| ||||||||||||||||||||||
| ||||||||||||||||||||||
Todo depende de todo, hasta nuestra propia energía está en manos de la salud del planeta; por cierto, bastante aquejado de nuestro modo de actuar. Lo nefasto es que aún no enmendemos la locura que nos demuele. Proseguimos destruyendo la diversidad biológica, echando abajo los bosques naturales, contaminando las aguas, el suelo y el aire, arruinando zonas húmedas, después de tantos años advirtiéndonoslo la propia naturaleza a través del cambio climático.
|