo metemos dentro de una caja completamente oscura. A continuación, cogemos una bolita y la hacemos ir por un caminito donde, al final, hay una bifurcación. Si va por el camino de la izquierda, activará un dispositivo venenoso dentro de la caja y, como consecuencia, tendremos el gato muerto. En cambio, si elige el de la derecha, no activará ningún dispositivo y el gato estará vivo. El secreto era que la bolita era cuántica y, en lugar de decantarse por uno de los dos caminos, cogía los dos caminos al mismo tiempo. Como consecuencia, estaba activando y no activando el dispositivo y, como resultado, el gato estaba vivo y muerto al mismo tiempo.

Qué utilidad tiene y qué beneficios aporta a nuestra vida cotidiana?

A veces pensamos que la física cuántica está muy alejada de nuestro día a día pero no es así. Para explicarlo en términos económicos, más de un tercio de nuestra economía está basada en la física cuántica. Los microondas, los rayos láseres, las puertas automáticas de los supermercados o los transistores que llevan los teléfonos móviles funcionan gracias a la física cuántica. Por lo tanto, disfrutamos de las ventajas de esta ciencia más de lo que nos imaginamos.

Cambia, esta ciencia, la manera de ver la vida?

En el momento que te sumerges en este mundo, el concepto que tienes por “realidad” cambia muchísimo. Lo explico con el simple hecho de mirarte la mano: tienes conciencia que estás viendo algo sólido pero, en realidad, la mano está formada por átomos y por partículas diminutas como quads y electrones. Aunque nos parezca extraño, el 99’9999… por ciento de la mano está completamente vacía. Y todo esto me hace plantearme ver la vida de una manera muy diferente.

Qué es la teletrasportación y la teleportación, términos relacionados con la física cuántica?

No hay que confundir los términos. Transportación significa “a través”. La teleportación cuántica hace que una partícula cuántica, de éstas tan pequeñas, se pueda llevar de un lugar a otro sin desplazarse. Star Trec i Goku en Dragon Ball Z lo ejemplifican.

Y usted, además de ser física cuántica, es también escritora. Háblenos del último libro que ha publicado, La puerta de las tres cerraduras, que, sin duda, está siendo todo un éxito.

Me ha sorprendido gratamente y esto demuestra que hay mucha gente interesada por la ciencia. Yo ya llevaba años haciendo charlas de divulgación científica para un público no científico y, en una de éstas, un gran escritor me aconsejó plasmarlo en un libro para llegar a más gente.

Entonces pensé que si tenía que hacer un libro para hablar de física cuántica y que iría destinado a adultos, lo escribiría para niños, con magia y fantasía.

La historia trata de un niño de 14 años, Nico, que una mañana ve un mensaje en el techo de su habitación que dice: “si quieres que pasen cosas diferentes, deja de hacer siempre lo mismo”. A raíz de esta enigmática frase, aquella mañana, en lugar de coger el camino que siempre hacía para ir al instituto, coge otro. Finalmente, Nico descubre una casa con una puerta clausurada por tres cerraduras. Cuando consigue atravesarla se ve inmerso en el mundo cuántico y todos los fenómenos de teleportación, atravesar paredes, estar en dos lugares a la vez suceden. Pero llegará un momento que Nico, además de vivir aventuras, se tendrá que enfrentar a unos enemigos que no quieren que salga del mundo cuántico.

¿Próximo reto?

El estreno de mi próximo y segundo trabajo es la publicación de Quantic Love, una historia de amor y, a la vez, un libro divulgativo.

En conclusión, la fantasía y la física cuántica son términos complementarios. Es la física cuántica, magia?

La física cuántica nos describe cosas que son tan extravagantes y tan extrañas que chocan mucho con nuestra parte más racional. Entonces, utilizando la fantasía y la imaginación, estimulamos otra parte de nuestro cerebro, no sólo para entenderla, también para intuir este mundo microscópico de la física cuántica.

La física cuántica no es magia en el sentido que es una ciencia demostrada. No obstante, a la hora de explicarla sí es bonito estimular esta manera diferente de pensar, rodeándola con la fantasía. Es la fantasía la que también nos hace avanzar en la ciencia. Por ejemplo, cuando nos planteamos algo imposible o avanzar a pasos agigantados con las tecnologías y en la búsqueda científica.