Cuando estas líneas sean publicadas, la mayoría de ustedes estarán celebrando por todo lo alto el fin de año, así que les invito a una pequeña reflexión sobre la magnitud de los acontecimientos deportivos cosechados por los españoles en este año que ya expira, un 2006 que resultó triunfante para una gran parte de los deportistas españoles, y cuyo cénit lo protagonizaron los chicos de la selección española de baloncesto, que se proclamaron campeones del mundo en Japón.

Para los amantes del deporte de la canasta, 2006 siempre resultará especial. Algunas imágenes de aquella final contra Grecia han quedado ya grabadas para siempre en nuestra retina, como la del técnico, José Vicente 'Pepu' Hernández, devastado en su interior tras el fallecimiento de su padre, pero sumido en la emoción de la victoria definitiva, con la mano descansando sobre su corazón, que les convertía en el mejor equipo del mundo.

O el detalle de los compañeros de Pau Gasol durante la presentación previa a la disputa de la final, en la que todos vistieron una camiseta que rezaba "Pau también juega". Y de qué manera. El espíritu del de Sant Boi impregnó de tal manera al resto, que todos parecieron dar un poquito más de lo que sus cualidades, ya de por sí majestuosas, permitían.

¿Y qué me dicen de aquella primorosa defensa de la primera parte? En cualquier clinic sobre baloncesto, esos primeros veinte minutos, de auténtico librillo, deberían ser estudiados al milímetro. Es lo más cercano a la perfección que un servidor ha visto.

Gasol, ya recuperado, comienza a liderar, poco a poco, la remontada de Memphis, aunque el balance de 7-24 con el que concluyen el año, es desolador y todo apunta a que ésta puede ser la última temporada del catalán en los Grizzlies. En cambio, Jorge Garbajosa se ha revelado como el pilar de los Raptors y aspira a hacerse con el trofeo al mejor 'novato' del año.

Calderón sigue consolidándose en la NBA, mientras que Sergio Rodríguez, aún con mucho trayecto que recorrer, apunta alto en Portland a pesar de los pocos minutos que disputa. En España, la sorpresa más agradable es Marc Gasol, que se ha convertido en la pieza fundamental del Akasvayu, y en donde, de la mano de Pesic, se está forjando como pívot dominante.

En el Madrid, Felipe Reyes y Álex Mumbrú llevaron al conjunto de Joan Plaza a una serie inmaculada de 13 victorias. En las dos últimas jornadas, han perdido fuelle debido a las bajas de Raúl López -que podría estar perfectamente en el Eurepeo de 2007-, de Venson Hamilton y del propio Mumbrú.

En Málaga, Carlos Jiménez parece ir despertando. Le costó aclimatarse al juego de Scariolo, pero ya es clave en sus sistemas. Cabezas está cosechando una magnífica temporada, al igual que Berni, que ha alcanzado la madurez en su juego.

Y en Cataluña, Navarro y Rudy siguen liderando a sus respectivos equipos aunque con distintos resultados, ya que el Barcelona está sumido en una grave crisis de resultados, aunque posiblemente alcance el objetivo final de llegar a la Copa del Rey, mientras que el DKV mantiene un año más la espectacularidad y buenos resultados de su juego.

Por detrás, vienen empujando fuerte hombres como San Emeterio, Germán Gabriel, Ricky Rubio, Carlos Súarez, Andrés Miso o Jordi Trías que le pondrán las cosas difíciles a 'Pepu'.

¡Hasta siempre, 2006! ¡Bienvenido, 2007!