Carl Froch unificó los títulos FIB y AMB supermedios al vencer a Mikkel Kessler por Decisión Unánime en un evento de los que crean afición.
El combate de revancha entre los dos campeones mundiales no tuvo desperdicio alguno y cumplió todas las expectativas. Esta vez le tocó a Kessler viajar hasta casa de su rival para enfrentarse a él y a una gran fanaticada.
Desde el inicio del primer asalto Froch puso su ritmo y marcó su distancia con su peculiar jab de izquierda de manera constante. Jab, jab, jab para luego doblar con su poderosa derecha con la que da un paso adelante y mete todo el cuerpo. Kessler, cerrado en guardia observando por donde podía contrarrestar la iniciativa del inglés pero no encontraba el momento, sucediéndose los asaltos y adjudicándoselos el de Nottingham. Un ritmo que el danés rompía con algún destello de su calidad conectando un par de golpes potentes y certeros en combinación pero que Froch asimilaba como de costumbre aunque pasase dificultades. Sin embargo fue el inglés quien le puso en más de un apuro con sus combinaciones explosivas y llegó en más ocasiones.
Al final de la contienda parece que Kessler se apuntó algunos asaltos e incluso en el undécimo llegó con más claridad a un Froch mermado por el cansancio, pero con un corazón tan grande que se repuso en el último asalto para casi llevar a la lona al danés con su perseverancia. Memorable.
Todo finalizó con un gran abrazo por parte de ambos púgiles en el centro del ring ovacionados por el aplauso de miles de aficionados en un combate marcado por el afán de superación, el esfuerzo, la técnica y sobre todo el respeto por el rival y el reconocimiento de su trabajo, como así lo demostraron en sus declaraciones realizadas en la entrevista posterior al evento.
Kessler queda con marca de 46-3 (35 Kos) y Froch con los cinturones FIB y AMB y un record de 31-2 (22 Kos). Ya vengó su derrota y ahora apunta a una revancha con su otro verdugo, Andre Ward, quien desde la cadena HBO donde estaba comentando el combate no descartó la posibilidad. Algo es seguro, y es que no será el mismo Froch que el de la primera vez.
Carl Froch unificó los títulos FIB y AMB supermedios al vencer a Mikkel Kessler por Decisión Unánime en un evento de los que crean afición.
El combate de revancha entre los dos campeones mundiales no tuvo desperdicio alguno y cumplió todas las expectativas. Esta vez le tocó a Kessler viajar hasta casa de su rival para enfrentarse a él y a una gran fanaticada.
Desde el inicio del primer asalto Froch puso su ritmo y marcó su distancia con su peculiar jab de izquierda de manera constante. Jab, jab, jab para luego doblar con su poderosa derecha con la que da un paso adelante y mete todo el cuerpo. Kessler, cerrado en guardia observando por donde podía contrarrestar la iniciativa del inglés pero no encontraba el momento, sucediéndose los asaltos y adjudicándoselos el de Nottingham. Un ritmo que el danés rompía con algún destello de su calidad conectando un par de golpes potentes y certeros en combinación pero que Froch asimilaba como de costumbre aunque pasase dificultades. Sin embargo fue el inglés quien le puso en más de un apuro con sus combinaciones explosivas y llegó en más ocasiones.
Al final de la contienda parece que Kessler se apuntó algunos asaltos e incluso en el undécimo llegó con más claridad a un Froch mermado por el cansancio, pero con un corazón tan grande que se repuso en el último asalto para casi llevar a la lona al danés con su perseverancia. Memorable.
Todo finalizó con un gran abrazo por parte de ambos púgiles en el centro del ring ovacionados por el aplauso de miles de aficionados en un combate marcado por el afán de superación, el esfuerzo, la técnica y sobre todo el respeto por el rival y el reconocimiento de su trabajo, como así lo demostraron en sus declaraciones realizadas en la entrevista posterior al evento.
Kessler queda con marca de 46-3 (35 Kos) y Froch con los cinturones FIB y AMB y un record de 31-2 (22 Kos). Ya vengó su derrota y ahora apunta a una revancha con su otro verdugo, Andre Ward, quien desde la cadena HBO donde estaba comentando el combate no descartó la posibilidad. Algo es seguro, y es que no será el mismo Froch que el de la primera vez.
Este deporte siempre ha estado rodeado por una mística muy especial, se asocia a una forma de salir de la vulnerabilidad en entornos más humildes. En otros contextos, es una buena opción para ganar en protección, en autodefensa, y con ello en autoestima y confianza. En los últimos años, es tendencia practicar este deporte pero sin enfrentarse a golpes por parte de un contrincante.
Su victoria por sumisión al irlandés le ayudan a elevar su figura, su leyenda en la UFC y a mantener un cinturón de peso ligero que parece que se conservará en su poder durante mucho tiempo.
Un implacable Floyd Mayweather se apuntó la victoria en el décimo asalto por K.O técnico ante el especialista en artes marciales Conor McGregor en el esperado combate celebrado en Las Vegas, donde el boxeador estadounidense cimentó su legado con el mejor récord histórico de victorias (50-0).
